Capitulo 16- Te necesito (+18)

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Roman fue a entrenar junto con Dean, por lo cual, me quedé sola hasta que llegaron las chicas junto con James. Los hice pasar a la sala de danza; le expliqué a James lo que haríamos y luego de unos minutos se marchó. En medio de la clase, el timbre sonó; dejé a las chicas unos segundos para ver quién era, como si no fuese obvio, era Dom.

--Qué pasa?--pregunté mientras él pasaba

--Vengo a verte dando la clase, no me lo podía perder!--dijo divertido,sonreí y fuimos hacia la sala; las chicas se quedaron quietas mirando a Dominique

--Chicas, él es Dominique, pueden decirle Dom; él es mi pareja de baile, por lo cual, quizás lo vean seguido por aquí. En fin, sigamos con los ejercicios...--dije y comencé a repetir los ejercicios antes pautados.

Una hora y media más tarde, James regresó a buscar a las chicas, ellas estaban muy felices por la clase. Luego de que todos se marcharan, de darme una ducha y merendar algo, me recosté en el sofá.

Roman llegó, se sentó al lado de mi cintura en el sofá y me besó; su cuerpo se atravesó sobre el mio y cuando quise darme cuenta, él estaba completamente sobre mi. Me basaba dulcemente mientras su mano derecha acariciaba mi abdomen; lentamente deslizó su mano izquierda a mi muslo, apretó ligeramente, la movió hacia el lado interior de mi muslo, movió hacia un lado mi pierna y se puso entre ambas.

--*Te necesito...*--susurró cerca de mi boca. Se apoyó en mi y al sentirlo, me asusté.

Me desperté sobresaltada, mi respiración agitada por el miedo, no miedo de él o de la situación en la que estábamos, sino de lo que sentí en ese momento al escucharlo y sentirlo. No podía creer lo que había soñado; si, me gusta Roman, pero no creí que a tal punto. Eran las siete de la tarde cuando desperté de ese sueño, sentía mi cuerpo algo acalorado y pesado, estaba con una extraña sensación en mi estómago y no se pasaba. La puerta sonó de pronto, me sobresalté; caminé hacia ella y al abrir, vi a Roman. Oh no,no podía verlo ahora,no sintiendo lo que siento en este  momento.

--*Hola linda,te desperté?*--dijo con una sonrisa en su rostro,se acercó a mi y me besó en los labios,entró al departamento

--*No, estaba recostada pensando*--mentí, cerré la puerta y caminé al living

--*En qué pensabas?*--preguntó sentándose en el sofá

--*Las clases,los horarios, el comercial...*--mentí me senté a su lado y él se acercó más a mi cuerpo

--*Te extrañé,sabías?*--dijo mirándome tiernamente, su mano acarició mi muslo y me levanté del sofá de un salto

--*Creo que me voy a poner a practicar un poco, necesito tener algo para el comercial...*--dije a modo de excusa; fui hacia mi cuarto, comencé a revisar mi ropa, tomé un short y una musculosa larga por debajo de las caderas; me quité la remera y cuando estaba por ponerme la otra,Roman me sujeta por la cintura

--*Por qué no puedo estar sin vos un instante?*--dijo apoyando su frente en mi hombro

--*Roman...*--susurré conteniendo la respiración

--*Por favor,necesito que me beses, necesito sentir tu cuerpo...*--dijo y besó mi cuello lentamente, me giró y comenzó a besarme apasionadamente

--*Roman...*--susurré nuevamente mientras me alejaba un poco de él

--*Qué sucede?*-- dijo intentando besarme nuevamente

--*Necesito mostrarte algo*-- dije algo apenada, si él en verdad me quiere, va a comprenderme. Roman se alejó unos centímetros de mi

--*Pasa algo malo?*--preguntó preocupado ahora

--*Solo, necesito que me escuches...*--le dije mientras lo miraba avergonzada. Me alejé unos pasos de él, respiré profundo y luego de juntar coraje, decidí contarle esa parte de mi historia de la cual me avergonzaba.

La Bailarina del Luchador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora