¿Te he visto antes?
TYLER
Era ella. Nuestros ojos se encontraron por un efímero instante. Quería que continuara, pero sus ojos mostraban extrañeza, solo que no sabía a qué. Dirigió su mirada al salón e ignoró mi presencia.
- Connor, ven aquí, tu hermano llego.- dijo ella extendiendo su mano hacia Connor.
- ¡Hermano!.- exclamó una voz chillona y conocida corriendo a abrazarme.
La chica se limitó a mirarnos con discreción, aunque como ya dije, confundida.
- Hey campeón, ¿Qué tal estás?.- dijo Jona con entusiasmo.
- Ella es mi maestra.- dijo el pequeño señalando a la bella chica que teníamos delante mientras que en ella se asomó un ligero rubor. No quería que se incomodara. No pude decir mucho o más bien nada. No sabía si ella me recordaba. Lo único que pude hacer fue asentir con la cabeza, acción que ella repitió.
- Mucho gusto, soy Jona.- dijo mi amigo con una sonrisa para después dirigir su mirada a mi, como si esperara algo.
Lo que rompió el hielo o algo así, fue que llegó una madre y se robó su atención. Por un momento olvidé que había más personas, olvidé que estaba ocupada, al menos sé que habrá una próxima vez; tomé a mi hermano y Jona nos siguió el paso, hay demasiados niños gritando pero no quiero alterarme, no frente a ellos, por lo que trato de esquivar a todo el mundo. Jona parece notarlo, de nuevo, por lo que también comienza a esquivar e ir más rápido.
Una vez afuera, respiro para relajarme ¿Por qué comienza a pasarme esto? ¿Por qué ahora?, Jona me mira con preocupación y yo solo niego con la cabeza. Connor quiere ir por otro helado, pero no me siento con ánimo, por lo que Jona se ofrece para que regrese a casa, con la condición que me traerán un helado doble de queso y chocolate. En realidad lo necesito, necesito estar solo.
Una vez en casa, subo a mi habitación en busca de mi bajo, no sabía que tocar exactamente, hasta que la inspiración llego, Boys at night de Jim Lang. Comienzo a relajarme y a preguntarme al mismo tiempo, ¿Por qué de pronto me siento así?
Comienzo a recordar lo que paso ese día, lo que parece la raíz de mi comportamiento, últimamente lo he estado soñando pero nadie más que Jona lo sabe.
Me desconecto de mis ideas cuando escucho el timbre, seguramente son ellos. Bajo las escaleras despreocupadamente y cuanto abro la puerta me llevo una sorpresa, un grupo de niñas exploradoras me miran expectantes con una cálida sonrisa.
- Buenas tardes señor.- Ya empezamos mal.
- Buenas tardes niñas.- A lo lejos veo a mis hermanos con los helados y estos al verme con las niñas exploradoras comienzan a reírse al ver mi cara de pánico. ¿Cómo me deshago de 4 niñas exploradoras?
- Estamos vendiendo galletas de chocolate, ¿quiere comprarnos algunas?
- Gracias niñas, estoy bien.- respondo con una tímida sonrisa.
- Solo nos quedan 3 cajas. Llevamos una hora tratando de venderlas y queremos ganarle a la otra tropa.- el grupo de niñas comienza a actuar con un aire melancólico y a mirarme.
No puedo con esto. ¿Quién soy para decirles a niñas de 8 años que no? Asiento y saco mi cartera.
- Son 7 dólares.
Genial. Mis hermanos siguen mirándome desde la otra calle, como si estuvieran presenciando una serie cómica en primera fila. Les pagó a las niñas y me entregan las cajas. Cuando estoy por entrar a casa, veo de reojo la casa de uno de mis vecinos y me percato que las mismas niñas le estaban vendiendo 3 cajas de galletas, cajas que habían escondido en algún lugar de la calle.

ESTÁS LEYENDO
100 DÍAS PARA OLVIDARTE
Roman pour Adolescents¿Te has enamorado de alguien del que sabías que no era una buena idea? En esto se resume la vida de Samantha y Tyler, dos adolescentes que solo quieren ser libres de su pasado y dejar de huir, sin saber que su nuevo amigo pasa por exactamente lo mis...