The death kiss

Capitulo 2

Me di cuenta que Ned tenia cara de enojado pero no le di importancia yo seguía pensando en Ángel. No se por qué pero sentía que lo había visto en alguna otra parte. Aunque sé que reconocería aquellos ojos tan brillantes.

Después de un rato nos dirigimos a nuestras casas. Cuando llegue a mi casa no había nadie despierto así que me fui directo a mi cuarto. Me acosté en la cama y en  lo único que podía pensar era en Ángel.

-Ángel-susurre antes de caer en un sueño profundo.

Ángel (versión)

Estoy como siempre buscándola, con mis cálculos debe tener 17 años; desde hace 17 años la he estado buscando. Lo único que sabía es que era mujer, tendría unos 17 años y debería de tener los ojos de un color que los humanos no tendrían. Ahora estaba en un lugar creo que lo llamaban disco, antro o algo así. Me encontraba en una mesa al lado de la pista miraba a los humanos cuando me encontré con unos ojos violeta.

 ¨Tiene que ser ella¨ 

Sabía que era ella por su color de ojos. Ella era hermosa, aun más hermosa de lo que pensaba. Estaba al otro lado de la pista ella también me miro con curiosidad. Nos seguimos viendo hasta que ella voltio porque alguien le llamaba, era un chico que la invito a bailar. Cuando bailaba alguien la empujo, rápidamente la agarre para que no se callera. Mire sus ojos eran hermosos como los de....

-Gracias-su voz era suave y dulce.

Después llego el chico que la saco a bailar creo que su nombre era Ned y le pregunto cómo estaba le dijo que si que todo fue gracias a mí y le dije mi nombre ella me dijo que se llamaba Ella. Pienso que es un nombre muy extraño pero me gusto. Después de que discutió un rato con Ned él se fue y yo la invite a bailar.   

Ella bailaba muy. Dije que tenía que irme la acompañe a su mesa y me despedí. Tenía que hablar rápido con Alexander. Rápido llegue a su oficina, él tenía muchos negocios por todo el mundo para disimular, él era algo así como mi jefe yo debía decirle a él si la encontraba o no. Llegue y me dirigí a la secretaria de Alexander.

-Señorita, puede decirle al señor Von que Ángel está aquí.

-Claro cuál es su apellido señor.-por supuesto que no podía decirle mi apellido así que dije.

-Solo dígale a Alexander que Ángel está aquí. Vera que se pondrá muy feliz y si no se lo dice se molestara mucho con usted así que elija que hará.-ella lo pensó por un rato y des pues dijo.

-Está bien, lo haré.-y apretó un botón y dijo-Señor Von aquí hay un Señor llamado Ángel que quiere verlo.

-¿Ángel? ¡Por fin viene! que bien, Sunny. Déjalo pasar.-Dijo alegre.

-Se lo dije.-le dije a la secretaria.

Ella me llevo por unos pacillos hasta llegar a una gran puerta y me hizo pasar.

La oficina era muy grande con sillones, libreros, un billar y esa maquinitas para jugar. En el escritorio estaba Alexander; él se veía como de unos 25 años, tenía cabello negro y ojos cafés, aunque sabía que eran lentes de con tacto porque el verdadero color de sus ojos es rojo; tenía que disimular yo no los usaba porque mis ojos no llama van mucho la atención.

-Ángel por fin vienes eso significa que ya la encontraste ¿no?-Dijo Alexander con una gran sonrisa se veía... feliz.

-Si, ya la encontré.

-Perfecto ellos, estarán felices todos estarán felices.

-No creo que todos estén felices.... pero solo se lo diré a la chica y la llevare.