Una Última Promesa

Capítulo 1

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Era una fría noche de invierno, y las calles yacían desoladas y extrañamente silenciosas, la luz de la luna se reflejaba en las ventanas de las casas, llenando la noche con su calida luz.

Se apoyo en el respaldo de su asiento mirando al techo de madera, una lágrima resbaló por su mejilla cayendo al frío suelo de madera seguida por muchas más, se levantó retirándose su capa de hokage, limpiando las lágrimas en el acto, la acomodo en el escritorio e camino hacia la puerta a paso lento, abrió la puerta encontrándose con su fiel amigo Shikamaru

-¿ya te vas?—lo miro notando algo raro
-jeje si, pensé que ya te habías ido Shika—sonrió rascandose la nuca nervioso—Temari debe de estar enojada—río al ver la cara de fastidio de su amigo
-que problemático—suspiro resignado
-bueno Shika yo me voy y te aconsejó que hagas lo mismo—se giro para irse borrando al intante su sonrisa
-¿vas a volver?—pregunto mirando a su amigo que se detuvo casi de inmediato
-que tonteria dices Shika claro que tengo que volver mañana, el papeleo me espera jeje—se río levemente girando a ver a su amigo que lo miraba serio
-puedes mentirle a cualquier persona pero a mi no, ¿vas a volver—se acercó a paso lento hacia Naruto que estaba paralizado
-No—respondió con sincerida—¿vas a detenerme?—lo miro serio borrando su alegre sonrisa
-No—respondió al llegar al frente de Naruto—sería muy problemático para mi—suspiro—solo cuidate y disfruta lo que te queda—sonrió abrazando a Naruto para pasar al lado de el con una sonrisa en cara
-¿tu lo sabes?—pregunto aún en shock
-problematico..—susurro por lo bajo—que importa si lo se, no eres muy bueno mintiendo ¿sabias?—se fue dejando a un sorprendido Naruto.

Camino por el oscuro pasillo pensando en lo que acababa de suceder y sonrió feliz por su amigo
-sabía que no era lo tuyo estar encerrado 24/7—penso soltando un suspiro mientras tenía una sonrisa de medio lado..

                          ★★★

Iba saltando rama por rama llegando después de un largo y agotador camino a Konoha, llevaba casi 7 años sin visitar Konoha, era de noche y pensaba en ir a ver a su único amigo e amor prohibido.. Naruto.. Entró a la aldea caminando por las desoladas calles hasta llegar a la torre del Hokage, al ver la torre oscura y desolada lo único que se le ocurrió fue que Naruto ya estaba en su casa. En un momento pensó en ir a ver a su hija y a Sakura pero no queria, se sentía culpable por haber dejado sola a su hija tanto tiempo y ahora volver como si nada sucediera. Salto al tejado de una casa, corrió saltando de tejado en tejado hasta llegar a la casa que Naruto compartia con Hinata y sus hijos, bajo de un salto al frente de la casa para proceder a tocar suavemente la puerta principal. Se sorprendió al ver a un niño rubio abrir rápidamente la puerta y intentar golpearlo, por reflejo atrapó el puño antes que pudiera tocarlo.

-ohh.. eh.. lo siento pensé que era mi papá—se alejo disculpándose
-Ya veo—lo miro analizandolo notando su gran parentesco con su amigo—¿tu eres el hijo de naruto?..¿tu nombre?—
-eh Boruto.. Uzumaki—
-¿Quien es Boruto?..—interrumpio la esposa de el Hokage prendiendo la luz curiosa—Oh.. Sasuke-san...¿que te trae por aqui?-
-¿esta Naruto?—
-No, creo que sigue en la oficcina—respondió cabizbaja triste, yacía tiempo en que Naruto llegaba muy tarde y había veces en que no llegaba a casa
-Ya veo, lamento molestar—se retiró con un mal presentimiento, si Naruto no estaba en su casa ni en la Oficina ¿donde estaba?.—

Recorrió toda la aldea en busca de encontrar a su amigo, busco en cada rincón de Konoha pero no lo logró encontrar, al final decidio que mejor era ir a ver a su familia y que probablemente mañana aparecería Naruto, le preguntaría donde estuvo anoche, fácil ¿verdad?

                          ★★★

Suspiro cansado había llegado a la aldea de la cerradura, fue un poco complicado encontrarla ya que yacía escondida, entró a la aldea tranformado en un chico joven castaño y ojos violeta, algunos aldeanos lo vieron extrañados. Se dirigió a una posada, en la cual pidió una habitación.

Camino hasta la habitación 123 a paso lento medio adormilado.

-tengo sueño Dattebayo—se detuvo al frente de su habitación y la abrio, era bastante espaciosa y incluia un jacuzzi

-¿y ahora que piensas hacer cachorro?—pregunto una voz familiar en su cabeza
-bueno.. Ero-senin tenía una pequeña cabaña en la aldea de aguas termales, supongo que me escondere un tiempo haya.. Y después.. Bueno.. No se—le respondió dirigiéndose hacia el baño—después sabre que hacer ahora necesito un baño—entró al baño y se desvistio hasta estar completamente desnudo, se metió a la bañera.
-mmh..-

CONTINUARA..

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