♡ 𝐂𝐀𝐏𝐈́𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐔𝐍𝐎

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┊ EL SUEÑO Y LA VIDA ┊

┊ EL SUEÑO Y LA VIDA ┊

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Sus pies se movían con rapidez, persiguiendo al gato negro, evitaba las ramas, las rocas y las gruesas raíces de los árboles

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Sus pies se movían con rapidez, persiguiendo al gato negro, evitaba las ramas, las rocas y las gruesas raíces de los árboles. Se esforzaba por avanzar con mayor celeridad, percibía risas a su alrededor que aumentaban a cada paso, sin embargo, no le causaba ningún efecto molesto. Sus rizos dorados se movían y alborotaban, una sonrisa adornaba su rostro y sus ojos verdosos estaban puestos en el felino. Un vestido celeste cubría su cuerpo, le llegaba hasta los pies y las mangas eran tan cortas que se le podían ver los brazos a la perfección, sus pies estaban descalzos permitiéndole sentir la arena y las hojas secas del suelo.

—Para ser un gato eres muy rápido —murmuró, tomando una bocanada de aire.

Estaba cansada, aunque eso no evitaba que se divirtiera.

Siguió persiguiéndolo hasta que, de un momento a otro, este se detuvo frente a un agujero que estaba justo al lado de un inmenso árbol con un tallo frondoso. Y no solo el gato se detuvo, sino que las risas también lo hicieron.

—Ya te tengo, gatito —masculló, acercándose con lentitud, mientras evitaba pisar algunas de las hojas, porque sabía que el ruido avisaría al felino de su presencia.

Dio un último paso y cuando estaba por atraparlo, este se lanzó dentro del agujero.

—¡Oh, por los dioses! —Se tapó la boca con las dos manos—. Acaba de matarse —exclamó, sorprendida.

Se aproximó hacia el agujero, con el fin de identificar cualquier signo que indicara la presencia de un gato o el cadáver de uno.

—Gatito, gatito —repitió en susurros—, gatito muerto —ladeo la cabeza al no lograr ver nada.

Para que sus ojos pudieran visualizar con mayor facilidad el interior, metió su cabeza dentro del agujero—mala idea, muy mala idea, Alicia—, al no sostenerse firmemente contra el suelo, cayó dentro del agujero, mientras gritaba y su vestido se levantaba, dejando al descubierto sus piernas.

Pero el agujero no parecía tener final.

¡Alicia!

¡Alicia!

𝐀𝐋𝐈𝐂𝐄 𝐈𝐍 𝐃𝐑𝐀𝐆𝐎𝐍𝐋𝐀𝐍𝐃 | HOTDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora