Adrien
Abrí mis ojos y lo primero que sentí, fue un intenso dolor en mi espalda. Me levanté con cuidado, y me di cuenta de que estaba en el sofá.
¿Cómo llegué aquí?
Me dolía la cabeza, pero el dolor no era tan fuerte, aun así, debía tomarme una pastilla.
Creo recordar que Jessica me invitó a un bar para celebrar el éxito del desfile, me trajo, y... ¿Marinette?
¿Mencioné a Marinette?
No la habré llamado, ¿cierto?
Me levanté rápidamente del mueble, y me sentí mareado. Me tomé unos segundos para calmarme, caminé hasta el cuarto y abrí con cuidado la puerta, allí estaba la pelirroja acostada de lado en mi cama, con la misma ropa de ayer.
—Jessica...— me acerqué a ella, puse mi mano sobre su hombro y la sacudí un poco— Jessica...— hablé un poco más alto.
—¿Qué sucede, Adrien? — respondió pesarosa— Quiero seguir durmiendo— se giró para darme la espalda.
—¿Qué pasó ayer? No recuerdo mucho, pero si recuerdo haber mencionado a Marinette.
—Es cierto...— se incorporó y quedó sentada sobre la cama— ¿Cómo está tu cabeza?
—Me duele un poco.
—Ve a cambiarte, vamos al restaurante y allí te cuento todo.
Me dirigí al armario y saqué algunas prendas, y antes de entrar al baño, miré a la ojiverde.
—¿No piensas ducharte?
—No...— puso los pies en el suelo, aun estando sentada en el colchón, se estiró— Iré a desayunar con esta ropa y luego me iré a casa.
—Pero-
—Aunque apeste, Adrien— me interrumpió— No pienso ducharme en un baño que no sea el de mi casa. Además, no tengo ropa limpia.
Es cierto.
No dije nada más. Me metí a la ducha, y mientras, intentaba recordar que más había pasado.
Creo que otra cosa se me viene a la mente, y recuerdo haber visto el noticiero con Jessie, era sobre los cumplidos hacia nuestro desfile, pero había algo más, ¿qué podrá ser?
Deje de preocuparme por eso unos momentos, mi cabeza estaba doliendo más al tratar de recordar, y pronto iba a saberlo todo por Jessica.
Me sorprende su tolerancia al alcohol.
Al terminar, me arreglé y salí del baño. Jessie no estaba por ningún lado, pero encontré un papel sobre la cama recién tendida, y decía que me estaría esperando en el restaurante.
Dejé la nota encima de la mesa de noche, agarré las llaves de la habitación, mi teléfono y salí de allí.
No tardé más de cinco minutos en bajar, y vi a la ojiverde en la mesa en donde siempre nos hacemos. De lejos vi como tenía la mirada puesta en su teléfono, por lo tanto, no se dio cuenta de que me acerqué.
—¿Qué es tan interesante? — inquirí sentándome frente a ella, luego levantó su vista para mirarme.
—Las noticias sobre el desfile— volvió su vista a la pantalla— Te pedí unos panqueques simples y un jugo de naranja.
—Gracias.
—Ahora si...— dejó el aparato sobre la mesa— ¿qué es lo que recuerdas de ayer?
Le conté desde que fuimos al bar, que me excedí de copas, ella me llevó a mi habitación, vimos las noticias donde estaban hablando sobre el desfile, y también le dije que tenía un recuerdo muy vago sobre haber mencionado a Marinette y haber visto algo más en la televisión a parte del desfile.
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▪︎Por lástima▪︎ |Adrinette|
Romans¿Qué harías si la mejor amiga de tu hermana se te declara? ¿La rechazarías o aceptarías sus sentimientos? En el caso de Adrien Agreste, decidió escoger la segunda opción, y las cosas no salieron nada bien. Pero con el tiempo, se arrepentirá de haber...