—Se llama Leandro, y además de ser Xeneize, es lo mejor que me paso.
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—Ah, el bostero ese.
—Callate un toque vos.
Entre burlas hacia los clubes que alentaban, Julián se apoyó en el umbral de su puerta cuando notó que Paulo se iba hacia la planta baja, pues al menos un último ruego no sería malo.
—¡Pau!— el mencionado hizo un ruido para que supiera que lo escuchaba, pero cuando este se giro para verle, fue que el menor habló:—Pensa la de ir a la joda. Total es de disfraces, quién te va a reconocer.
Sin embargo, Dybala asintió como su única respuesta, y Álvarez tenía toda la fé en que realmente cambiaría de opinión. Él lo sabía, era claro por la manera en la que hablo tan bien de Paredes.
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Y tan equivocado no estuvo. Lo supo apenas Fernández llamó emocionado indicando que se preparara porque Leandro y Paulo irían juntos a la fiesta, ¿Y lo mejor? Vería a Enzo en un traje como un demonio, ¡Gracias Diego por tal bendición traída del cielo!
Así que Julian asumió que era su señal para bajar hasta la puerta cuando escucho a su hermano decir "¡Papá, me voy!".
—Muy chistoso. — escuchó decir a su padre levantándose del sofá al mismo tiempo que el cordobés se dirigía hacia la puerta. —¿Y vos qué onda?
—El disfraz, viejo. — respondió el apodado araña como si fuera lo más obvio del mundo.
—¿Para la fiesta esa?
Y antes de que el Álvarez menor respondiera, el sonido del timbre desconcertó a ambos. Gustavo casi abre la mandibula cuando vio la tonta sonrisa en su hijo apenas abrió la puerta, y ese intruso, se dejo ver.
—...Me robaste el aliento. — dijo Enzo apenas apreció por completo a su acompañante de la noche; sobrepasando el limite del disfraz y realmente haciéndolo ver como un ángel. —Estas hermoso, juli. Capaz podría haberte dado el de el hombre araña, pero no había talle de deadpool para mí.
