Narra Dai:
Había llegado a mi casa escalando por aquel árbol.
Pero por alguna razón avía luz en mi habitación, pensé que tal vez la había dejado encendida por error.
Entre por la ventana y vi a Manjiro, juro que casi me caigo del susto.
Cuando ya estaba dentro del todo me miró con una intensa mirada, parecía que me quería matar.
-Dai Sano- dijo el enfadado.
-¿Quién es esa? Que yo sepa el único de aquí que se apellida Sano eres tú. - le dije con determinación.
-aag - rodo los ojos ante mi arrogancia.
-Muy bien, en ese caso Dai... ¡¿Que mierda se suponía que hacías ha estás horas fuera?!- hablo en un tono un tanto irritado pero sin llegar al grito.
-Pues que te voy a decir... Me apetecía salir. - le conteste en una tranquilidad absoluta.
-y acaso no sabes pedir permiso. - me dijo con ironía.
-mm esque era más fácil bajar por el arbol- conteste.
-aag, eres imposible- me dijo para luego señalar que lo siguiera.
Seguimos hasta la cocina donde estaban los demás.
Pero está vez avía más gente como por ejemplo uno con una cicatriz y lo cierto es que le quedaba muy bien.
-Buenas- saludé para recibir un "hola" por parte de todos.
-¿Tienes hambre? - me preguntó Manjiro.
-No gracias ya he cenado - conteste sin darle importancia.
- Oh bien espera...¿Con qué dinero? - me preguntó algo sorprendido.
-Tengo mis métodos - conteste sabiendo que esos métodos eran los bolsillos llenos de dinero de Koko.
Que por cierto hablando del rey de roma Koko entro alterado por la puerta.
-¡ME FALTAN 2000 LLENES! - enserio estaba haciendo escándalo por eso si era multi millonario.
De repente note la mirada de todos en mí. Me dolía que pensaran eso aunque era cierto.
-Por que me miráis a mi- dije indignada.
-A no lo sé quizá por qué curiosamente consigues dinero místicamente y a Koko cabal se le pierde el dinero. - dijo Ran, o al menos creo que así se llamaba.
-¡DAI! - grito Koko detras mía
-O mierda...- dije para salir corriendo del lugar mientras los demás miraban la escenas muertos de risa.
-PERO TIENES QUE TOMARLO COMO UN REGALO DE BIENVENIDA QUE ME HAS HECHO- gritaba mientras corría por toda la mansión con Koko persiguiéndome.
Después de un buen rato, Koko me lo dejó pasar y me senté en un sillon donde estaba el que creo que es hermano del pelo medusa.
-jajajaja... me cae cada vez mejor - dijo el mayor de los Haitani.
-Pues si tan bien te caigo bien podrías haberme ayudado ¿No?
-Razon no le falta- dijo el menor de ellos.
-Contigo no hablo Rin - dijo el enfadado.
-A conque así te llamas - dije yo.
-En realidad soy Rindou - dijo el.
-Pues te queda mejor el medusa - susurre pero al parecer me escucharon.
-pff jjajajajajajajjajaj- dijo el peli- corto.
-Y tú te haces llamar mi hermano - se indigno el menor.
-¿Por que tanto escándalo? Dijo el de la cicatriz.
-Pues estamos hablando. - dije yo sentándome en el sofá.
- pues vale -dijo mientras el también se sentaba.
-Quiero ver una peli, ¿tenéis Netflix o algo? - pregunté.
-Yo si - dijo Ran.
Con eso me metí en su cuenta y...
-¡¿COMO PUEDES CONSUMIR TANTO PORNO!?- estaba por terminar mi frase cuando llego Manjiro.
- ¿Que hacéis? - pregunto el peliblanco.
-Pues de momento buscando una película en la cuenta de Ran y si algo tengo claro es que no me vuelvo a meter en esta cuenta NUNCA- conteste.
-Jajajaja- se rió rin
-OYE! - se quejó Ran.
Al final Manjiro se quedó con nosotros a ver la pelicula. Fue divertido.
Hasta que quede agotada y me fui a la cama.
A la mañana siguiente:
Narra Manjiro:
No sé cómo termine viendo una peli con literalmente todos los de Boten.
Pero estuvo... Bien.
Sin duda todo era gracias a ella.
Pero una parte de mi le entristecía el que no me considerada un padre, entiendo por qué no lo hace... Pero haré lo que sea para poder ser considerado su familia.
-Dai- dije mientras entraba a su habitación, cuando me la encontré apunto de bajar por el árbol.
-¡Ah! - dijo al verme.
-Sube - dije en un tono un tanto intimidante.
-Jo- susurro mientras subía.
-¿A donde ibas? - pregunté neutral mientras me sentaba en una silla.
-Pies me apetecía salir, me aburro, aparte de que el árbol pedía ser escalado - Se excuso ella.
-¿Quieres dinero para salir? - le pregunté.
-¿Eh? - me miró sorprendida.
Al final me dijo que si y le di dinero.
Pero también le pregunté si quería acompañarme a un evento formal de Boten a lo cual accedió.
Narra Dai:
Después de esa conversación salí de casa y me dirigí al restaurante de antes, tenía pensado pedirme un medio infantil, aparte alomejor así podía ver a la chica de ayer.
Me lo pasé bien con ella.
Tal y como predije allí me la encontré, fui a sentarme con ella.
-Hola - saludé con energía.
-¡Dai!- me contestó.
-¿Que hay?- pregunté al ver los papeles que tenía sobre la mesa.
-Registros de pandillas, quería investigar un poco y encontré muchas cosas en común- me explico.
-¡QUE GUAY! - conteste emocionada.
-A que si - dijo ella.
-Espera, voy a por agua y vuelvo - dije mientras me retiraba hacia la barra.
-Buenas- saludo un peli naranja con una sonrisa.
-¡Hola! ¿Me podrían dar un vaso de agua?- dije yo.
-Claro- dijo el.
Mientras me traían el agua me fijé más atentamente que ayer en la decoración, bueno más bien en las fotos.
Y entonces caí en cuenta, el templo en el que estaban tomadas las fotos era el mismo en el que había estado.
Mi atencion se dirigió hacia una foto en el salía un chico rubio, me parecía muy familiar.
-Aqui tienes - dijo el peli durazno al traerme el agua.
-Gracias, una pregunta ¿Esas fotos son de una pandilla? - pregunté yo al haberme ganado la curiosidad.
-Esto... Si era la pandilla en la que estaba de joven con mi gemelo.
-¡Como mola! ¿Me puedes contar más?- dije entusiasmada.
-Dai! - me llamo Nana.
-Te parecerá bonito dejar sola en la mesa y tardarte tanto en volver.- se quejó ella.
-Perdon - le conteste.
Cuando quise darme la vuelta el peli durazno no estaba.
Después de eso Nana me preguntó que estaba hablando con el chico.
Y yo le conteste que le pregunté sobre las fotos.
Ambas pensamos en preguntarle sobre sus pandilla otro día, pues ambas éramos fanáticas de eso.
Pero seguramente se nos olvidaría.
Vota
⭐
