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Desde hace días los cuatro chicos habían estado trabajando sin parar, pues tenían muchas cosas que hacer y realmente no quedaba mucho tiempo.

Han sido noches incontables en las que Sunoo y Sunghoon no han podido dormir, pues cada vez era más trabajo y es que el alfa pensaba que era algo fácil, solo era decorar el salón y hacer el baile, pero no, no era así. La decoración, la orquesta, el banquete los trajes, invitados y cientos de cosas de las cuales jamás pensó que tendrían que hacer.

-¿No es muy tarde para estar trabajando?- murmuró el alfa entrando a su habitación, mientras le hacía un tierno puchero a su mayor.

-No puedo Sunghoon, mañana es el baile y aún hay cosas por hacer- respondió el omega quitándose la mascarilla del rostro.

-No son muchas por hacer, me he encargado de todo hoy junto a Nicholas- bostezó el menor mientras se tiraba a la cama de Sunoo.

-No me refiero a eso- suspiró de manera fuerte Sunoo, mientras pasaba su mano por su cabello llevándolo hacia atrás.- Hay cosas que hacer en la otra empresa, no puedo dejarle a Hee todo, está cuidando de Jungwon y también de Jay, mis padres apenas pueden encargarse de el, por lo que soy yo quien siempre cuida de el.

-Ohh, también te ayudé con algunas cosas de la otra empresa, Heeseung hyung me dijo que estabas lleno de trabajo. Me explicó como podría ayudarte con algunas cosas del trabajo, y lo hice, me felicitó por mi buen esfuerzo.- alardeó el menor dándole una sonrisa a Sunoo.- Además se ve que no has dormido bien, se nota en tus ojeras- mencionó lo último, mientras veía a Sunoo rodar sus ojos.

-Son casi 8 días sin poder descansar bien, ¿te parece poco?- le preguntó el omega, bajando de su cama para buscar en su tocador un empaque que traía sus mascarillas para ojeras. -¿Quieres unas?, tal vez así se te quite lo feo- se burló Sunoo, mientras se colocaba unas.

-Soy muy bonito, Jungwon me lo dice siempre.

-Creo que aparte de no saber guardar tus secretos, Jungwon también es ciego- rió Sunoo mientras lanzaba un empaque en la cama para que Sunghoon lo usara.

-No sabes apreciar mi belleza, seguro habrá otros omegas que si- se encogió de hombros el menor, viendo a Sunoo rodar los ojos, mientras soltaba un pequeño bufido.

-No es mi problema con quien salgas y realmente no es algo de mi interés.  Igual mi padre ya está buscando un prometido para mi. Estarás en primera fila mi boda, de eso no te preocupes.- dijo Sunoo con una sonrisa maliciosa, pues si Sunghoon quería jugar el también lo haría.

-¿T-te casarás?- tartamudeó el menor, mientras sentía sus ojos humedecerse. Menos mal y la luz estaba apagada, pues no quería que Sunoo lo viera llorar por algo como eso.

-Tal vez sea con Heeseung, mi padre dijo que es el candidato perfecto- mencionó Sunoo, mientras se acostaba a su lado.

-Felicidades... supongo- murmuró bajamente lo último, pero obviamente fue escuchado por Sunoo, quien empezó a carcajear por lo triste que se escuchaba Sunghoon.

Pronto escuchó los sollozos del alfa  haciéndolo carcajear aún más fuerte. Podría gustarle su menor, pero aún así, eso no quitaba lo malvado que podría ser a veces. -No llores, es una mentira. Bueno no es mentira, pero me negué a casarme e incluso mi padre insistió que Heeseung viniera conmigo, dijo que podríamos darnos cuenta si sentíamos algo por el otro y podríamos enamorarnos , pero todo eso es una basura.- rió bajamente el omega negando con la cabeza.

-H-Heeseung es perfecto para ti y estoy muy feliz por ustedes, es un buen candidato y el está a tu nivel. - sorbió su nariz el menor, mientras le daba la espalda a Sunoo.

Mi pequeño alfita (sungsun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora