Cap 25.- La alianza

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La tarde se pasó entre risas y charlas. El Emir descubrió que estaba más enamorado de ella de lo que hubiera esperado. Se sentía como una polilla siendo atraída hacia la luz. Definitivamente esa jovencita sería su ruina... si tan solo aceptara ser su esposa. Podría pensar seriamente en dejar de tener tantas esposas y quizá, solo quizá conformase con unas cinco concubinas, siendo ella claramente, la principal, la esposa real.

Pero eso era obviamente un sueño sin sentido, su bella dama era un hueso duro de roer, dominante y demandante, del tipo de mujer, que lo suyo no es para compartir.

Volcó sus ojos no por primera vez a su fiel acompañante, otra joya por descubrir, aun le parecía increíble como se fueron desarrollando las cosas... ¿quién era ese muchacho? ¿Cómo llegó a quedarse con su dama? ¿Qué relación tenían ambos? ¿Acaso sus sospechas de un posible romance entre ambos no eran mal infundadas?

El brillo fiero en la mirada de Zafrán siempre lo inquietó, parecía un Alcón al acecho. Lo cual indicaba un entrenamiento especifico. Su dama dijo que era parte de su pasado, que pertenecía al grupo de Kay. No cualquiera puede estar bajo el mando de una eminencia como fue el rey caído, como se le solía llamar. ¿Acaso sería posible que el Joven Chris fuera parte de su escolta personal? ¿Su mano derecha quizá? Si ese fuera el caso... ¿qué paso? ¿El rey caído no estaba muerto, lo sabría acaso él? ¿Fue una orden directa quizá buscarla, encontrarla y protegerla? Si eso fuera así, tendría mucho sentido su cercanía, pero, algo no encajaba ahí.

Ese joven sabía que su dama estaba viva ¿cómo es que el difunto Rey, antes muerto no la busco? El joven Chris esta con ella, sabe su paradero, ¿porque no la buscó? Eran una pareja antes.

En la cabeza del Emir poco a poco las piezas iban encontrando su lugar, pero aun así había lagunas, baches, huecos, información faltante.

Melina lo notó.

—¿Que inquieta tu mente Shakur? —preguntó interrogante, con una taza de café humeante en sus manos.

El Emir no pudo evitar el sobresalto al escuchar su nombre de nacimiento seguido de una poderosa corriente eléctrica por toda su espina dorsal, y soñó, no por primera vez, como se escucharía su nombre salido de esos labios en otra completamente distinta y acalorada situación.

Sacudiendo levemente la cabeza de pensamientos impuros y poco correctos para un caballero de su talla, decidió completar sus vacíos de información, si es que claro, no era una evidente incomodidad para su dama quien se había abierto a él de una manera tan sincera.

—No quiero abusar de tu confianza, bella dama —le dijo —pero siento que aun hay muchos huecos por completar.

—Información faltante —respondió Chris mirándolo seriamente, sabía a lo que se refería. No pasó desapercibido su mirada inquisitiva sobre él.

—Efectivamente.

—Que es lo que quiere saber Majestad? —preguntó Zafrán —. Nos dio su protección, lo que menos podemos hacer por usted es ayudarlo a comprender el enigma que somos nosotros lo mejor que podamos y se nos permita exponer.

Esa respuesta le causo más intriga al Emir

—"¿Lo que se nos permita?" —se preguntó intrigado. Dando mas preguntas a sus posibles propias respuestas.

—¿Quién es usted en realidad Joven Chris?

Melina se tensó como una cuerda, miró a Zafrán de manera insegura.

—No tienes que responder lo que no quieras Chris.

—Déjeme aclararles algo —dijo el Emir al notar la reacia respuesta de su dama —. Sin importar lo que vayan a decir, mi oferta no cambiara bella dama, mi protección en amplia para todos los suyos.

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⏰ Última actualización: Feb 28, 2023 ⏰

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