Mi niñera y yo (Bebé A Los 12) Parte II

Sustos

Si tan solo lo que soñé esa vez fuese real... no se que estoy diciendo, Paola me tomó de la mano para obligarme a salir de la cama, pero yo seguía luchando para quedarme acostada unos minutos más, fue tanto el movimiento que una de las cintas del pañal se rompió haciendo que se soltase de un lado, y con el peso del cuerpo más el movimiento es que se comenzó a embarrar la popó en la cama.

Paola: Bebé, quédate quieta un momento, solo deja que te tome en brazos para que esto no se embarre más.

Laura: te dije que me dejaras tranquila un rato.

Paola: esa no es una excusa valida, ahora voy a tener que lavar las sabanas y quien sabe que otra cosa.

Me rendí por el momento, pude ver el rostro de Paola y no parecía contenta, no me quería disculpar, como castigo me hicieron lavar a mano la ropa de cama que había manchado, Paola al ver que no podía limpiar bien la ropa me indicó como debía hacerlo, me ayudó menos de lo que me hubiera gustado.

Paola: apúrate con eso bebé que alguien te espera.

Laura: ¿Quién es?

Paola: dice que es un compañero de tu escuela.

El único chico que se había quedado en el pueblo durante las vacaciones era David, estaba nerviosa, a pesar que lo sucedido en el hospital fue un sueño, se que en mi habitación y en casi todos lados hay cosas de bebé, ¿Por qué tenían que bajar la sillita alta del ático? se que aún me puedo sentar en el, según recuerdo la habían dejado en la sala de estar.

Paola: veo que a tu amigo le gusta tu sillita.

Laura: Mamá, por favor, dime que no hay más cosas de bebé en la sala.

Paola: creo que no le importa mucho que tengas tus juguetes y biberón en el piso, creo que está jugando con ellos.

*****

Esteban**: ¿Estás escribiendo tu historia de cuando eras niña?

Laura**: emmm, si, ¿Hay algo malo en eso?

Esteban**: ya escribiste la parte en que David, tu amor platónico... #@$+&)@("!... ¿Que haces?

Laura**: no sé si contarlo, pues no es relevante para la historia en sí.

Esteban**: ¿y la vez en que te pillaron con tu mejor amigo a las afueras del pueblo?

Laura **: Esteban... Ya deja de interrumpir, ahora en qué parte me quedé?

*****

Laura: pero mamá!

Paola: será mejor que te apresures si no quieres que David encuentre los pañales sucios que dejaste debajo del sofá.

Una vez que Paola salió de la habitación, me quería terminar de vestir, pero algo no andaba bien, no encontraba ropa por ningún lado. Me dispuse a bajar con solo un pañal puesto cuando de pronto escucho una voz familia... era Esteban, se suponía que no vendrían para estás vacaciones.

Esteban: Laura! Voy a subir.

Con cada escalón que subía se me aceleraba el corazón, no quería que me viera en pañales, no sabía si el los seguía usando o no y eso me ponía nerviosa, me abalancé sobre la puerta para poder ponerle llave, cuando de pronto se comienza a abrir.

Esteban: Hola Laura...

Logré llegar a la puerta e impedir que la abriera lo suficiente para que me viera, por suerte Paola venía detrás de Esteban y logró llevárselo a su recamara, comencé a buscar ropa y lo único que pude encontrar fue mi pijama de osito, llamaba a Paola para pedirle que me buscase ropa limpia, pero no contestaba, mi temor era cada vez más grande, ¿Qué dirá Esteban si me ve con este pijama? o ¿Qué pasaría si bajo solo con el pañal puesto?

Laura: Ya cálmate Laura, es solo un pijama, no se darán cuenta que llevas pañal debajo.

Gran error, el pañal se notaba y bastante, Paola me había puesto uno de los grandes y era demasiado abultado, así que me animé a bajar con el pijama y así buscar ropa que oculte el pañal. Al llegar al sala de estar no había nadie, eso era un pase libre para correr al cuarto de lavado, aún quedaba la cocina, pero antes de cruzar la puerta me puse a inspeccionar el lugar y por suerte no había nada de bebé a simple vista más que un pañal sucio que se ocultaba detrás del sofá, lo tomé y comencé a caminar hacia la cocina.

Voz: Hola Laura. 

Un frío recorrió mi cuerpo como nunca antes, me doy media vuelta y era Paola, para mi suerte traía ropa limpia.