My Sweet Baby |❦︎| Binwoo

❦ 𝟎𝟏 ❦

✶⊶⊷⊶⊷❍ - ❍⊶⊷⊶⊷✶

The same is always boring
But at some point, there will be that bit of madness that will come into my veins.

✶⊶⊷⊶⊷❍ - ❍⊶⊷⊶⊷✶

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El reloj marcaba las 7:35 de la mañana, Dong Min apenas y se estaba estirando en la cama. Al ver la hora, se levantó lo más rápido que pudo para bañarse y alistarse.

Era su primer día en la universidad.

Nuestro querido Dong Min, hijo único de los Lee, había aplicado para estudiar la carrera de Medicina y Cirugía, y aunque sus padres se opusieron al principio, logró convencerlos y ahora estudiará lo que más le gusta.

Evita verse en el espejo del baño (como cada mañana) y toma sus pastillas para pasarla bien en el día. Antidepresivo, una para su ansiedad y una cápsula más, que no sabe qué es, pero sus padres lo obligan a tomarsela cada día.

El omega de 19 años de edad sufre de depresión desde que era un pequeño niño de 9 años, sus padres nunca se han enterado de aquello, ni mucho menos que está bajo tratamiento, jamás quiso contarles que en su niñez el psicólogo que lo trataba por su problemas de insomnio se lo diagnosticó, pero aunque sabe que no ha mejorado y que sigue de la misma forma, necesita de sus pastillas aunque sea para no colapsar en medio de la clase.

Necesita sentir su cuerpo somnoliento, perdido en el vacío, mismos efectos que le causan las pastillas.

De pequeño, Dong Min nunca supo lo que era salir de casa a jugar con los niños que vivían cerca de su residencia ya que a sus padres no les parecía correcto que lo hiciera. El chico fue aislado por los mayores por dos estúpidas razones a las que al mismo tiempo no supieron darles solución, pensar que era mejor medicarlo y nunca decirle lo que padecía, fue lo peor que pudieron hacer, pero allí estaba el omega sufriendo, con su corazón lastimado por que nunca pudo ser un niño normal como los demás.

"Eres diferente a ellos, por eso te cuidamos".

Le decían al pequeño niño que no entendía absolutamente nada ¿Diferente? ¿Diferente en que forma?, No lo podían explicar bien, les costaba mucho decirle que habían defectos en él que perfectamente pudieron tratarse a tiempo, pero al no hacer nada por ello, estos se desarrollaron y obviamente, hubieron consecuencias.

Y llegaba ese momento en donde el pequeño pelinegro que ya se había presentado como omega se entristecia en frente de ellos y le repetían de forma repetitiva y casi automática:

"Min, el mundo está lleno de cosas muy malas y horribles, tú tienes una alma pura y eso puede contaminarte. Nunca dejes que nadie se te acerque, porque lo único que querrán es aprovecharse de ti y destruir tu inocencia".

En resumen, dejarían que su hijo viviera una vida llena de complicaciones, con problemas emocionales por su "apariencia", porque bueno, el decirle a tu hijo que es feo, que está gordo y que es tu vergüenza, no es un método para que su "enfermedad" no se desarrolle más de lo que está, es todo lo contrario, se convierte en un problema psicológico, donde un niño crece con inseguridades y miedos.

Pero bueno, vaya forma de enfrentarse a la hipersexualidad y pubertad adelantada que produjo la misma.

A decir verdad, las "medidas de protección" que ponían en práctica con el niño, eran destruidas por la falta de ambos padres en el hogar.