The One Who Makes Me Smile

Lágrimas de un muerto (TOWMMS)

Para llegar a la clínica vamos en el carro de Maura, algo viejo pero no significa que es inservible. Yo estoy atrás y Niall en el volante. Como es un pueblo pequeño llegamos en menos de lo esperado. Liam está en la sala de espera sentado con sus brazos apoyados en sus rodillas sosteniendo su cabeza. Ni bien Niall lo ve se le acerca de prisa y yo voy detrás de él. Liam levanta la mirada y sus ojos mostraban preocupación. Nadie conoce a Liam mas que yo y se muy bien que es una persona muy sensible, sobretodo en estos momentos de tención. 

-Mi mamá... ¿dónde está ella? -pregunta Niall angustiado. 

-Ella está en la sala de operaciones -dice Liam-, está ahí desde ya hace un buen rato. Solo nos cuesta esperar aquí... 

Me siento al lado de Liam y Niall se apoya en la pared. 

-¿Cómo pasó todo esto? -pregunta Niall sin dirigir la mirada. 

-No sé mucho. Yo estaba en la casa cuando me llamaron y me avisaron que ella había sido víctima de un asalto a mano armada. Ella... Ella trató de escapar, y al hacerlo cruzó la pista y, en medio de esta, un carro fue a toda velocidad y la atropelló. Según el doctor tiene serias lesiones en los tobillos y en la pierna derecha -Liam respira -... Tambien tuvo una complicación en el corazón. 

Niall respira profundo y mira arriba. Yo no sé qué decir. ¿Debo apoyarlo, darle mi hombro y prometerle que todo está bien? La repuesta es no. Yo he pasado por esto y se que él también, ambos sabemos lo que va a pasar.  

El doctor llega y confirma lo que se teme. Es... Es como en las películas; todo en silencio, el chico rompe en llanto, su amigo trata de consolarlo, y yo... yo observo. Creo que al final de todo esto aprendí que no me quedan más lágrimas de tristeza, espero esto no sea reflejado en mi felicidad. 

Niall decide quedarse y Liam insiste. Al final, lo dejamos con su madre. En el camino no se dice nada. Llegamos a casa y Liam arrepentido dice: 

-No debimos haberlo dejado.. 

-Es su problema -subo las escaleras. 

-No seas tan fría, ponte en su lugar... 

-¿Crees que no he pasado por eso? Tal vez tú no, pero yo sí. Yo estaba ahí cuando los mataron ante mis ojos. No pude hacer nada... Solo gritaba y lloraba -trago saliva y siento mis ojos húmedos, los seco y continúo -... ¿Y sabes qué aprendí? Aprendí que llorar no me sirve de nada, ellos jamás van a volver -termino de subir.

La vida es como un jugador astuto, al comienzo te deja ganar, te confías y bajas la guardia, al final él gana.