Capítulo 34: Asuntos Pendientes

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   La estadía en el hospital público de Cañuelas no es agradable para Kiran. Viendo oportuno que las enfermeras tardan en atender a sus pacientes, el detective ve la posibilidad de escapar y logra concretarlo.

   Robando una camisa celeste de enfermero, sale del hospital, fingiendo ser un trabajador del lugar.

   Con rumbo a Banfield es allí que planifica encontrarse con Malika y ella confirmará su ingreso oficial a ZOO, ese es su objetivo desde que abandonó las instalaciones de la organización.

   Es un hecho que "Supremo" debe ser uno de los Líder circunstanciales y ello es una gran desventaja para este ambicioso detective. Debe inventar una nueva excusa para extorsionar a la pelirroja. Ya no sirve amenazarla con la viuda Hippef ("¿Qué utilizaré esta vez?")

   Una vez más, Mélody envía un mensaje de texto a su celular, insistiendo en ser atendida como cliente:

<"¡Ayúdame a encontrar a la persona que intentó asesinar a mi esposo!"...

<"¡Prometo no insistir con lo que tuvimos una vez!"...

<"¡Ayúdame, por favor, "Simón"!">

   Como la bendición enviada desde el mismo cielo, Kiran ve la oportunidad perfecta para encarar a la pelirroja y así chantajearla una vez más. La suerte corre a favor del detective Bondier. Caminando por las calles de esa ciudad, el hombre se dirige a donde, temporalmente, reside, luego de pedir un taxi. La pensión donde Malika alquilaba, Kiran ha decidido vivir por un tiempo allí. El detective sabe que, al ingresar a ZOO, su vida económica cambiará rotundamente, aunque su eje continúa siendo el mismo:

"¡ZOO me debe mucho! a mi madre y a mi hermana, también"

   Abandonar a Arinka ha sido muy duro para Kiran durante todos esos años de ausencia, pero su presencia fue constante, aunque ella jamás lo había notado. Aunque la hermana menor no lo sabía, Kiran siempre estuvo al pendiente de su vida, hasta que perdió el rastro de la joven. 

   El asesinato de su madre, a manos de un maldito esquizofrénico, impulsó, indefinidamente, su sed de venganza contra la organización. ZOO y sus miembros pagarían muy caro el precio de haber arruinado su vida, por completo...

***

   La pauta fue dada. "Suricata" tendrá lo que merece. En una reunión improvisada por "Supremo", la ex Líder de ZOO es escoltada por "Lobo" hacia la oficina Principal.

   Lorena cree que será exonerada. Sus expectativas crecen a medida que recorre los pasillo de la mansión. Comentando a "Lobo", la perpetua aspirante alardea de sus suposiciones:

__¡¿Puedes verlo, "Lobo"?! Pronto volveré a la carga, y seré la Primer Líder, acompañando a "Supremo" en toda misión __

   "Lobo" sostiene a Lorena de un brazo y sonriendo de lado, el hombre responde con incertidumbre:

__¿Crees eso?¿Crees que "Supremo" es un grandísimo imbécil?¿Crees que podrás estar a su lado... luego de intentar asesinarlo?__

__ El imbécil aquí eres tú, ¡Ya verás de lo que estoy hablando! "Supremo" sabe que ha sido un error condenarme a ejercicio perpetuo. Debe contar conmigo en el desempeño de sus labores __ replica Lorena.

__¡Ya lo veremos! __ comenta "Lobo".

   Llegando a la oficina de Inder, Lorena toma asiento y con una sonrisa en su rostro, espera con ansiedad que la presencia de "Supremo" calme ese ímpetu en ella. Observando lo que fue una vez su oficina, Lorena nota los cambios hechos en ella. Los adornos fueron removidos, esos que con tanta dedicación ella misma había colocado hacia ambos lados del escritorio. Irónicamente, eran pequeños leones hechos en porcelana.

Supremo InfernalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora