Corazones Confundidos Y Un Simi

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Feria de la ciudad , 7:30 pm

Luzu había golpeado a willy por insultar a quackity, un puñezato limpio hacia su mejilla.

Todos quedaron en silencio, no esperan que el reaccionara así, siempre había sido el callado, el que sólo veía... Si tiene una motivación hará lo que sea.

-que te pasa Borja!? - el albino tomó con fuerza su mejilla - Enserio me golpeaste por alguien como el!?

Vegetta se acercó algo tembloroso hacia willy con lo que parecía ser un lata de refresco - Willy dejame ver tu ros-  de un manotazo la lata terminó el suelo, willy se la había tirado.

- Maldita sea Samuel, deja de ser un debilucho! No necesito esa cosa necesito que este maldito no se vuelva a meter conmigo! - willy  tomó de la camisa a luzu con la intención de tirarlo, pero luzu rápidamente pudo cambiar la posición.

Su madre sabía que a lado de Kinoko estaba karma, no quería ser prejuiciosa, pero por su seguridad lo había inscrito a clases de defensa personal y taekwondo.

Asi que ahora luzu estaba encima de willy, sometido por completo.

-Borja Sueltame! - toda su ropa y rostro estaban llena de tierra y rasguños - No te molestare pero déjame ya!

-.... Más te vale dejarlo en paz willy... - luzu lo soltó y se acercó a quackity con una sonrisa, hasta que willy volvió a hablar.

- tan desesperado estas por aceptación que le haces caso a ese tipo con cara de pu- otro puñetazo lo hizo caer al suelo pero esta vez, luzu no se detuvo a solo inmovilizarlo, se posó encima suyo y empezó a darle de puñetazos limpio, aunque willy pudo pararse y empezar a golpearlo también.

Todos empezaron a gritar donde debía de darle, quackity no sabía si debía interferir pues era un asunto de Kinoko, aunque el estaba en medio.

Vegetta había intentado tomar a willy, pero este le dio un golpe y le dijo que dejara de estorbarle.

-... Ya ni siquiera se por que intentó hacer que esto funcione Willy!! - ese grito hizo que ambos chicos pararán de pelear y voltearan a ver al chico de los ojos violetas, que estaba ya llorando y con algo se sangre saliendo de su nariz -  Vete al carajos entendiste!? No pienso seguir con alguien como tú! -

Vegetta salió corriendo, empujando y disculpándose con la gente para poder avanzar, willy quiso ir detrás de el, pero una patada en sus partes bajas por parte de luzu lo hizo imposible.

- No merecías a alguien como samuel... - tomó la mano de quackity y empezó a caminar hacia otra parte d ela feria algo sola.

Rueda de la fortuna, 8:00 pm

Vegetta se había puesto a llorar abrazando sus piernas en una de las bancas  cerca de la rueda, poco le importaba que lo vieran feo y con lástima, quería sacar todo eso.

Habían sido 2 años de relación, una donde el caramelo se acabó muy rápido y pronto se amargo. Pero se había quedado por que en verdad le gustaba.

El golpecito de algo frío hizo que levantará su mirada, y lo primero que noto fueron las orejas de oso del chico que le ofrecía una lata de jugo.

-La nariz es delicada, y se te va a hinchar, vi todo el circo que pasó, así que te traje algo - el chico solamente mascaba su chicle tratando de fingir que no estaba preocupado.

- Rubén... Gracias... - tomó la lata y se la puso cerca de la nariz sacando algunos quejidos de dolor.

Pronto rubius se sentó a su lado y abrió otra lata, aunque está explotó en su rostro dejando a ambos sorprendidos - era obvio, después de tanto movimiento  .... Bueno, eso me pasa por tacaño Jajaja- le enseño la lata, era la que había comprando para willy.

Vegetta empezó a reír por lo anterior, pero pronto se empezó a poner triste de nuevo, algo que rubius noto.

Pero no dejaría que alguien estuviera triste mientras estuviera ahí.

- sabes, es una feria así que ven - tomó su brazo y lo arrastró a diferentes juegos, cabe aclarar que en todos perdió su dinero pero con tal de ver a su acompañante sonreir, podría gastar todo el dinero del mundo.

Pará Vegetta era todo nuevo, claro que iba a esos eventos, pero solo su padre lo obligaba a acompañarlo, y la única vez que pensó que sería bueno explotar con su novio, lo golpeó y terminó con el.

Pero sabía también que no se hubiera divertido igual si hubiera estado con willy, Rubén lo hacía sentir bien, era divertido, atento con el y le compraba todas las chacharitas que veían.

Era un remolino que había empezando a atacarlo.

Ciudad, farmacia 8:40 pm

Apenas se fueron de ahí, quackity lo había convencido de ir a una farmacia a curar sus golpes y rasguños, el tuvo que aceptar a regañadientes, pues quería disfrutar de la cita obviamente arruinada.

Aunque pronto su frustración se volvio en preocupación pues su pequeño acompañante había estado callado, cuando le hablaba sólo respondían con "si" "no se" no".

-voy a comprar las cosas, así que quedate aquí - quackity tomó su mochila y entró a una farmacia similar.

Luzu estaba cansando, había hecho el. Ridículo y todo por culpa de willy, bueno también suya, pero el había empezado, pronto se dio cuenta de la botargas que estaba ahí, avances la ciudad era rara, pero pronto vio que estaban promocionando unos peluches del doctor, así que pensó en una gran idea para poder contentar a quackity.

Al salir de la farmacia, quackity se sorprendió de no ver a luzu, pero se emocionó al ver a la botargas, y no tomarse una foto seria pecado.

- quiero una foto pero no esta el chico con el que venia - la botargas solo señaló detrás de el, al voltear estaba luzu con varios de estos peluches - No mames cabron!

-no sabía cuál profesión te gustaría más, así que te compre varios... Lo siento, no quería arruinar esto.... Se que te molestaste pero... Quiero compensarlo - el rostro de quackity enrojecio mirando a otro lado.

- en realidad... No estaba enojado... Nadie me había defendido así... Bueno si pero... Ya sabes... Contigo es diferente... - ahora era luzu el que miraba a otro lado con el rostro rojo.

La botarga empezó a hacerles señas para tomarse la foto, pues su turno iba a acabar y debía quitarse el traje

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La botarga empezó a hacerles señas para tomarse la foto, pues su turno iba a acabar y debía quitarse el traje.

Los chicos sonrieron, se acercaron a él y tomaron la foto, sería un lindo recuerdo.

Algo de luz, antes de los exámenes parciales

La fresa y el choloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora