«capítulo 5»

0 0 0
                                    

Estoy super feliz, me siento libre, siento que estoy soñando nunca he sido tan felíz en mi vida y sí, se que estoy exagerando un poquito pero es lo que siento.

Estoy sentada en el borde de la piscina con mis pies dentro moviéndolos de atras hacia delante. Cleo está sentada a mi lado con un tazón de gomitas y chocolates, estamos comiendo y riéndonos de las tonterías de Charly  y Carlos que actuan como si fueran chicas, enserio son muy graciosos.

Cojo un bombón y lo meto en mi boca para luego coger otro y otro y otro hasta llenar mi boca y emitir un gemido de dulzura.

— si sigues comiendo así vas a tener un mal estomacal —(me dice Cleo cogiendo una gomita y metiéndoselo en la boca)

— tal vez, pero no me importa — (me escogí de hombros dándole poca importancia y seguir comiendo mis bombones tranquilamente mientras que miro la hermosa vista que tengo delante)

Cleo y yo reímos y volvemos al silencio que no es nada incómodo hasta que Cleo lo rompe.

— ¿Eme? —(ella me llama así siempre, proviene de mi inicial, ella me mira seria no queda ni tastro de la sonrisa alegre que tenía antes)

— ¿hmm? —

— respecto a la pregunta de ayer... si, son ellos —( ella hace una mueca y continua)— pero por favor, no digas nada respecto al tema nunca más, te lo contaré todo y no hagas preguntas ni interrumpas, ¿Okey? —

— está bien, te escucho —

—Todo empezó cuando me mudé con mis abuelos y me llevaron a esa escuela, estaba sola ya que cada quien vivía en su mundo de vanidades, era una estúpida competencia por ser el más lindo, más adinerado y más popular de todo Richard's Seam. Yo estuve sola casi todo el primer semestre, era de la escuela a casa y así sucesivamente, hasta que empezaron los anuncios de un partido rival con otra escuela y decidí ir aunque no tuviera con quien, convencí a mis abuelos y me permitieron ir. Estuve bastante tiempo sentada en las gradas yo sola ya que no había llegado casi nadie, decidí sentarme en las más cercanas a la cancha, osea en la segunda fila debido a que en las primeras estaban las porristas, y-

— ¿que tu no estabas en el equipo de las porrristas?—( le pregunté con el ceño fruncido y cogiendo un bombón lentamente)

— ¡que no me interrumpas! —( se insultó ella)

— bien —( le dije sin ganas)—continua —

— como decía... yo estaba en la segunda fila ya que yo-aún-no-estaba-en-el-e-qui-po  y pues después de un rato se llenó de una manera que no cabía ni una pobre alma, la tensión que había entre los dos equipos se podía cortar con una espada y todos nos dimos cuenta de ello debido a que se echaban unas miradas que atraviesan. Luego de tanto tiempo con mi trasero pegado a la banca, porque no me levanté ni a animar nuestro equipo cuando anotaba, y cuando el reloj marcó que solo faltaban quince minutos para que se terminara, cuando volvían del descanso los de nuestro equipo, el contrario empezó a reunirse en un círculo y a mirar al que para el que hacía los mejores pases y dejaba que anotara el capitán, me parecía buen chico, luego de haber planeado lo que sea que hallan planeado, el silbato sonó y empezaron a correr por el campo de juego, nuestro equipo le llevaba la delantera y eso empeoraba el humor del otro equipo, ya faltaba cada vez menos y no me gustaba nada lo que planeaban los de el otro equipo, igual si les pasaba algo tenía un kit de emergencia en mi mochila porque mis abuelos me obligaron a traerlo por si pasaba algo, estaba concentrada en cada movimiento que hacía el equipo contario y cuando el reloj marcó los tres minutos restantes esto no podía ir peor nuestro equipo había anotado casi todos los puntos y el entrenador del otro equipo estaba hecho una furia, cuando el chico pelirrojo iba a hacerle un pase al capitán para que anotara, cuando vi a un jugador del otro equipo corriendo hacia ellos grité con todas mis fuerzas ¡Cuidado!, pero ya era tarde, el chico del otro equipo se metió en medio causando un nudo entre ellos y haciendo que el pelirrojo y el capitán calleran al suelo, yo no se como baje las gradas a toda velocidad sin tropezar, cuando llegué abajo vi a las porristas llorando, y me quedé como que... enserio, les deje pasar y me paré en la puerta que daba entrada al campo de juego, un guardia se acercó a mi y me preguntó que hacía ahí parada, empecé a explicarle que había visto todo lo del otro equipo y que fui yo quien les avisó antes del impacto, también le dije que traía un kit de emergencia en mi mochila y me dejó pasar, corrí con todo lo que tenia, sabía que tenía que hacerlo, entonces cuando llegué me tiré al suelo causando que mis rodillas se rasparan pero no me importó, solo quería salvarlos, saqué mi kit de la mochila y los acosté a lo largo para tener un mejor acceso a ellos, mi madre me había enseñado algunas cosas de como sanar heridas y sobre la persona inconsciente así que estaba preparada, vi que tenían lesiones en las rodillas, pero no eran para nada pequeñas, tenían también en los codos y en los antebrazos, se habían golpeado la cabeza muy fuerte pero no tienen heridas en ellas, limpié sus heridas con alcohol y luego les puse vendaje para que no se infectaran, les puse el frasco con alcohol en la nariz para que despertaran, luego de despertarse se sentaron en el césped y me miraron extrañados por mi presencia, era normal no me conocían, luego me dieron mas gracias, y les dije que la ambulancia está en camino, las porristas dejaron de lloriquear y bajaron a ver a los chicos junto con su equipo, al otro equipo le dieron su merecido y después de haberlos curado me fui de ahí, dejé que sus amigos los agobiaran con preguntas, desaparecí sin más como la típica chica misteriosa. En fin, luego los evite a toda costa pero al final termianron encontrándome y pues se hicieron mis amigos al igual que las porristas, luego de eso me volví partícipe del equipo de porristas , luego me enteré de que consumían drogas y que ya eran dependientes de ellas, para ese entonces ya no podia hacer nada y pues entablamos una amistad inseparable hasta ahora y pues el resto ya lo sabes —

{Es Necesario Que Estés Aquí} Libro#1©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora