Los juegos de la fama {R5}

Capitulo 35 - Cenas.

*Ryland P.O.V* ← (O si baby, leíste bien)

Bel corría de un lado a otro murmurando algo sobre que había guardado un pantalón en algún lugar. Quince minutos más tarde, salio arreglada del baño.

- Bien, acompañame a buscar un abrigo a nuestro cuarto... - Murmuré. Afuera hacía frío, no saldría sin un abrigo, ni lo sueñen.

La niña quedo con la expresión en blanco. Y luego sonrió, como si fuera una maniática.
Por mi mami, la pobre niña daba miedo.

- ¿Yo? ¿En el cuarto donde se esta hospedando R5? Ya que ellos no están, ¿Vale llevarse algún recuerdo? No se.. Quizás, ¿Cabello del cepillo de Rydel? - Murmuro, con aire soñador.

Rodé los ojos y le hice una seña de que me siguiera.
Abrí la puerta de la habitación, dejando a la vista las 6 camas.

- ¿Donde duerme Riker? - Se apresuro a preguntar Bel. No respondí, temía que se refregara contra la cama como un felino.

Busque en mi maleta una chaqueta, genial, no había traído ninguna.
Gire mal mirada y vi la mochila y la valija de Ross, entre abierta. Perfecto.

Finalmente me quede con una chaqueta negra del rubio.

Volví a mirar a Bel, que estaba tirada en el suelo, buscando cabellos sueltos...

- ¡Oh! ¿Estas aburrida? ¡¡Ya sé!! ¿Quieres ver mi pandereta? - Comence a correr y buscar otra vez en mi maleta.

- ¿Tu qué? - Pregunto la niña volteandose.

- Mi pandereta! ¡Puedo tocar "Loud" con ella! - Sonreí, encontrándola en el fondo y sosteniéndola en el aire triunfalmente. - ¡¡Aqui estas, bebé!! - La abrace.

- ¿Esa cosa? - Pregunto la niña, mientras revisaba el bolso de Ratliff. - Oye, ¿este bolso de quien es? - Fruncio el ceño. Si no fuera tan maniatica, creo que seria tierna con esa expresión.

- Ellington. - Concluí, sacando una de mis gorras y colocandomela al revés. - Bien, aqui voy. - Moví mi pandereta.
La musica, tan hermosa, aumentada por mi talento en el instrumento, sonaba de lujo.

- Ay! ¡¡Calla ese aparato del demonio!! - Grito Bel tapándose los oidos.

- ¿Perdon? ¿Que has dicho? - Dije tirando mi pandereta al suelo. - Tienes razón, ya no sirve. - Me encogí de hombros.

..
Cuando llegamos al restaurante, Puki, Bel y yo tomamos asiento en una de las mesas del fondo.
El lugar parecía familiar, una pizzería normal, dirían muchos.
Una canción de "Phoenix" sonaba en el lugar.

- Quiero un choripan con chimichurri. - Dijo Bel.

- ¿Qué? - ¿Que caca es un choripan?

- Choripan, Rylandesa, pan con chorizo. Chori.... Pan... -
Por eso fui una sola vez a Argentina, no entiendo un pomo.

- ¿No preferís una pizza? Digo.. Es una pizzería. - Mire el lugar exageradamente.

- Deja me consultar con Puki. - Levanto un dedo, indicándome que esperara un segundo.
Se acerco al can, que estaba dentado en una silla para bebes, y le susurro algo.

- Puki dice que quiere Pizza. - Se encogió de hombros. El perro lamió la servilleta q tenia frente a él. - Ah, si, casi lo olvidaba. Y un par mas de servilletas, dice que se ensucia mucho con la salsa de la pizza.