Un Amor Im(posible) - Elizabeth Olsen Y Tú.

Nosotras dos.

Pov T/n.

Despierto estirando los brazos y las piernas, he dormido tan bien, después de mucho descanso de esta manera. Al observar a mi alrededor me di cuenta que estaba a sola.

Me levanto y voy al baño para ver si ella estaba allí pero no, aproveché para lavarme el rostro, peinarme un poco, lavarme los dientes y colocarme un pantalón. Dormir en los brazos de Lizzie es lo mejor, el despertar sin ella se siente como el fin.

Salgo de la habitación para buscarla, bajo las escaleras con cuidado y mis ojos captan a la mujer más hermosa bailando y cantando un poco mientras prepara el desayuno. Es casi imposible no pensar en un futuro con ella así, se ve muy bonita.

Me apoyo en el marco de la puerta y sigo viéndola, está de espaldas. ¿Por qué no se dedicó a ser cantante también? Su voz es mágica.

Termina la canción y doy varios aplausos, Lizzie da un pequeño salto mientras se da vuelta con una de sus manos en el pecho.

- Me ha encantado este concierto gratis -suelto una risita al ver su cara de susto.

- Dios, no vuelvas a hacer eso, por favor -suelta el aire que se le quedó atorado y sonríe.

- Lo siento, pero has cantado y bailado fenomenal -me acerco y me siento en uno de los taburetes de la isla- Buen día, ¿necesitas ayuda?

- Tú eres fenomenal, buen día -me regala una sonrisa- Y no, ya he terminado. Tenía el plan de llevarte el desayuno en la cama pero creo que fallé -me hace un puchero.

- Si quieres vuelvo y me hago la dormida -bromeo y ríe.

- Tonta -coloca unos panqueques en ambos platos con dos tazas de café- Toma, tu plato y un poco de café -desliza el plato y la taza hacia mí- Espero y te guste.

- Gracias Lizzie -nunca me han hecho el desayuno, no de esta manera- Pero primero necesito algo -digo tiernamente.

- ¿Qué quieres? -entrecierra los ojos y aprieta sus labios.

- Un beso -me sonrojo y me tapo la cara. Escucho que suelta una risita. Unos segundos después siento como se mete en medio de mis piernas.

- Oye -una risa nerviosa escapa de mi boca. Sus manos bajan las mías y mi rostro queda descubierto- Estás muy rojita -tengo los ojos cerrados. Esta mujer siempre me pondrá nerviosa- Abre los ojos, por favor.

- No entiendo cómo me puedo poner tan nerviosa -confieso. Abro los ojos y... -Mierda -susurro. Sus ojos son hipnotizantes y su sonrisa mi perdición- Eres tan bonita Lizzie, mira estas facciones -acaricio cada parte de su rostro- Y estos lunares -paso la yema de mis dedos por cada una de ellas. Mi corazón late muy fuerte- Tus pequeñas pecas, el color de tus labios -con mi dedo pulgar acaricio sus preciosos labios- El color de tus ojos, uff, verde esmeralda -sonrío y ella también- Mi color favorito desde que te conocí. -sus manos abrazaron mi cuello, la distancia iba disminuyendo hasta que sus labios chocaron con los míos. Fue un pequeño beso, pero se sentía tanto. Se aleja lentamente y sonríe.

- ¿Cómo haces para soltar tantas cosas bonitas en unos minutos estando "nerviosa"? Me enamoro con cada palabra, lo juro -su mirada se fija en la mía- Amo cada parte de ti, como eres, como me haces sonreír, como me haces reír, como me haces sonrojar, como me dejas sin palabras... -suspira- Se dice que nadie es perfecto, pero tú, eres la persona más perfecta del planeta tierra -me hará llorar- Quiero que sepas que mi corazón no quiere a nadie más que a ti. Eres mi abrigo, mi fuerza, eres mi calma, mi ancla, eres mi luna, mi sol, eres mi siempre, y mi para siempre, ¿lo entiendes? -me estoy muriendo de amor. Solo asiento y sonrío, soy la persona más llorona. - Ahora, ¿desayunamos? -me deja un beso más y lo disfruto. Se aleja y se vuelve a sentar, no dejo de mirarla... Ella es mi vida entera.