The Last Of Us: Destino perdido

Prologo: The Last

Ni The Last Of Us ni Fate o cualquier cosa a la que pueda hacer referencia me pertenecen, crédito a sus respectivos dueños.

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Texas, Estados unidos. 26 de septiembre del 2013

"Oye Shirou, mejor deja eso y vamos a casa. Veré si logro conseguir que el proveedor nos entregue la medida correcta para mañana" Hablo un hombre de barba en sus treinta años, se notaba algo preocupado por el estado del proyecto en el que nos encontrábamos. Creo que todos los presentes estamos igual, la mayoría necesitamos el dinero de este contrato para llegar a fin de mes, ahora nos vemos en una situación complicada solo por un error con el tamaño de unas vigas las cuales podrían lograr que terminemos perdiendo el contrato.

"Entiendo, usted también debería irse, creo que Sarah se enojara si llega tarde justamente hoy" Dije logrando que Tommy Miller, Frank West y el viejo Chuck Greene lo vieran con un asentimiento el cual el hombre no pareció entender, pues estaba mas centrado en su teléfono hasta que se detuvo para vernos con algo de duda y miedo.

"¿Por que Sarah se enojara solo por ser hoy exactamente?" Todos no hicimos mas que sonreír en una alzada de hombros conjunta mientras empezamos a caminar hasta la salida de la construcción a media en la que estábamos.

"Lo sabrás pronto, hermanito" Menciono Tommy mientras salia junto al resto del lugar con una pequeña sonrisa en su rostro.

"¿Te llevo, Shirou?" Menciono Chuck mientras subía a su moto para darme un casco. Chuck siendo un tipo castaño, una barba afeitada aunque ya empezaba a notarse nuevamente, con una chaqueta de motociclista amarilla. Siempre fue un tipo amable, aunque supongo que tener mas de un trabajo para mantener a su hija Katey luego de que su mujer lo dejara vuelve a cualquier hombre rudo en alguien que aprecia a sus amigos. Mas cuando sus compañeros de trabajo tres estamos en situaciones similares.

"Claro me vendría bien" Ciertamente lo hace, no estoy seguro, pero como es costumbre Illya posiblemente me este esperando despierta. Desde que la tome bajo mi tutela luego de que su familia se fuera al demonio por un problema interno ha sido mi responsabilidad. Aunque ahora tiene doce años resulto volverse muy madura, aunque preferiría que no viera tanto anime o que no se portara tan infantil en algunos momentos. Por lo demás creo que no me va tan mal, desde que llegue a este país las cosas fueron un poco mas complicadas, tal ves por mi separación con Rin, lo ocurrido con Sakura o quizás todos los problemas de mi relación con Ayako la cual fue la causante de muchos de esos problemas.

Creo que fue bastante sorprendente el enterarme que unos años después de llegar a este país una citación para ver a un juez llego. Resulta que la hija biológica de mi padre adoptivo se encontraba en una situación difícil dado a un problema interno de su familia, algo que para ser una familia de nobles como les gusta llamarse no resultaron ser mas que personas problemáticas que abandonan a una niña cuando esta ya no les de utilidad. Fue un inicio difícil que me llevo a pedirle consejos a mi antigua tutora que mágicamente llego a Estados Unidos para visitarme para darme mil consejos sobre como cuidar a un niño, cosa que fue rara, estoy seguro de que yo era quien cuidaba a mi tutora la mayoría del tiempo.

Las primeras semanas fueron complicadas, al parecer vivió una vida bastante solitaria y encerrada donde solo tenia uso por su lugar como la única hija de la antigua líder familiar. Para mi fue sorprendente, mi padre jamas hablo de su familia en los años que estuvimos juntos. La verdad el siempre desaparece por mucho tiempo, incluso creo que llevo mas de diez años sin verlo en este momento pero las fechas entre desapariciones pueden cuadrar con el nacimiento de la chica. Aunque en lo personal preferiría tener algo de información anticipada sobre eso, no tenia idea de quien era ella mas tenían los documentos donde se dejaba en claro que era de Kiritsugu, ademas de que pude ver algunas similitudes mínimas como la forma de su cabello o algunas expresiones. Lo mas importante fue la carta del mismo Kiritsugu quien me pedía disculpas mientras explicaba un poco la situación, algo sobre que ella no estaba segura donde estaba, que la mejor forma de mantenerla a salvo era esa... supongo que los problemas fueron grandes, siete años después aun no se nada de ellos.