•••Ritual•••

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El día empezó con la mismas exigencias de Bakugo de siempre, empezando con romper los huesos de sus dedos y empezar a tirar explosiones como un loco psicópata que simplemente causaban dolor en las partes afectadas por aún más heridas de las explosiones.

Entonces, ¿Que fue lo extraño de ese día? Fue cuando tiraron de el cuello de su camisa y lo arrastraron a una habitación abandonada en su escuela.

"Dicen que solía ser un heroe que mató a varias personas al ser traicionado por sus mejores amigos." Escuchó la voz de Bakugo y las risas de algunos de sus compañeros que sabían de la situación en la que se encontraba.

"Vas a invocarlo, todo lo necesario está ahí mismo." Bakugo ni se tomó la molestia de reformular lo dicho por una pregunta cómo es costumbre, simplemente dio la orden, queriendo que Midoriya haga el trabajo sucio por si mismo "Dicen que si le dices el nombre de un villano para que lo maté, este lo matará a menos de que no lo considere digno de matar. En ese caso, el mismo te quitará los ojos y los intestinos." La persona que dijo ese dato hizo un sonido estrangulado hecho con el quirk de esa misma persona.

Escuchó a uno de los extras de Bakugo reírse entre dientes "Va a matar a Midoriya. A ningún héroe profesional le gusta la basura, además de que les pagan para quitarla." Midoriya tuvo que soportar las náuseas que le provocó la imagen mental que su cerebro creo en su mente, amaba sus ojos e intestinos.

Midoriya empezó a golpear la puerta una y otra y otra vez con desesperación al probar que no podía girar la manija. Todos sus intentos resultaron inútiles "¡Alégrate Midoriya! Al menos tu muerte beneficiará a alguien. Solo debes encender el encendedor y prender las velas, además de decir varias veces Eraserhead."

Varias risas resonaron, todos en su salón de clases colaboraron para hacer eso.

"Me preguntó si quebrara el cráneo de Midoriya, lo más probable es que suene como sonó el hueso de su pierna la otra vez." Varias voces se unieron para reírse y susurrar sobre aquella vez en la que rompieron su pierna.

Midoriya empezó a temblar con pavor, golpeando la puerta que se cerró detrás de él que le impedía salir de la habitación. Aunque no podía saber lo que estaban haciendo los demás del otro lado de la puerta sabía que lo estaban vigilando como leones que no buscaban más que ver a su presa sufrir antes de comerse está presa, leyó en algún sitio que entre más asustado este el animal cuando se muere mejor sabe.

"¡Vamos Deku!¿¡Es que acaso aparte de inútil eres un cobarde!? Ni que tuvieras algo que perder, ¡Tu madre se suicidó hace tres meses!"

"Si yo fuera ella lo abría hecho en cuanto naciera el imbécil."

Varios de sus compañeros se unieron para reír en la misma risa desquiciada que los llenaba de alegría a todos ¿Por qué lo odiaban tanto? El nunca le hizo nada a sus compañeros de clase, nadie ni siquiera tuvo un poco de empatía con él, ni siquiera miradas de compasión cuando su pierna se rompió.

Midoriya estaba aterrorizado, nadie debía de ser como sus compañeros eran con él y mucho menos forzarlo a hacer algo de ese estilo y menos cuando su vida estaba en juego. Tampoco es como si a sus propios compañeros les importará su existencia pero al menos quería imaginar que a ellos les importaba, ellos ya le habían dejado bastante en claro a Midoriya que lo odiaban.

¿A All might si quiera le importaría si su queridísimo sucesor muriera? Quizás All might los primeros días lloraría y luego superaría su muerte como debió de hacer desde un principio, no por nada las estadísticas de muertes para quirkless eran tan altas y no por nada ya tenía su funeral pagado desde que tenía 6 años.

"¡Vamos Midoriya! ¿¡Quieres seguir siendo el enorme parásito que siempre has sido!? ¡Si tienes suerte en esto puedes morir! Luego, ya sabes, rogar para que en tu próxima vida tengas un quirk."

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