El sol alumbraba toda la habitación. Hacía que los colores cobraran vida; la pared se iluminaba y con eso todo el lugar.
Ese mismo rayo de sol que daba vida al cuarto, también logró despertar al chico mayor.Su propio cabello tapaba sus ojos, le hacía cosquillas y por eso movió ligeramente su cabeza. Abrió los ojos y pudo ver la nuca despejada de su novio.
Ya tenía muy largo el pelo pero era algo que le encantaba. Casi nunca tenía claras las vistas de su cuello así que sonrió al poder verlo.Le abrazaba. Eso hizo toda la noche. Tanto esa como todas las noches desde que comenzaron a vivir juntos, hacía casi dos años.
Besó su mejilla un par de veces con delicadeza y notó que ya había despertado, pero el rubio no se movía.
- Mmm... Kenma a despertarse... -dijo aún cansado y con voz ronca-
El recién nombrado sonrió levemente, esperando más de sus besos, los cuales encontró rápidamente.
El pelinegro besó de la misma forma su cuello una vez, dos, tres... Ya perdió la cuenta hasta que llegó a su hombro.- Gatito...
- Mmmm... -se movió ligeramente-
- Hay que levantarse.. -besó su hombro desnudo-
La camiseta que llevaba el pequeño era de su novio. Y le quedaba tan grande que se movió hasta que aquel hombro parecía no llevar nada.
- Y eso quién lo dice?
Seguía con los ojos cerrados, disfrutando del contacto de Kuroo aunque lo tenía todos los días.
- Tienes razón... -sonrió un poco-
Volvió a apoyar la cabeza en la almohada y besó su nuca, para acontinuación cerrar los ojos.
- Mmm... -se pegó más a él y giró levemente su cabeza- Oye pero no dije que pararas...
Kuroo sonrió abriendo los ojos y besó de nuevo su cuello. Kenma volvió a apoyarse en la almohada, su pequeña sonrisa no se esfumaba.
- Así cariño..?
Lo besaba lentamente, de una forma que hacía que la piel de Kenma se erizase.
- Mmm... -pensó- Más o menos...
El mayor le miró. Se veía precioso junto a la luz del sol.
Siempre pensó eso de él. Desde el día en que lo conoció pensó que era la persona más bonita que había visto jamás, y no tenía duda de que eso nunca cambiaría.- "Más o menos"?
- Mhm.. -le miró de reojo- Prueba por aquí... -señaló su hombro-
Besó este repetidas veces, sin apartar la mirada de él.
- Mejor? -sonreía-
- Mmmm... Sigue probando -dijo antes de volver a cerrar los ojos-
Se humedeció los labios sin dejar de sonreír.
Pasó de su hombro a su cuello en un largo y lento recorrido de besos hasta acabar de nuevo en su mejilla.- Y ahora? -hablaba bajo-
El pequeño giró la cabeza para mirarle, mordiendose el labio inferior de forma discreta. Miró sus ojos, luego sus labios y rodeó el cuello de su novio con sus brazos tras girar un poco más su cuerpo.
- Puede que hayas mejorado... A ver por aquí -señaló la comisura de su labio-
Kuroo la besó dulcemente.
- Aquí... -ahora un poco más arriba-
Señaló varias zonas de su rostro, pero ninguna fueron los labios. El mayor besó todas y cada una sin siquiera responder con palabras.
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𝑩𝒖𝒆𝒏𝒐𝒔 𝒅𝒊𝒂𝒔 | Kuroken | OneShot
FanfictionKuroo y Kenma, con 26 y 27 años, se despiertan una mañana en su cama entre abrazos. Quizás sea el haber estado un par de semanas sin hacerlo, pero el cuerpo de Kenma está mucho más sensible de lo normal. Por favor leerlo, es el mejor fanfic que he...