Hice un pequeño cambio en mí

Regreso

Han pasado 3 largos años desde que Uzumaki Naruto y el Sannin de los sapos Jiraiya se hayan ido en un viaje de entrenamiento para mejorar las habilidades del rubio. Las cosas en lo Konoha habían cambiado bastante desde que se fue Naruto tanto Sakura como Ino habían sido tomadas como alumnas por a quinta Hokage, Tsunade Senju, y el resto de los 12 de Konoha se habían vuelto chunnins  y habían avanzado en sus técnicas.

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Era una dulce mañana en la Aldea Oculta de la Hoja en medio de los edificios y negocios se encontraba una joven de cabello rosa, la cual tenia unos enormes ojos jade la cual tenia una bolsa en la cual traía unos cuantos papeles dirigiéndose hacia la torre Hokage. En la entrada de Konoha se podía ver una caseta de vigilancia en la que se encontraban dos Chunin, Izumo y Kotetsu, los cuales se encontraban durmiendo, ya que no habían visto pasar a ninguna persona por esa entrada y eso los estaba matando del aburrimiento.

_ Hey Kotetzu, alguien se acerca — dijo mientras le daba un leve golpe para que se despierte.

_ ¿Que?....,¿enserio?

En las afueras de Konoha se podían divisar 2 siluetas, un hombre bastante alto, de cabellera blanca rebelde y un joven rubio con 3 marcas en la mejilla. 

— Ese no es, ¿es el no?— dijo Izumo tratando de reconocer al rubio.

— ¡Si, es Naruto, por fin volvió!

Naruto a pesar de haber madurado, no pudo evitar sentirse feliz y ansioso por estar de vuelta en su hogar, este se adelanto dejando atrás a Jiraiya, dio un brinco hasta llegar a la punta del poste mas alto. Con los ojos cerrados, Naruto respiro el aire que fluía en Konoha, para después exhalar y abrir los ojos, el viento golpeaba su rubio cabello y hacia que su ropa se estremeciera. 

— Por fin, después de 3 años..... estoy en casa— exclamó con una pequeña sonrisa, antes de volver atrás y ver a Jiraiya. Este lo vio desde abajo, no podía sentirse mas feliz y aliado de por fin estar en Konoha habían pasado por tanto, sin embargo había valido la pena sabiendo que Naruto ahora era un ninja maduro y completo.

—Naruto voy avanzando para reunirme con Tsunade tengo unas cosas que hablar con ella, me das el alcanzo — dijo Jiraiya alzando la voz.

— Si, no te preocupes Ero-sennin— dijo con una pequeña sonrisa antes de dar otro vistazo hacia los alrededores de Konoha.

— Este mocoso — pensó Jiraiya con una pequeña molestia.

Naruto se sentó en el poste divisando su querida aldea hasta que escucho que alguien gritaba su nombre, ¿esa voz? pensó con una pequeña sonrisa; dio un vistazo hacia abajo, donde se encontró con su compañera de equipo, la chica se la que se había enamorado tanto, se dejo caer del poste estando a unos escasos centímetros de ella.

— ¿Na-Naruto? — dijo Sakura algo sorprendida, después de todo el rubio había cambiado demasiado se había vuelto realmente alto, además de tener un cuerpo mas tonificado y desarrollado y un rostro mas fino y maduro.

— Hola Sakura cuanto tiem.... 

—¡Naruto!— dijo Sakura interrumpiendo al rubio y propinándole un fuerte abrazo realmente lo había extrañado después de 3 años sin su compañía.

—Sakura-chan....— susurro Naruto al cabo que correspondía el abrazo

—¡Baka!, cuanto tiempo ha pasado, no sabes cuanto te eh extrañado— dijo Sakura con un tono de reclamo.

—Jeje... yo también te eh extrañado Sakura-chan no sabes cuanto dattebayo— dijo Naruto dándole una pequeña sonrisa 

—Me eh sentido muy sola sabes— dijo Sakura interrumpiendo al rubio y propinándole un fuerte abrazo realmente lo había extrañado después de 3 años sin su compañía.