El Matrimonio (MoonSun)

Firma el divorcio

Yongsun no se esperaba una visita indeseada tan temprano, pero ya le había abierto, no podía fingir que no estaba, así que la dejó pasar.

La mujer que básicamente ya era parte de la vida de ella de sus hijos entró mirándola despectivamente por la apariencia que tenía en ese momento y es que estar en pijama no era la mejor presentación para alguien que estaba vestida como modelo de revista.

-¿A qué se debe tu grata visita?-Preguntó cruzándose de brazos, no dejándose intimidar por aquella mujer.

-No sabía que hoy era el día perezoso.

-Bueno Seulgi, creo que yo gasto mi tiempo como yo quiero así que no me hagas perder tiempo y dime a qué viniste.-Sonrió con arrogancia pero expectante de lo que fuera a decir.

-Tranquila Yong, mi visita es breve, sólo venía a dejarte los papeles del divorcio.

A Yong se le borró la sonrisa cuando escuchó eso, sintiendo el cubo de agua fría caer sobre ella, regresandola a la realidad que estaba viviendo durante varios meses, ella y Moonbyul se estaban divorciando.

-Moonbyul ya firmó, sólo falta que tú lo firmes.-Le dejó los papeles en la mesa y se dirigió hacia ella.-De verdad lo lamento, Yongsun.

-No, tú no lo lamentas, tú estás sintiendo una enorme satisfacción.-La miró a los ojos con enojo y Seulgi le sostuvo la mirada con seriedad.

-No asumas cómo me siento, Yong. -Respondió antes de despedirse con una reverencia y retirarse, dejando a Yongsun sola en su casa.

...

Llegaron a la casa después de una desastrosa cena, ya que Moon se había enterado de lo que había hecho Seulgi cuando a su celular llegó un mensaje de Yong que decía "Mensaje recibido, Byul, tu novia ya me dió los papeles del divorcio". No sólo se sentía molesta sino traicionada también, dejando ver su estado de ánimo al hacerle la ley del hielo a Seulgi quien no paraba de hablarle para que le hiciera caso.

Después de que Moon prácticamente se arrancara la corbata de su cuello, habló.

-¿En qué planeta entregarle a mi esposa los papeles del divorcio es buena idea?-Preguntó entre dientes, mirando a Seulgi para que le diera una explicación.

-Lo lamento, pensé que te estaba haciendo un favor, lo hice por ti.-Le dijo con suavidad intentando convencerla y de paso calmarla para que olvidara esta situación.

-No, lo hiciste por nosotras.

-Sí, está bien, lo hice por nosotras, pero es que tú sólo me dabas largas diciendo que le darías pronto esos papeles y nunca te atreviste a tocarlos, han pasado meses, ya debiste haberlo superado o al menos estar lista para hacerlo.-Soltó toda su frustración esperando que lo entendiera pero grande fue su decepción cuando no fue así.

-No Seulgi, no estoy lista y nunca voy a estarlo, pasé veintitrés años de mi vida con esa mujer, no es tan sencillo.-Le explicó suspirando.

-Claro, siempre dices eso pero de todas formas siempre estás al pendiente de lo que le pasa, varias veces cancelamos planes por su culpa, ¿Hasta cuándo dejaré de ser siempre la segunda opción?-Le reclamó frunciendo el ceño, a lo que Moonbyul la miró incrédula.

-Es la madre de mis hijos y ella siempre me va a importar, siempre estará primero, si no estás dispuesta a aceptarlo entonces no creo que podamos seguir con esta relación.-Respondió.

Seulgi se sorprendió al escuchar eso pero no iba a estar dispuesta a quedarse en un relación donde parecía ser ella la tercera en discordia, sin embargo, tampoco iba a negar que escucharla decir aquello, le dolió, por lo que antes de sacarla y de salir de su vida para siempre, le hizo aquella pregunta que siempre le aterró y quiso negar, pero que parecía tener una respuesta obvia, dándole sentido al por qué de sus problemas.

-Solo respóndeme esto, ¿Tú aún la amas?-Preguntó con miedo, pero al no escuchar respuesta alguna de ella, se decepcionó.-Wow... -Iba a irse pero no sin decirle unas últimas palabras.-Yo sí te amaba, Moonbyul, y habría hecho cualquier cosa por tí, pero acabas de romperme el corazón.-Le dijo con los ojos llorosos y se fue, dejando a ahora su ex novia en aquella casa.

...

Yong entró al aquel restaurante/bar donde Moonbyul le había dicho y al divisarla en la barra libre, caminó hacia ella con los papeles del divorcio a su lado hasta llegar a ella.

-Eres una cobarde, mandar a tu novia para que me diera los papeles del divorcio, al menos pudiste ser más decente.-Le dijo fingiendo ser fuerte por el miedo que le estaba invadiendo; algo que le decía que ese sería su último día casada.

-No le dije que te los enviara.-Se terminó su whisky con calma, hoy no tenía ganas de pelear, sólo de pensar.

-Pues eso pareció, no sé cómo encuentras siempre la forma de dejarme sin palabras, una serenata y hasta podría haber llorado.-Respondió con sarcasmo haciendo que Moonbyul suspirara.

-Yo ya no sé qué es lo que quieres. -La miró frustrada.

Yong miró por unos momentos aquellos ojos oscuros y casi se pierde en ellos si no fuera porque en sus manos tenía lo que podría terminar con todo, así que los puso en la barra y Moonbyul miró brevemente los papeles antes de volver a mirarla a ella.

-¿Eso es lo que quieres Moonbyul , ¿Terminar con el matrimonio?-Le preguntó con una pequeña esperanza de que dijera que no.

Moon se quedó callada, la verdad no sabía qué contestar a esa pregunta, pero su expresión fue suficiente para que Yongsun sintiera un golpe en el corazón que simplemente la hizo asentir.

Con decisión en sus acciones, tomó la pluma y firmó aquellos papeles que darían por terminado todos esos años de matrimonio en el que compartieron un sin fin de aventuras, sorpresas, aniversarios, sonrisas, llanto, abrazos, sexo.

Ya no podía ni mirarla, pero aún con el dolor en su corazón, miró nuevamente aquellos ojos que durante años le fascinaron, dedicándole una mirada que no podía descifrar y sin decir nada más, se fue, dejando a su ahora ex esposa en aquel pequeño restaurante/bar.