Heichiz [Destino #1]

13. Destinos perdidos - 4.3

"La desesperación del saber, solo se compara con el deseo de saciar la sed"

Ella... era hermosa, al igual que la pequeña que había visto en sueños; pero no podía ser ella, la bebe se le fue arrebatada de las manos aquella mujer. Lo que no entendía era el por qué. ¿Por qué se la quitaron? ¿Por qué acepto ella que se la llevaran? Eso lo desconcertaba por completo, no entendía nada; comenzando por el hecho, de que presencio el nacimiento de una niña que no conocía, una niña que probablemente fuese producto de su imaginación. Continuando con el -de alguna manera- repentino parecido que tenia esa niña con Lindsey. Y finalizando con aquella carga de energía que le salvo la vida, del cual desconoce su creación.

Ahora la cosa estaba en conocer y averiguar todo aquello. Lo descubriría, esa era ahora su meta.

- Realmente, ¿ya te encuentras mejor? - Escucho preguntar a Faila, quien aparentemente ignoraba la discusión de Naurend y Lindsey.

- Si, no hay de que preocuparse - Le aclaro, fingiendo una sonrisa. Se encontraba demasiado confundido para dar una real; pero aparentemente aquella sonrisa lo había delatado.

- Estas muy distraído - Lo delato aquella, mientras lo miraba con enfado.

- Solo estoy, tratando de saber la razón de mi desmayo - Confesó, al darse cuenta de que no podría ocultárselo a ella.

- Averiguaremos eso, aunque no lo creas, yo estoy más desconcertada que tu respecto a eso.

- ¿Por qué? - No lo entendía realmente, así que quería saberlo.

- Curiosidad - Dijo cortante.

La observaba pensativa, realmente lo que dijo era verdad, ella se preocupaba por él sin poder evitarlo. No era algo que le desagradase, pero suponía que ella tenia mejores cosas en las que pensar, en lugar de estarse preocupando por su salud.

- No ha regresado la luz - Comentó, tratando de cambiar el tema.

- Y dudo que regrese... - Faila, se acomodo a su lado.

- ¿Qué haces? - Preguntó, algo asustado ya que aquella parecía dispuesta a dormirse.

- Tengo sueño, y Naurend dormirá con Ailen en mi cama. Yo dormiré aquí con Lindsey, porque estas son las mas grandes. Tú te quedaras en la de Lindsey, y Anthony en la de Ailen. - Le explicó detalladamente.

- Entonces, supongo que me estas echando. - Bromeo aquel, empujándola levemente.

- Tómalo como quieras - Bostezo cansada.

Kenneth sonrió, ella le recordaba a alguien, pero no sabía a quien... eso lo estaría atormentando hasta que lo averiguara, cosa que lograría, de una forma u otra.

- Descansa Fai. - Le dijo Kenneth al verla casi dormida. Se dio la vuelta para levantarse e irse a la otra cama.

Pero repentinamente se encontró con Lindsey, quien reposaba sobre ella.

- Hola - Dijo para llamar su atención. Ella volteo a verlo, esperando que aquel siguiera hablando. - Yo dormiré aquí - Dijo, pero con un tono de duda plasmado en el tono de voz que uso.

- ¿Acaso no tienes casa? - Le preguntó aquella volteándose para no verlo a la cara.

- Perdóname, no quería molestar... - Él no la entendía, en lo mas mínimo. Ella tenia un carácter moldea ble, demasiado para ser sincero.

- ven, acá niña problemática - Dijo Naurend, llegando hasta donde se encontraba Lindsey.

Esta, le dedicó una sonrisa reconfortante al chico frente a ella, pero minutos después voltearse a ver a Lindsey, tomarla de la oreja derecha, y llevársela lejos de esa cama.