El sol se asomó por las colinas, mientras que los pájaros se levantaban y estiraban sus alas listas para volar; en el agua, los pescados se movían entre las aguas buscando comida; en el bosque, se escuchaban diversos sonidos de diferentes animales, todo se había vuelto sumamente relajante, a muchas personas les encantaba despertar así.
Pero el sol también daba luz a un lugar que había sido repleto de obscuridad por dentro, durante generaciones. Ardiendo en llamas estaba más que la casa, ya no tenían más oportunidad de vida, así que les restaba esperar hasta que se fueran consumiendo poco a poco, manteniendo la inmortalidad hasta su última palabra... La última vez que volverían a ver el mundo.
Las hojas se movieron suavemente, la primavera había recién iniciado, después de tanto tiempo, pero que para muchos parecía casi nada... Las personas se refieren mucho a "demonios" como aquellos seres que no pueden ver, pero en realidad, son muchas veces a los que no podemos distinguir... Y los ángeles, las criaturas celestiales que adoran a Dios y a la humanidad, procurando hacer el bien, volvían aquellas plegarias súplicas realizando su fortalecimiento cada vez más insaciable, eran verdaderamente timadores.
Llegó la mañana, por fin era un día más de "vida", o si eso podía decirse de alguien despierto. La muerte era un transcurso en el cual una persona que respiraba y sentía, se volvía a un ser completamente diferente, o simplemente tenía 2 opciones en el mundo: Ser comida o ser esclavo.
En el año 2015, las cosas habían cambiado notablemente desde los años 1800.
Las cortinas fueron despejadas y sujetadas por el mayordomo de negro, únicamente portaba su camisa blanca, de ahí en fuera, su uniforme hasta su cabeza era de un color sombrío... Negro. Su tez pálida apenas podía distinguirse entre tan resplandor del sol.
Dio media vuelta y se dirigió hasta el joven que dormía cómodamente en la cama.
-Bocchan...- Susurró- Es hora de despertarse.
El chico abrió su ojo derecho primero reflejando la marca del contrato, después abrió el otro de un color azul intenso parecido al zafiro, era hermoso. Su mirada se desvió al rostro de su mayordomo.
Soltó un "Uhm" de recién levantado.
El mayordomo tomó del suelo una bandeja de plata y se la colocó en las piernas ayudándolo a sentarse utilizando las almohadas como apoyo.
-Hoy le he preparado té de menta, un omelette de claras bien cocido, jugo de mandarina y le he dejado una selección de pan dulce.- Le dijo.
-Bien.- Asintió.
El mayordomo caminó hasta la puerta y antes de tomar el cerrojo, tuvo la percepción de escuchar algo de su joven amo, así que se detuvo en ese mismo instante.
-¿A dónde vas?- Le preguntó.
Él sonrió.
-A levantarla.- Mencionó.
El joven lo miró seriamente y suspiró hondo tomando la taza de té y soplando al humo.
-¿Crees aún que te permitirá abrirle las cortinas? Ella no quiere verte.- Le dijo.
El demonio bajó los ojos manteniendo la expresión seria, sabía que era cierto lo que su joven amo decía, pero no podía hacer nada más que intentarlo, debía de hacerlo, no podía renunciar a una oportunidad única de mantenerse por primera vez "vivo".
Confiando aún, tomó el cerrojo y lo giró saliendo de la habitación.
Los pasillos de la mansión brillaba con sumos lujos, la clase superior era notable, y a pesar de no ser como las casas modernizadas, de hecho, estaba aún más asegurada con un valor inalcanzable, el estilo tan barroco estaba recientemente de "moda", debido a su estilo único gótico.
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Oh... Ya veo
Mystery / Thriller3RA PARTE DE "TAN SÓLO SOY... YO" Estamos de acuerdo que para dominar un territorio, debes de sacrificar a muchos peones, porque los de atrás son los aliados más poderosos, sin embargo, nunca podremos dar un paso en falso sin ser detectados, es lo m...