Overlord: El que se quedó PRT. 2

Capitulo 64 Volumen 7

Zesshi sintió una inesperada sensación de alivio cuando entró en la habitación y descubrió que Layali todavía estaba donde la habían dejado. El corazón en el pecho de Zesshi se aceleró por un momento cuando tocó la manija de hierro oxidado de la puerta, y comenzó a desacelerarse tan pronto como la pequeña niña apareció a la vista. 'Así que las cerraduras no funcionan... maravilloso. Qué lugar.' Zesshi pensó, pero cubrió sus pensamientos con palabras.

Acuéstate en la cama, te voy a quitar las vendas. Dijo Zesshi, y Layali obedeció en silencio.

Los dedos de Zesshi deshicieron hábilmente el nudo justo por encima del tobillo de la niña que mantenía el vendaje en su lugar, y con cuidado lento y constante, después de levantar la pierna herida con una mano, comenzó a desenrollar la tela blanca manchada de sangre.

"¿Cuánto... cuánto tiempo hasta que me dejes atrás?" Layali preguntó, mirando a su cuidadora con pupilas temblorosas luminosas y temerosas.

"No te preocupes por eso". Zesshi dijo después de unas cuantas vueltas más alrededor de la pierna de la chica. "Todavía estamos muy lejos de Arwintar, Brain matará a tu atormentador, y luego te pondrán en un lugar agradable y todo estará bien".

Si existía o no un 'buen lugar' que la llevaría, Zesshi no tenía idea, pero parecía ser lo correcto para decir.

"No, él no... él... ya no tiene una espada... y todo es mi culpa... es todo lo que tiene y se la quité... no puede pelear sin eso..." Layali comenzó a gemir un poco, y sus ojitos infantiles se llenaron de lágrimas. "Él no puede pelear, no puede matar a Cerebrate... no puede pelear en ese torneo... ¡ha viajado hasta aquí y lo arruiné! ¡No fue mi intención! ¡No fue mi intención! ¡Y no quiero quedarme atrás!". Ella comenzó a llorar. "¡¿Por qué me cuidas si solo te vas a deshacer de mí?!"

La niña lloró, sus palabras, por todos lados; sus miedos se dispersaron, pero Zesshi tuvo que preguntar.

"¿Cómo sabes acerca de la espada? Lo tiré a la basura. Zesshi respondió y luego la corrigió: "Y yo soy quien lo arruinó, para que lo sepas".

Layali se frotó los mocos de su pequeña nariz de botón y se echó a reír: "Podría haberlo sabido, eres malo en cosas... muchas cosas... Vi dónde lo tiraste, pensé que era divertido. Brain no dormía con su espada como él". hacía todas las noches, así que lo miré... y luego... luego miré a mi alrededor, no lo arrojaste lo suficiente, vi lo que quedaba de él...

El rostro de Zesshi se puso rojo. "¡Maldita sea!" Sus orejas cayeron un poco, "Calenté su espada para ayudar a sellar tu herida, pero fui demasiado lejos con ella, y la maldita cosa seguía calentándose más, estaba... estaba arruinada. Brain estaba ocupado contigo, así que... cuando dijo simplemente tíralo, pensé que lo decía literalmente. Así que lo tiré donde pensé... pero tú lo hiciste.

Layali se rió a pesar de sí misma y luego se calló, mirando al techo mientras Zesshi reanudaba el proceso de quitarse el vendaje hasta que desapareció y todas sus heridas quedaron expuestas nuevamente. Zesshi bajó el pie de Layali sobre su muslo para que la pierna de la joven quedara elevada y miró por encima de las muchas marcas. El sangrado había desaparecido y se veían mejor.

"Yo... no sé la respuesta a tu pregunta". Zesshi dijo al fin. "Yo solo... ya no puedo quedarme en este país. No sé a dónde ir, ya no tengo un hogar en lo que a mí respecta. En cierto modo, soy como tú".

Layali le dirigió una larga y dura mirada. "No, eh. Eres fuerte. muy fuerte Puedes hacer lo que sea, nadie puede decir que no a menos que tú lo dejes. Yo soy lo opuesto. No puedo decir que no a menos que la gente me deje... nadie quiere alimentarme... tengo hambre... nadie quiere protegerme... moriré... Cerebrate me encuentra de nuevo... o alguien como él... todo lo que puedo hacer es llorar... si nadie me ayuda... ya no quiero morir... ¡tampoco quiero estar solo! ¡No hay lugar agradable para los niños que nadie ama! ¡Me voy a morir ahí afuera, y la suerte significa que será rápido!".