Heart to Heart [Sproier🌻]

Capitulo 11

23 de febrero de 202@

Ha pasado un mes desde que vomité una pequeña cantidad de sangre, ir al doctor fue una idea estupenda hasta escuchar el diagnóstico.

-Señor Roier con los análisis y la reciente endoscopia emos encontrado laceraciones en las paredes de su estómago lo cual provoca el vomito de pequeñas cantidades de sangre.- mencionaba mientras se me quedaba viendo fijamente.- esto es peligroso si no sigue un tratamiento adecuado.- pausó el doctor dándose una vuelta en su silla para buscar unos papeles.— también debido al constante consumo de pastillas, hemos detectado cirrosis hepatica, lo cual afecta más, podría desarrollar úlceras estomacales que solo podrán ser ligadas con un tratamiento quirúrgico cada 6 meses.— me entregó en mis manos todos mis documentos y análisis.- señor Roier esto no tiene cura.- su mirada ahora era una mirada triste.

-.¿Entonces me voy a morir?.— la pregunta causaba estragos en mi, morir no era algo que quisiera hacer ahora.

-.Claro que si señor roier.— su mirada ahora parecía no tener una alma proyectándose, trague saliva ante esas palabras que por un momento me dejaron helado, cuando de pronto la risa del doctor me asusto aún más.— en algún momento, pero si sigue con el tratamiento podrás vivir una vida tranquila.-me dedico una sonrisa cálida que me alivió un poco.- ahora debe ir con los especialistas y con un nutriólogo que le asignará una dieta para su condición, por mi parte es todo.— mencionó extendiendo su mano para despedirse.

Esa consulta me dejaba un poco mareado con mi situación, ahora tendría que cuidarme de no comer las cosas ricas por la estricta dieta, igual comer de vez en cuando  cosas chatarra tampoco me arruinaría la vida, pero sin duda esto me desalentaba mucho, a pesar de cuidarme el uso de pastillas cuando mis padres se fueron de mi lado estaba marcando sus heridas, pero eso sería lo de menos para mi, el hecho de no poder ir al hospital desde aquella fiesta de navidad me estaba enloqueciendo, no quería encontrarme con Spreen, no sabría cual sería su reacción después de todo salí corriendo después del beso.

Mi celular sonaba cada mañana 4 veces antes de que dejara de insistir con llamarme, no quería hablar con el, al menos no hasta aclarar mis sentimiento, sin embargo fueron solo 2 llamadas antes de ceder a que no le contestaría, raro pues siempre eran 4.

Pensando en idioteces golpes en la puerta me sacaron de mi cabeza, levantándome del susto, no estaba en condiciones de recibir visitas, me encontraba aun en pijama, a demás quien podría ser en un día tan lluvioso como el de hoy.

Abrir la puerta fue una de las malas ideas que tenemos de que afuera nos espera un príncipe o princesa azul para seguir con el cuento, pero en esta ocasión solo fue el chico de los ojos lilas

-.Spreen pendejo me asustaste.— mencioné sin saber el por qué, me había asustado encontrarme con el o que supiera mi dirección que nunca le proporcione.

-. Roier pelotudo donde estabas metido, he ido todo los santos días al hospital hijo de la san puta.— el chico de ojos lilas me recriminaba mientras yo retrocedía, no quería huir sería muy cobarde a demás de que estaba en mi apartamento.— te estuve buscando como subnormal por todas partes para que estuvieras aquí, es que yo no me lo puedo creer boludo.— me parecía tan tierno su forma de quejarse, que no me hubiera encontrado antes era su culpa por no preguntarme... bueno también era mi culpa por no contestarle.— llevas un mes sin comunicarte con nadie, ni con Aldo y con el Mariana.— pronto fui sentado en mi sofá mientras un gesto de molestia estaba dibujado en mi acompañante.

-. Ya pendejo solo quería descansar.- voltear el rostro para un lado fue una mala idea ya que el azabache me tomó de la barbilla apretando mis mejillas con sus filosas uñas que parecían casi garras.

-Escúchame bien hijo de puta, no volvas a irte así de la nada de mi lado o te voy a cortar la pija.— amenazo sin soltarme y acercándose a mi, su rostro de nuevo a centímetros del mío hizo que cerrara los ojos y formara mis labios en un corazón esperando los suyos, pero a cambio una mano sobre mis labios me hizo abrir los ojos.— ya basta.— su mirada desviada y sus mejillas enrojecidas eran gestos bastante lindos.

Fue una linda noche al lado de spreen después de pasar por aquella pelea, el se quedó toda la noche a mi lado, realmente me había enamorado del el ya que todo a su alrededor me parecía cálido incluso estar apoyado de hombro a hombro en el sofá parecía una película.

-Spreen te quiero.- susurre antes de caer en un profundo sueño.

-. Igual te quiero Roier.—

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Awww roier no te mueras míen
Gracias por esperarme, de verdad que estoy súper feliz de que les guste la historia, cada día me motivan con sus comentarios y sus estrellitas los quiero ♥️