CUENTOS DE UNA LUJURIA DESENFRENADA.

CUARTA PRUEBA. EL ASCENSO DE LA EMPLEADA ESPECIAL.

El beso sorprendió a Susana quien al inicio no supo que hacer al inicio. Luego de unos segundos que parecían eternos ella lo empujó terminar el beso, ella estaba sonrojada por la acción de Dennis.

—¡Dennis! ¡¿Por qué hiciste eso?!—Dijo ella con la cara completamente sonrojada y sorprendida del beso.

—Mi amor por ti no una ilusión Susana, te amo, amo todo de ti, y lo tomaré por la fuerza, tu cuerpo es mío completamente—Acto seguido la volvió besar con mucha efusividad, ella intento quitárselo pero el la tomaba con fuerza mientras metía su lengua dentro de ella para profundizar su beso.

Susana no sabía que hacer, al principio ella solo se quedó quieta por no saber cómo actuar por este tipo de acción pero luego entro en razón y quiso quitárselo pero el no la dejaba.

—¡Susana! ¡Susana! ¡Te amo!—Dijo Dennis mientras entre separaciones para volver a besarlo.

—¡Dennis!…Ammm…por favor…espera…espera…mmm—Susana quería hablar pero el no la dejaba. Hasta que haciendo un gran esfuerzo ella logró zafarse separándose de Dennis, ella tenía un hilo de saliva escurriéndole en la parte inferior de sus labios—¡¿Qué rayos te ocurre?!—Dijo ella muy molesta por la acción del chico.

—¿No te gusto?—Pregunto Dennis con inocencia—Creí que así se besaban a las mujeres mayores.

—¡Por supuesto que no me gusto!—Replico ella muy molesta—¡No puedes hacer esto Dennis! No sé que piensas que mi pero no voy a dejar pasar esto, lo hablaré con tu padre, por favor no me vuelvas a hablar mientras estemos en este viaje—Ella camino molesta a la puerta no sin antes decir—Estoy muy decepcionada de ti Dennis—Iba abrir la puerta pero Dennis la tomo de la cintura y la alejó de la puerta con violencia.

—¿Quiere que sea rudo? Bien, seré rudo—Dijo para volver a besarla pero sus manos fueron directo a sus pechos y los agarro con fuerza.

Susana se llevó una gran sorpresa, quiso abofetearlo pero Dennis comenzó apretar sus pechos y jugar con ellos mientras intensificaba su beso haciendo que ella no supiera que hacer ante está situación.

—Eres mía, mía, mía, eres mía Susana—Dijo Dennis cuando separaba sus labios para tomar aire, el tenía muchas ganas de tocarles los pechos a Susana—Son tan suaves, blandos y geniales ¿Cómo será tocarlos de verdad?—Exclamo para seguir tocándola y besándola.

—Dennis…para…para—Dijo ella queriendo quitárselo pero a cada momento, por alguna razón no podía hacerlo.

—Noo, Dennis, no hagas esto, déjame ir, tu padre te castigará—Dijo ella forcejeando pero el no la dejaba ir, espero mucho para esto y no la va a dejar ir.

—Eres muy sexy Susana, tan sexy, que ya quiero saborearte, de seguro que no pasas mucho tiempo de calidad con tu esposo ¿Verdad?—Dijo mientras jugaba con ella “bailando” con ella ya que sus forcejeos eran muy inútiles y solo hacían que sus movimientos parecía que están bailando en la habitación.

—¡Por favor ya suéltame Dennis!—Le pidió Susana con un notable miedo—¡No sé que te ocurre pero suéltame por favor, no me gusta lo que estás haciendo.

—¿Lo que estoy haciendo? Pero ni siquiera estoy empezando a actuar, pero creo que ya debería empezar, si, haré eso—De forma audaz soltó uno de los pechos de Susana pero rápidamente y sin ninguna vergüenza metió si mano dentro del pantalón de Susana y le tocó la vagina.

—¡Uhhhh!—Exclamo ella al sentir la mano de Dennis tocando su parte íntima ya que no solo estaba dentro de su pantalón sino también la metió dentro de su calzón.

—¡Qué suavecito!—Dijo el con mirada lujuriosa—¿Aún no se a mojado? No sé preocupe, la hare sentir muy bien—Comenzó a mover sus dedos para acariciar la parte íntima de ella.