HURT • [ YOONNAM / VMON] AU

TRECE

Los meses han pasado rápido y aún no logra recuperar a su hijo, siempre va a la estación de policías para ver qué lograron averiguar pero la respuesta suele ser la misma "No hay rastros de ellos", "Ninguna cámara captó el momento", "Seguimos averiguando", "Usted solo interfiere en el caso", "Eso te pasa por meterte con alfas mayores", "El tiene la culpa por abrir las piernas" palabras que ya está cansado de escuchar.

¿Es que de verdad esperaban que se cansará de buscar a su hijo? ¿En verdad pensaban permitir esa injusticia solo porque el fue menor de edad cuando paso todo y se dejó manipular por el alfa?

Constantemente buscaba la manera de por su cuenta investigar, lamentablemente era poco o nada lo que conseguía, Yoongi era muy astuto pero él no se rendiría.

Lo peor es que no encontraba un buen abogado que llevara su caso, el que sus padres habían contratado era un viejo verde incompetente, se dedicaba a coquetear con él y lanzar indirectas sobre sus decisiones.

Estaba harto.

Aún no tenía el permiso de la psiquiatra para retomar las riendas de su vida, por otra parte después de tanto tiempo con ella había logrado entender que él estaba mal.

Canalizo todo de la manera errorea pero es que estaba tan desesperado, le habían robado un pedazo de su vida y parecía no haber fin para toda la porquería por la que debía pasar.

No se trataba de un juguete perdido o de una prenda, era su niño, creció dentro de él, pocos meses paso con él, su pequeño Jungkook, tan frágil entre sus brazos inmaduros. Todo lo que había pasado era tan injusto pero él era el juzgado.

Debido a su inestabilidad mental la justicia no colaboraba con él ya que ¿qué padre con esa fragilidad mental le puede ofrecer algo bueno y estable en todos los aspectos a un ser tan pequeño que está en crecimiento?

Se lo habían sacado tantas veces en cara a pesar que era obvio el delito que Yoongi había cometido que ahora sabía se denomina a sustracción parental.

Su vida se había detenido en todos los aspectos y a él no podría importarle menos.

Se encontraba sentado en el suelo de su balcón, con las rodillas pegadas a su pecho las abrazaba con sus brazos.

Ya no tenía lágrimas para derramar, cargaba un dolor tan profundo en su interior, imaginaba a su bebé llorando por no poder comer, recordaba que era glotón. También lo imaginaba queriendo tomar un siesta en su pecho sin encontrarlo cerca y llorando como solía pasar cuando él salía a comprar algo o se demoraba en el baño.

Su bebé. Su Jungkookie.

Se levantó, eran casi las doce y tenía cita a la una con la doctora Yoon.

Tomo su abrigo ya que llovía estos días un paraguas y su chalina.

Se puso su bolso alrededor de su torso era uno cruzado y salió.

Ahora ya no lo acompañaba nadie, él iba solo, ya no intentaría atentar contra su vida nunca más, ya lo había entendido pero aún tampoco superaba lo de su hijo, es más tal vez nunca lo haría, le estaba robando todo ese tiempo con su niño, tiempo que no volvería nunca.

—Buenas tardes Señorita Nayeon— saludo a la recepcionista y por lo que sabía pareja de la doctora Yoon.

—¿Que tal Namjoonie?, la doctora te está esperando- le dijo ella— ya conoces el camino.

—Gracias, nos vemos luego.

Tocó la puerta de la habitación donde ella lo recibía esperando que le diese el permiso a ingresar.

—Pase— se escuchó dentro.

—Buenas tardes doctora Yoon— dijo Namjoon ingresando a la habitación oficina.

—¿Cómo estás hoy Namjoon?— le pregunto ella.

—No sé si me siento resignado o estoy en piloto automático— le dijo él medio bromeando.

—Sabes, mi asistente conoce a una buena abogada, deberías hablar con ella en privado, es una Omega, toma casos similares ya que sabe lo que le hace la ley a los omegas como nosotros— le dijo —te podría proporcionar el número luego ¿Te parece?

—Si, sería genial, gracias— dijo haciéndole una pequeña reverencia.

—Oh no te preocupes Namjoon, lo que te está pasando no es un asunto que se deba tomar a la ligera, requiere de acciones legales, cambiando de tema, iniciemos con la sesión de hoy.

—Esta bien doctora— le dijo el muchacho.

—¿Cómo te sientes emocionalmente hoy?—  le pregunto llendo al grano.

Esta vez a diferencia de las primeras veces el Omega se abrió, ya entendía que ella no era su enemiga, estaba ahí para darle las pautas necesarias para manejar con los episodios de ansiedad y de depresión que aveces llegaban con fuerza a él.

Conversaron por largo rato, ella le preguntaba y él se explayaba en las respuestas.

Al terminar como siempre le pregunto cómo iba con la medicación, porque si, ya estaba medicado.

—Bueno Namjoon, como siempre no olvides los ejercicios que practicamos en la sesión pasada, no olvides tu medicación y siempre que tengas alguna emergencia, contáctame.

—Gracias doctora. nos vemos la siguiente sesión

—Cuidate, te envío el número en un momento.

Asintió saliendo del lugar, donde también se despidió de la asistente de la doctora. Sabía que podía recurrir a ella si algo malo pasaba. Ella no era su amiga, su relación era paciente- doctor pero eso hacía todo más profesional y eso para él estaba bien.

🧸

Ese día una hora después de llegar a su casa llegó el número de dicha abogada, Doctora Kim Jisoo, especialista en violencia de género.

Eso parecía interesante, así que la llamo quedando en encontrarse en un café cerca al centro comercial, no tan lejos de su casa pero lo suficiente para no ser notado.

Dicho día llego, él ya la esperaba en una una mesa había pedido un mate ya que tenía prohibido el café ya que alteraba más sus nervios.

—Buenas tardes ¿Eres Kim Namjoon?— pregunto una mujer muy bonita vestida de traje, se veía muy profesional.

—Si, buenas tardes ¿Es usted la doctora Jisoo?- pregunto cohibido.

—Claro, Jeongyeon me comentó sobre tu caso aunque no profundizó en el tema, así que cuéntame Namjoon— pidió ella.

Esa tarde hablaron largo y tendido de la situación del Omega, le contó cómo conoció al alfa, su edad, como había sido esa primera vez, lo que pasó con sus padres, su embarazo, los documentos falsos y demás.

—Por lo que escucho— dijo ella quien apuntaba rápidamente la mayor información que pudo de lo que Namjoon hablaba- son muchos los crimenes cometidos por dicho alfa.

Namjoon solo asintió, esos días en terapia, sin hacer nada aún, se dedicó a investigar cada una de las cosas que ese alfa había hecho con él, también le comento que lo había dejado muy golpeado y que el intento atentar contra su vida.

—Tenias apenas dieciséis, eras menor de edad, te ultrajo, te manipuló, falsificó tus documentos, trabajaste siendo menor de edad, tuviste el cachorro siendo menor de edad y encima lo rapto y te golpearon, son muchos crimenes Namjoon.

—Lo sé pero como la policía no da con su ubicación todo esto es en vano.

—En realidad no lo es, ¿Hace cuanto tiempo asentaste la denuncia?

—Mi familia la asentó unos días despues de encontrarme convaleciente.

_Bueno, ¿tienes aún esos documentos falsificados?

—Si, aún los conservo.

—Eso es bueno, si confías en mí, no te prometo que hoy lo encontraremos pero te prometo que en cuanto lo hagamos recuperarás a tu hijo y lo haremos pagar— dijo ella decidida.