Capítulo Uno: Número Uno

16 1 2
                                    

Hola, soy Armin y les vngo a contar mi triste historia 😰😰😰😰

En nuestra casa somos mis padres, Victoria y Arnold, junto a mi hermano gemelo Alexy.

Alexy es omega y para sopresa de nadie, yo también lo soy. Lo descubrimos en un chequeo médico porque a mi hermano le sangeaba la cola cuando entramos a la pubertad y pensamos que se le había explotado algo dentro de las nalgas.
Y nosotros obviamente no sabíamos 😧😧😧

Ahora sí, ya que les puse en contexto
Pasemos con la triste historia.

El peliteñido de mi hermano me levantó de la forma más amable posible como cualquier hermano haría, tirándome agua helada de forma cariñosa.

Me desperté delicadamente para alzar la voz y decirle con todo el amor del mundo.

—¡¿PERO QUE TE PASA, DESGRACIADO?!

—¡ME BAJAS CINCO RAYITAS A TU VOLUMEN! Que nuestros padres andan descansando y tú prometiste acompañarme a comprar ropa antes d e pasarnos a nuestro nuevo instituto.

—¿Eh? Espera, espera ¿yo cuando dije eso?

—Ayer

—¿Ayer cuando?

—Cuando jugabas Lol

—Mentira, me niego a creer eso

—Sabía que dirías eso.

Mi hermano sacó su teléfono donde tenía grabado el momento exacto donde me decía para ir de compras y como andaba distraído simplemente terminé aceptando.

—¡No es justo, me tomaste la guardia baja!

—Lo prometiste, ya nos vamos.

Entonces hice lo que todo buen protagonista de historia haría.
Fui a mi armario y me puse lo primer que encontré 🥺
La ropa de ayer que había puesto encima, aún olía a limpio así que serviría.

Me fui rápido a cepillar los dientes y lavar la cara, no tenía tiempo para más porque mi hermano andaba de "¿Ya estás?" "¿cuándo nos vamos?"
Cada cinco minutos

—¿Y mi consola?

—Mi consola ni nada, te la daré cuando acabemos de comprar.

Y así de rápido, salimos por la puerta hacia el centro comercial.
Sin embargo, ya tenía un plan para evadir comprar ropa.

Tomamos el autobús para ir al centro y llegamos en unos 15 minutos.

Una vez allí, el cabeza de fluidos de pitufo que es mi hermano me llevó a la tienda de ropa.
Pero ojo, yo tenía un plan, no se olviden del plan que es un plan muy planeado de los planes y los planetas.

Pasito a pasito, suave suavecito fuimos a las tiendas de ropa chequeando la calidad, marca, precio y si se veían mejor las rayas verticales u horizontales a mi hermano o si ese tono de naranja combinaba con ese tono de morado.

El paraíso de Alex y la tortura de Armin.

Cuando íbamos a entrar a la tercera tienda, me detuve firmemente, miré a mi hermano directamente a los ojos y con la voz más franca que pude hacer le dije...

—Webos, mientras tú vas a mirar yo me voy al McDonals que no me dejaste ni comer uan tostada con mermelada porque tengo hambre.

—Ya pero luego regresas que igual tengo que probarte a ti la ropa y encima tengo tu consola.

Ni modo, tomé rumbo hacia las escaleras mecánicas hacia el patio de comidas, la cola estaba larguísima con 3 personas delante mío.

Pasamos unos agotadores 26 minutos hasta que llegué a la caja pero justamente el chico que atendía se fue dentro de la cocina antes de tomar mi orden.
*rabia ha entrado al chat*

Aunque valió la pena porque justo que se fue ese chico llegó la chica más hermosa que había visto.

Sus ojos con pestañas alargadas, su cabello sedoso, sus labios y además olía a papitas. Era la chica de mis sueños.

Sus orbes verdes cual jade cruzaron con mis orbes azulados como el mar azul con un toque de brillantina antes de que su dulce y melodiosa voz me diera las palabras que iniciarían todo.

—Bienvenido a McDonald ¿qué puedo ofrecerte hoy?

Mordí mi labio mientras colocaba uno de mis mechones de cabello tras mi oreja, desviando la mirada totalmente sonrojado y mi corazón latiendo como si tuviera una taquicardia en ese mismo instante.

Me quedó mirando fijamente, mi rostro ardía cual mil soles.

—Mm disculpe ¿Qué puedo ofrecerle?

—Ah sí, me da una de queso doble, una soda grande y unas papas.

—¿Desea grandar su pedido por 5 pesitos extra?

—Nah, gracias... Por cierto eeeh.... *lee el nombre de su cosito en el mandil* Sucreta-

—Es Sucrette

—Sucretta ¿juegas Minecraft? Porque podríamos ir a minar diamantes juntos.

La chica simplemente imprimió mi recibo en silencio sin dejar de mirarme.

—Su pedido estará listo en unos 20 minutos. Lo llamaremos.

Recibí la boleta antes de tomar asiento intentando quedarme cerca para poder verla y también por si llamaban mi nombre.

Luego llegó Alexy, fui a recoger mi pedido y comimos

FIN... De la primera parte [*música de suspenso*]

Mi alpha trabaja en McDonald (Armin omega x Sucrette alpha) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora