Spoiler: Mis reflexiones medio fumadas a raíz de lo nulo que se del budismo.
Gracias a july15204 por hacerme conocer este ship, ya que me vieron ganas de probarlo.
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Pasando por su lado devuelta a su templo, la presencia del Santo de Virgo le era extraña al toro. Era un hombre muy delgada, pero su presencia era aterradora. Un hombre cínico sin miedo a castigar de formas crueles, eso le agradaba.
Pero como Harbinger no entendía nada de Budismo. Menos si Fudo era genuinamente un dios como se hacia llamar. Le parecía bastante raro escucharlo hablar de iluminación y quien sabe cuanta paja más viendo su historial en pelea.
Fudo de Virgo se le hacia contradictorio. Al final de cuentas. Más no molesto, como si le pasada con cierto caballero de Libra siempre hablando como si lo estuviera reprimiendo cada que abría la boca.
Rara vez hablo con Fudo sus primeros meses en el Santuario. Él dejo bien en claro que solo acepto la palabra del fuerte, si Athena se creía la fuerte pues estaría con ella para comprobarlo.
Le tomo casi un años, pero lo logro. No obstante, también demostró ser muy impulsiva para ser la diosa de la sabiduría.
A su lado, Seiya sonreí ayudándolo a arreglarse por lo divertido de la situación. Como le costada vestir formar y arreglado en vez de agarrar cualquier cosa que tuviera, ahora que era el patriarca.
- ¡No te rías y ayúdame! Mis manos son muy grandes para esto. - Se quejada. El castaño por su parte tuvo su acto de piedad y se paro frente a él para ayudarlo con la ropa.
- Perdona si te ofendo. Pero es divertido ver al destructor de huesos, teniendo problemas con unos botones. - Termino. Por sugerencia de Saori, Seiya estaría por unas semanas como concejero de Harbinger. El conocía de manera perfecta cada rincón del campo de batalla, así que era el único que Harbinger acepto. Mientras se adaptada a su nuevo puesto.
- Supongo que te será un privilegio ser tan enano entonces. - Se burlo. Seiya golpeo débilmente el pecho del toro, fingiendo sonreír.
- Vamos, Saori nos espera. - Y así hicieron. El resto de la orden ya los estaba esperando, junto a los héroes santos de bronce. El toro suspiro en su mente ya que abrir la boca no quería, solo quería terminar esta presentación.
Los primeros días fueron calmados para todos, Harbinger enserio daba de si para mejorar con la ayuda del castaño a su lado. Fue en el trascurso de un mes que le sorprendió la llamada de virgo pidiendo una conversación con él, tampoco es que pudiera negarse. Acepto rápido, para que negar que tenia curiosidad. Así que solo le informo que el bajaría a su templo esa noche a las 9.
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- Me sorprende que quisieras venir. - Sentando en su plataforma el moreno le residió. Todo el cuarto tenia una decoración extraña de la cual nunca le tomo importancia. Un jardín, pero él con 2 armas a su lado.
- Quería caminar un poco. - Se sentó a su lado. Apoyando el brazo derecho en el piso y el izquierdo en su pierna flexionada.
- No cambias. Pero bueno, solo quería felicitarte. Una de las razones del porque creí el mi amigo Marte es porque desde pequeño, crecí viendo el caos de la vida. Cosas que las tu pasaste a temprana edad, y me alegra ver como, no solo tu, si no todo ser vivo aferraste a la vida hasta mejorar. Es parte de la iluminación en la que creo, ser mejor de si.
- No te estoy entendiendo. - Fudo rio.
- Mejor así. - Moviendo su mano le resto importancia al asunto. Harbinger sonrió de medio lado. Ya estaba allí, así que prefiero mantener una conversación.
- Por cierto, hablando de todo eso de la iluminación, me entro curiosidad. ¿Por qué te quedaste tu con Athena?
- Curiosidad. No tengo afecto en nada hacia esta armadura, pero... Creo fervientemente que los planes de Marte hubiera fracaso. Veras, no considero que sea correcto buscar un cambio de un solo golpe. No hay esfuerzo que haga que creer se merece. ¿Los humanos merecen su "Privilegio"? No lo sé. Los humanos somos luz y oscuridad en un mismo cuerpo, no somos egoístas por naturaleza, pero tampoco somos amor por naturaleza. Tu eres un ejemplo perfecto. Marte tarde o temprano se hubiera topado con asesinatos, muertes, cualquier cosa mínimamente negativa, ¿Qué hubiera hecho? No lo sé. Quise apoyarlo, solo por curiosidad. Así como estoy con Athena,
- Pide un deseo para que tu enemigo desaparezca, ¿Qué pasara entonces? Que será de él? Sus baños serán reparados? A eso te refieres?
- Más o menos. Ahora, espero que me dejes ver que el tuyo valió la pena. ¿Qué mejor Liber que quien conoce lo peor y sabe como enfrentarlo?
- Sabes como subirme el ego aunque no sea tu intención, ¿Sabias? - Otra vez, virgo rio. Entreabriendo los ojos, Harbinger se lamio los labios notando que Fudo podía verse bastante atractivo cuando no parezca que este lo deseara. No obstante, las emociones que Harbinger parecía estar reflejando si eran capaces de ser percibidas por Fudo.
- Bueno, espero que tu ego sea tan bueno como tu cara entonces. - Le dio un incentivo. De ese pequeño fuego que Harbinger parecía tener faltada ver que podría salir.
- No sabia que a Virgo, el más cercano a dios le gustaran las hombres. Pero descuida, yo no discrimino. - Y parecía que ese resultado no seria del todo malo. - Espero tener tu apoyo también, sabes bastante del exterior no.
- Si necesitas accesoria puedes venir cuando lo desees.
Y así hicieron. El tiempo siguió su curso e hizo su trabajo, por lo tanto en una sección de 2 meses Seiya había vuelto a su cargo como Santo de Sagitario, 4 meses despues de eso. Harbinger y Fudo empezaron una nueva relación, una de amantes, por momentos estaban dominados por fuego. Pasión y deseo que pudieran tener. Pero fuera de eso, ambos parecían complementarse bien, tenían el equilibrio entre uno y el otro.
