Dieciocho

Para poder acercarse a Zails, Zonic tuvo que mentir en una sola cosa.

Un poco de estos dos luchando contra la verdad y el prejuicio.

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—Es la decimocuarta, perdón, vigesimosexta vez que te engaña.

Zails vio a su hermano menor de cabello negro arrojando objetos a la pared verde que convenientemente se encontraba del lado de su cama para recordarle el tipo de novio que tiene, o tenía, dependiendo de cómo acabe la situación en particular, porque Zails no mintió: Scourge llevaba más tiempo engañando a Miles que la cantidad de días que hay en un lustro. Que diga "26" es solo porque veintiséis veces Miles estuvo cerca de empujar a la amante del rascacielos de la ciudad.

Sentado en la cama de arriba, al lado de la pared azul a la que Zails no pudo decir si su madre predijo el futuro aparte de ser colores horribles para una habitación delicada, Tails suspiraba por su hermano, ya que sentía lástima por él. Cuando Scourge the hedgehog, y Zails pensaba que "the hedgehog" sonaba espantoso para una persona, traicionaba a Miles Prower, el hermano del medio, tenían que estar con él para que no atente contra su vida.

Eso fue lo que molestaba a Zails. No importaba cuántas veces le dijera que él no tenía que martirizarse por lo que hacía una basura que caminaba con un saco negro, él no podía lastimarse a sí mismo, pero Miles se cegaba en momentos como ese, sobre todo porque se trataba de una persona impulsiva a la que debían ayudar en toda situación, puesto que al decirle: "No hagas esto", para él era: "Haz esto".

Tails, por otro lado, era el hermano pacífico. Lamentablemente para Zails, Sonic "the hedgehog" era todo lo que Tails había esperado, pero esa era la misma fachada con la que Scourge había llegado a sus vidas, por lo que había que actuar con otras medidas.

Zails era profesor voluntario, no en el mismo colegio en el que los gemelos, así que fue a él para hablar con Sonic y dejar las cosas claras desde un comienzo, aunque de la forma más tranquila posible. El problema fue que ese mismo día escuchó que Miles volvió a sufrir de una injuria por parte de Scourge, a quien no podía ubicar porque nunca lo había visto, así que cuando fue a hablar con Sonic, prácticamente lo agarró del cuello mientras le gritaba las cosas que debía y no debía hacer para hacer feliz a Tails.

Esa noche, Tails recibió un arreglo floral y obsequios como si fuera San Valentín, lo cual fue una sorpresa, y Sonic se presentó a los Prower como la persona ideal para el menor de los hermanos. Los padres lo aprobaron de inmediato, a Amadeus le pareció que tenía buena presencia porque lo vio con un traje formal y no con un saco roto en las mangas, Rosemary le quiso dar la oportunidad, pero la opinión más importante era la de Zails. Zails no dijo una palabra, lo miró sin parpadear por cinco minutos, hasta que aceptó que fuera la pareja de Tails.

Esto no ocurrió con Miles, porque el día en el que presentaron a Scourge, Zails estaba del otro lado del país. Por lo tanto, era hora de hablar con él.

—Dame su dirección, por favor —pidió mientras se acomodaba los guantes. Un muchacho como Scourge se podía hacer mucho el "gran hombre" fuera de casa, pero no en ella.

Al día siguiente, con Miles despertando de mejor humor y con sus hermanos arreglando las paredes para que sus padres no lo supieran, Zails fue parte de una pequeña conversación entre los tres sobre no asustar a la pareja del azabache.

—Miles, desconozco si tú lo contemplas desde la misma perspectiva, pero el único que podría asustarse por su apariencia y por como lo describes, sería yo —comentó ordenando su flequillo y tras alistar su paraguas azul para salir.