Corría el mes de agosto del 1494 cuando los aborígenes habitaban de la península de Paira divisaron en el horizonte las velas desplegadas de una carabela. No conocían ese tipo de embarcaciones ni sabían que su tripulancia estaba compuesta por salvajes, conquistadores de cientos de oro, de perlas preciosas y todo tipo de riquezas, que solía en grillar en la gente para obligarlos a trabajar por ellos
Nada se sabía en esas tierras"inexplotadas"sobre los estragos que esos mismos invasores estaban causando entre la población nativa de la Española. Los aborígenes de Paira acogieron a los extraños con hospitalidad porque ignoraban que en las islas estaban apresando a la gente para venderlos como esclavos en España o para ponerlos a trabajar la tierra que se apropiaron sin miramientos.
Los pueblos que se resistían al saqueo eran masacrados; las mujeres, violadas, y los sobrevivientes torturados cómo escarnio
Estas matanzas fueron descritas claras y crudamente por un fraile de la época, Bartolomé de las Casas {1484-1566}
En la española los cristianos con sus caballos y espadas comienzan la matanza
Desbarrigaban a las mujeres paridas y despedazaban a los niños y ancianos. Tomaban los niños de las tetas de la madre por las piernas, y daban de cabeza con ellas en las rocas...
Otros bullían los cuerpos de niños en el río riendo y burlando... Hacia una orca larga que no juntasen los pies a la tierra, de 13 en 13 para luego colocar leña A fuego lento y los quemaban vivos.
