¿Enfermo?|Cabo Pompón x Gordi|

Primeros Síntomas

No podía admitir que le latía el corazón cuando aquel cadete pasaba corriendo por la zona donde él suele parar a hacer guardia.
No debería admitir que le costaba pensar en algo cuando él estaba cerca.
Jamás le habían dicho que era posible que el color rosado podía hacer a alguien poner rojo al punto de que sus compañeros se burlarían de él por creer que imagina a alguna mujer.
Aun recuerda como empezaron estos síntomas:

Aquel chico rosado había caído de cara contra el piso,justo frente suyo y por alguna razón... No sintió la necesidad de gritarle "Idiota,¡levanta ya!" mientras se le quedaba viendo con enojo.
Al contrario,se acercó a aquel chico rosado de aspecto débil para brindarle una mano.
Ve su carita triste y raspada levantándose del suelo.

-¡Oh,gracias!--Tenía una voz más fina y dulce que el resto,casi como la de una chica--.

Se quedó callado un rato mientras pensaba,juraría que era un chico en sus casi 20 a 21,pero no tenía una voz lo suficientemente masculina... Tampoco el aspecto si era sincero.
Descartó la idea de que lo que tenía en frente era una posible fémina,sólo los hombres vestían el uniforme militar.

-No te preocupes--No llega a notar que en ningún momento soltó la mano del regordete--.

Nisiquiera cuando lo llevó inconscientemente consigo al lugar donde estaba haciendo guardia.
Gordi por su parte se sentía extrañado de que aquel osito amarillo lo tuviera de la mano,pero no podía evitar pensar que era algo bonito que lo estuviera cuidando mientras se recuperaba del dolor de la caída,era la primera vez que alguien hacía eso con él desde hace mucho tiempo.
Estuvieron así un rato hasta que el cabo debió moverse del lugar y llegó a notar como tenía a Gordi de la mano mientras se movía.

-¿Eh? ¿¡Por qué no me sueltas!?--Incluso después de aquellas palabras su mano seguía apresando al rosado--.

-Oh,eh,es que no puedo--La respuesta causó que el amarillo mirara hacia abajo notando su mano sosteniendo con fuerza la del chico--.

Sintió las mejillas ponérsele calientes mientras dejaba libre aquella mano,eran tan suave que no se dio cuenta de su comportamiento,sólo tuvo el deseo inconsciente de no soltarlo.

--El rosado sonríe con amabilidad como si esto fuera algo para nada vergonzoso-Bueno,¡adios!-.

Movió la mano de lado a lado antes de irse de ese lugar dejando un extraño sentimiento en aquel de ojos violetas.
Quería ir tras el rosado.

-¡Hey,te acompaño!--Corrió hasta ponerse a su lado nuevamente--.

Aquel otro chico no protestó sólo sonrió como forma de mostrar su comodidad con esa idea antes de seguir yendo al edificio donde daban la cena.
Era común que sus compañeros no lo esperarán después de las duchas y tuviera que ir con prisa para no terminar comiendo sólo.
Por su parte Ponpóm sólo se preguntaba qué hacía cambiando su rutina sólo para acompañar a un cadete cualquiera a Dios sabe donde.
Ahhh,pero admitía que estar caminando cerca de aquel soldado era extremadamente agradable:
Podía sentir el leve calor escapar del cuerpo ajeno en un aviso constante de que había un ser vivo ahí,el leve olor a panqueque que nunca pensó que sentiría en aquella base,el cuerpo del chico moviéndose con rebotes en cada paso que daban,la vocecita dulce del rosado tarareando alguna marcha militar que habrán escuchado en la mañana. Lo único malo era ese extraño sentimiento en su estómago,eso y la idea de que en algún momento esto terminaría.

Al día siguiente se preocupó por su nacida fiebre puesto a que juraría que no había razones para esto,no salió con el pelo mojado en toda la semana,no estuvo tomando frío y dormía bastante bien. Lo más curioso es que la fiebre nació cuando aquel soldado del otro día se detuvo a saludarlo mientas le dedicaba una sonrisa.
Luego siguió un extraño pensamiento sobre el color de ojos de aquel rechoncho.
Intentó llenarse la cabeza con las burlas que le hicieron al otro para callar lo que pensó:
"¿Dios podría crear ojos tan hermosos o fue el diablo?"
Fue tan estúpido aquellas palabras salidas de su cabeza que sólo consiguió llenarse de vergüenza.
¿Qué clase de resfriado podía hacer todo esto?

-¿Cabo?--Salió de sus pensamientos encontrando al rosado frente suyo--.

-Cadete,¿qué necesita?--Intentó que su tono fuera el típico de siempre,pero sentía algo en la garganta que le impedía usarlo--.

Sentía la necesidad de tratar bien al chico,no quería hacerlo,pero no podía evitarlo,algo dentro suyo se lo pedía.

-¿Esta bien?--Puede notar la mano del rosado queriendo acercarse a su cara--.

Escucha un gritó por parte del sargento del muchacho preguntando por qué no hacía el ejercicio.

-Oh,¿esta bien,cabo?--Ya dos personas preguntaron sobre su bienestar en menos de 5 minutos--.

Se llevó la mano a su pelaje del rostro notando que este estaba humedecido por el sudor que habrá provocado su fiebre.

-Sí,sólo un poco de fiebre--No pudo evitar llevar su atención hasta las reacciones del cuerpo de aquel soldado--.

Respiraba agitado mientras también estaba estaba sudado por el ejercicio,pero lo sentía casi santo,inocente.
¿Por qué se sentía más afiebrado ahora? Quizás y sólo quizás deba ir a la enfermería.

-¿Seguro? Realmente se ve mal--El marrón se veía un poco preocupado por él--.

Iba a responder con un simple "no te preocupes" hasta que notó que su compañero de al lado también le veía un poco preocupado,esta bien,estaba mal.

-Iré a la enfermería una vez termine mi guardia--Nota al sargento asentir antes de ordenar al otro chico seguir con su entrenamiento--.

El rosado se asusta por la voz dura y fuerte de su sargento teniendo como reacción asentir e irse al instante al campo de entrenamiento de nuevo.
Su fiebre se va incrementando mucho más por ver al chico hacer sus ejercicios diarios,pero él no es consciente de que es por el chico.

(tampoco sé de dónde saque este separador)
Siento q iría más con una historia achuchones x gordi,pero meh como sea
Ya hacía falta un pomposito x gordi

Yo con mis ships donde los integrantes de este no llegan a interactuar y por lo tanto soy el único que en realidad hace contenido
Bueno novios novios
Mira rojas mi esquizofrenia cada día llega a más!