Entre dos mundos

Capitulo 14. Inquietud

La tienda por fuera tenía la forma de un pentágono no muy grande. Sus paredes se erguían rectas hasta donde salía el techo en forma de punta, éste sobre salía un poco en los costados. Su color cambiaba, era como si se camuflara de acuerdo a la vegetación o el objeto que tenía cerca; como una roca, lo que la hacía distinguir eran dos varillas que sujetaban un pequeño techo antes de la entrada.

Por dentro era mucho más grande el piso estaba alfombrado y los sillones eran mullidos, los cuales se veían muy cómodos. También había otro tipo de muebles, en el centro se hallaba una mesa rectangular de madera, parecida a las que había en el comedor del colegio. Estaba rodeada por algunos sillones y mesas más pequeñas. En el extremo opuesto a la entrada, donde el pentágono forma el triángulo, se encontraba una pequeña cocina. A cada lado de la entrada se veía una habitación. Éstas estaban separadas del resto de la tienda por telas, rectas y duras sirviendo de divisiones y las puertas era dos cortinas que podían correrse o levantarse según se quisiera. Cada habitación tenía dos camas marineras y algunos muebles más.

Adelaida fue la primera en entrar, ambos la siguieron. Los dos estaban maravillados, realmente lucia muy cómoda.

-Se ve genial, como para disfrutar unos lindos días de campamento-bromea Lycan. Quería romper la tensión de lo ocurrido. Todavía le corre la adrenalina del ataque en la posada.

-Sí, lastima las circunstancias que nos traen aquí...joven Volkodlak-interviene secamente Ponskish.-Flamel... ¿se encuentra bien?

Ella seguía con mal semblante-Si, es que...me cuesta respirar. Pero ya estaré mejor.

-Vengan a sentarse a la mesa-ofrece Ponskish-, por lo poco que ha contado el Señor Potter no llegaron ni a desayunar-ambos asienten, era pasado el mediodía, ella les sirve algo de comer y de tomar.-Ya que están aquí podemos ir adelantando información ¿Les parece?

-Sí, claro-Nina no ingería nada.

-Señorita Flamel por lo menos beba algo, le hará bien-le sonríe. Lycan también le insiste y ella hace el esfuerzo.-Bueno esto es algo que les iba a comentar yo, luego de que hablaran con el equipo, pero podemos cambiar el orden ya que es irrelevante-extiende un mapa sobre la mesa, en él se observaba una gran masa verde de variada intensidad con la forma casi de un trapecio.-Lo que ven en verde es el bosque que rodea el lugar donde la han tenido a Nina. Nosotros, en este momento, estamos en este punto-señala la parte inferior central del trapecio, una sección de claro en donde comienza a espesar el bosque.-Aunque lo hemos intentado, como ya hemos dicho, no podemos encontrar la casa donde le atacaron. Solo redujimos la zona, al lugar más probable-el mapa tenía marcado un círculo en rojo, atravesado por unas líneas, en el centro del trapecio.

-¿Qué son esas líneas?-quiso saber Lycan.

-Son...las vías del tren-responde Nina tocándose el brazo donde se había lastimado al caer, sin mirarlo, con la voz apagada y viendo el mapa. Una avalancha de recuerdos y sensaciones la están atravesando en ese momento. Quería salir corriendo volver a la seguridad del colegio, de sus amigos-"No es lo mismo que aquella vez-se repite mentalmente-, ahora yo los cazare a ellos...deja de tener miedo"-respira profundo. El aire le seguía faltando.

-Exacto, cerca de donde estamos ahora fue que la encontraron inconsciente-agrega Ponskish.-Desde allí comenzaremos. En el área está incluido el lugar donde hallaron su varita.

-"No puede ser que no tenga algo de delicadeza para hablar. Recita un informe"-. Pensaba Lycan mientras notaba a Nina recibír la información como golpes, no quería decir nada pues admiraba como llevaba el tema. Solo que no quería verla en ese estado, prefería evitarle toda esta experiencia.

Nina comienza a palidecer, realmente le está faltando el aire, apoya una mano en la mesa.

-Necesito salir un momento-se levanta rápido sin esperar aprobación y sale corriendo de la tienda.