Dulce apuesta

Apuestas y fiesta

POV's Artemisa

Bien, creo que nada mas podía empeorar, o mejor dicho, mejorar. Nos habían echado de Magic Art por razones obvias, por supuesto.

-¿Sabes? No entiendo para que tus padres se tomaron el trabajo de cambiarnos-solté de golpe mientras soltaba una gran bocanada de aire-. Ellos saben que no cambiaremos.

-¡TÚ ESTAS LOCA, COMPLETAMENTE LOCA! -me grito mi mejor amiga por ¿décima vez? en el día la misma frase.

Rodee los ojos y tome mi cigarro.

-Oh no peliazul, solo me acosté con un maestro que estaba completamente ardiente. ¿A caso tiene algo de malo eso? -pregunte mientras la miraba divertida.

Bien, quizás si este un poco loca, no es normal acostarse con un maestro. Pero créanme él era verdaderamente ardiente.

-¡OH CLARO QUE LO TIENE, TENIA 27 AÑOS! -grito mi mejor amiga mientras llamaba a su primo.

-Solo son 10 años-. Dije despreocupada.

-¡MALDITA LOCA! -grito por ultima vez Jules o al menos fue lo ultimo que pude escuchar.

***

Estaba sentada en mi cama escuchando música y observando fotos de Sean. Me sentía una acosadora, pero ¿a quien le importa?

Mi mente comenzó a ladear sobre aquel día en el SkatePark. Mis recuerdos vagaban sobre todo, la apuesta, Sean, Dylan, Francisco, Ben y Dean.

Flashback:

-¡NO LO SOPORTO ARTEMISA NO LO SOPORTO! -grito Jules mientras miraba a Dyaln con furia.

Solté una fuerte carcajada y la tome del brazo para apartarla.

-Deja de gritar, pareces una maníaca -solté tratando de cesar mi risa pero lo único que conseguí es que se volviera mas fuerte.

-Oh déjate de reír, lo detesto. Lo mataría -dijo ella con resentimiento.

Calme mi risa y saque mi caja de cigarrillos, tome uno, lo lleve a mi boca y lo encendí.

-Ya ya, deja al pobre chico en paz, lo conocemos hace unas horas. A parte, no querrás que sea Dean quien tenga que calmarte-.Dije mientras soltaba todo el humo acumulado.

-Te comes a Sean con la mirada, lo quieres en la cama y se nota -soltó ella divertida ignorando por completo mi comentario, sabia lo que estaba tramando.

-Quizás-dije mientras dirigía mi vista hacia Sean y le daba una profunda calada a mi cigarrillo-. No me culpes es hermoso.

-Hagamos una apuesta-propuso mi mejor amiga con felicidad.