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POV. NARRADORA

Por atra parte un encapuchado se encontraba recargado sobre la rama de un árbol bastante alto ya que eso le permite observar mejor las cosas desde esa altura.

Pero que estaba haciendo ahí en específico, eso se bebía a dos razones la primera es por haber rechazado lo propuesta del señor Kettle horas atrás.

Y la segunda era porque necesitaba tener un momento de paz, la simple idea de estar el otro mundo lo asustó... Realmente no le importaba estar en aquel lugar, lo que lo tenía preocupado eran sus amigos y sobre todo su hermano.

Bend's:>>...ahora que haré...<< >>No tengo idea de cómo volver<<

Que más podría hacer, quedarse en aquella dimensión con la esperanza de que lo vallan a buscar?.

Bend's:>>no<< buscaré una solución, no importa cuando o como pero vor a volver... De una u otra forma....

Esa noche la luna iluminaba con gran esplendor todo el bosque, Bend's la  observaba, maravillado, hace mucho no tenía un descanso ya que nunca bajaba la guardia, pensó brevemente.

Bend's:"... Talvez no sea tan malo estar aquí..."








Por otro lado en la casa del señor Kettle se encontraba en una habitación "silenciosa"  un pequeño demonio el cual no podía dormir del todo.

Antes de ir a "dormir" Cuphead le entrego  su cama a Bendy diciendo que el compartiría con su hermano, para que el pueda dormir más cómodo.

Lo que no espero fue que una vez que los hermanos taza se quedarán dormidos estos soltaran fuertes ronquidos que le impedían dormir.

Bendy:"al menos es mejor que el silencio..."

Bendy voltio a ver la bolsa que había traído consigo antes de salir del infierno, se levantó de la cama dirigiendo se a ella y sacando de esta misma un cuarto delgado.

Volví a dirigirse a la cama con sumo cuidado, una vez que se acomodo abrió la libreta para ver específicamente una página en especial.

Pero que tiene de "especial" se preguntaran. En aquella página se podía observar perfectamente a un pequeño lobo  sonriendo con toda la ternura del mundo, a su lado derecho se encontraba una chica, cabello negro, ojos de el mismo color que vestía un sencillo pero elegante vestido negro, de buen físico que de igual manera sonreía ampliamente de felicidad, en el lado izquierdo se podía ver a un pequeño demonio que abrazaba a él lobezno por los hombros que igualmente mostraba una sonrisa radiante.

Los más pequeños parecían tener entre 4 y 5 años en cuanto a la chica no parecía tener más de 15 o quizás 16 años.

Bendy miro la foto con nostalgia, inconscientemente una lágrima se deslizó por su rostro.

Al darse cuenta de esto se limpio rápidamente mirando una vez más la imagen.

Bendy:"...Pronto nos veremos de nuevo.."

Y con ese último pensamiento se quedó dormido ya no le importaba si tenía que soportar los ronquidos de esos dos.



A la mañana siguiente Bendy se despertó un poco más relajado, se incorporó en la cama para después dirigir su mirada a la cama que estaba a una distancia considerable.

En ella observó cómo dos niños dormían plácidamente, aún roncando.

Bendy: enserio es posible tener el sueño tan pesado?. -confundido-

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