Reborn se encontraba furioso... bueno esa definición se quedaba corta comparado con lo que realmente sentía, pero era lo que más se acercaba, ya que justo en ese momento pensaba en mil y un maneras de torturar a un dame mentiroso, ya que según las cámaras de vigilancia Tsunayoshi había tomado el maldito diario que estaba buscando y no había dicho al respecto... realmente aumentaría sus horas de entrenamiento solo por eso...
Según la lógica actual su dame-alumno debería estar en la habitación de Hibari, por lo que a paso decidido entro a la habitación pateando la puerta y con pistola en mano, pero al entrar noto algo extraño... no había nadie en la habitación, estaba ordenada como si no hubiera ido nadie desde la mañana, por lo que sin dudarlo se dirigió a la recamara de su dame-hijo... ya que si lo pensaba eso era algo extraño.
Por otra parte, en la habitación del cielo Vongola, se encontraba una pareja de adolescentes quienes estaban durmiendo cómodamente abrazados, acompañados por el agradable silencio que había en el lugar y esa ligera brisa fresca que se colaba por las cortinas. Justo en esos momento el castaño empezaba a despertar pero sin querer abrir los ojos ya que se encontraba en un lugar agradable pero poco a poco los fue abriendo notando que su amada nube estaba durmiendo a su lado y que todo indicaba que seguían en sus cuerpos, con cuidado se movió llevándose otra gran sorpresa ya que esa era su habitación... eso quería decir que habían regresado a su época ocasionando que se alegrara un poco e igual se preocupara ya que eso quería decir que habían dejado atrás a Giotto-san y Aluade-san, sin saber si ellos se habían reconciliado debido a que su rubio ancestro malinterpreto los hechos, intento colocarse de pie pero un par de brazos se lo impidieron, al mirar noto que su guardián estaba despierto y le miraba atentamente.
- Tsunayoshi, vuelve a dormir – le ordeno Kyoya, mientras que lo atraía hacia el.
- No creo que eso sea una buena idea – dijo algo preocupado el castaño, mientras colocaba una mano sobre el pecho de su pareja y lo miraba a los ojos.
- ¿Por qué? – pregunto enfadado el pelinegro.
- Es que mi intuición me dice que debo correr... - dijo nervioso.
- ... - Kyoya se le quedo mirando sin entender a que se refería, pero al ver la preocupación de su cielo accedió a su petición y ambos se levantaron para arreglarse y vestirse...
Pese a la timidez de Tsuna al recordar todo lo ocurrido hace poco entre ellos, Kyoya lo convenció de que entraran juntos a la ducha para arreglarse, pero debido a que se sentía demasiado avergonzado por la situacion, el castaño fue el primero en salir de la ducha donde solo se coloco unos pantalones y se coloco una camisa blanca, justo cuando estaba abotonando su camisa la puerta del baño se abrió revelando a un hitman nada contento.
- Me pueden explicar que esta pasando aquí... - hablo el pelinegro el cual tenia su mirada oculta mientras temblaba de ira y una gran aura negra lo rodeaba.
- Re...Reborn... etto... yo... - Tsuna no lograba articular palabra alguna, ya que estaba temblando de miedo por la gran sed de sangre que rodeaba a su tutor espartano.
- Que no ves, nos estábamos bañando carnívoro – dijo divertido Kyoya sonriendo de lado, ya que él sabia que el tutor de su cielo seria su carnívoro rival a vencer su deseaba estar al lado de Tsunayoshi, pero ahora eso no seria necesario ya que sabía que él le pertenecía.
Por su parte la ira de Reborn no se hizo esperar y se lanzo a golpear al adolescente que se había atrevido a robarle la inocencia a su dame-hijo, por lo que sin dudarlo de un movimiento rápido se coloco a un costado del castaño y le lanzo una patada con todas sus fuerzas para sacarlo del baño y estrellarlo contra la pared de enfrente.
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En tus zapatos
Fiksi PenggemarYa con la mayoría de edad cumplida, todo se encuentra listo para que Sawada Tsunayoshi asuma su cargo como el Vongola Decimo, pero... ¿porque dame-Tsuna actúa como un verdadero mafioso? y ¿porque ahora Hibari es amable y algo miedoso?, esto debe ser...