Rosé y yo +18 (Blackpink)

Día de Lea

Tomé mis llaves, mis lentes de sol y salí del apartamento directo al subterráneo. Me subí al auto y me dirigí a la Pink House en busca de mi Ardillita.

A los pocos minutos llegué. Estacioné y atravesé las puertas de la entrada. Las chicas aún no llegaban.

¡Mamá! - me gritó emocionada Lea desde la mesa de comedor - hace mucho que no te veía - agregó corriendo hacia mi. La verdad solo nos habíamos separado durante la mañana y medio día, pero olvidaba que eso para un infante era mucho tiempo.

Debías tomar tus clases, ¿ya terminaste la última? - le pregunté agachándome para tomarla en brazos.

Sí, mi clase de piano terminó, estaba aprendiendo la nueva canción de mami - me dijo emocionada.

¿Cuál nueva canción de mami?- le pregunté con curiosidad.

No puedo decirte, es una sorpresa para su tour - me respondió tapando su boca con ambas manos. Me reí y me dirigí hacia Emma.

La llevo a su casa, vamos - le ofrecí, ella asintió y se paró de su asiento. Todas caminamos hacia el auto y nos subimos, y claro, Lea atrás en su silla para menores.

Entonces, usted también conoce la nueva canción de Rosé - le pregunté a la maestra mientras conducía para dejarla en su hogar.

Sí, pero me prohibió hablar de eso con usted, lo siento - me respondió bajando la mirada.

Ya veo, no hay problema, Rosé nunca me deja escuchar sus canciones antes de los lanzamientos - le dije. Me moría de ganas por escucharla, yo era su mayor fan y si le había dejado escuchar esa a Lea, significaba que era otro solo.

Llegamos a destino y Emma se bajó del auto sin antes despedirse. Antes de partir me giré hacia atrás.

Iremos a cenar antes de ver a mami, ¿qué quisieras comer? - le pregunté a Lea con una gran sonrisa.

Pho - me respondió a secas.

¿Qué? - exclamé asombrada - ¿no prefieres ir a Mcdonals o a Johnny Rockets por malteadas de chocolate? - volví a preguntarle.

No, quiero sopa pho - insistió. Quedé perpleja.

Definitivamente eres igual a tu madre - susurré mientras Lea sonreía mirando el paisaje.

Nos pusimos en marcha y como no llevaría a mi hija a cualquier puesto en la calle, nos dirigimos a un elegante restaurante. Si esa pequeña se enfermaba bajo mi cuidado, Rosé era capas de cortarme las orejas.

Al llegar estacionamos y bajé a Lea. Entramos al restaurante y al parecer ya éramos muy conocidas, la gente no dejaba de murmurar cosas y mirarnos. A pesar del tiempo que llevaba con Rosé, no me acostumbraba a eso.

Senté a Lea en una mesa apartada y una camarera llegó.

Señora Park - me dijo entregándome la carta. Tampoco me acostumbraba al nuevo apellido ni menos a que todos lo supieran.

Hola ya sabemos que vamos a ordenar, ¿verdad Lea? - le pregunté mirándola. La camarera se quedó un poco impactada cuando la vio detenidamente.

Es muy parecida a su esposa, señora Park - me dijo. La prensa ya se había enterado de la adopción, básicamente porque Lisa no paraba de postear fotos con su sobrina, por lo que todo Corea ya estaba enterada. La miré y le sonreí asintiendo.

Queremos sopa pho - dijo Lea moviendo sus piecitos en el aire.

Muy bien señorita Lea - le respondió la camarera - ¿para beber?.

Agua y un café, por favor. Muchas gracias - le dije devolviéndole el menú.

¿El café es para mi? - preguntó Lea riendo.