Cap. 5: Recuerdos.

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                    ~Anteriormente~
-Está bien, pero esto no lo debe saber nadie _____, nadie. -Tragué saliva. Creo que esto iba a estar fuerte-.

"-Desde el momento en el que naciste, yo estuve a tu lado. Todos los días de tu vida he estado contigo -Sonrió, comenzando a narrar-. Cuando naciste, te veías tan hermosa. Una adorable bebé. Tu cabello tan fino y delgadito. Tus ojos marrón obscuro y enormes. Eras una cosa perfecta ______. Desde ese momento supe que yo cambiaría tu vida. Tus primeros años fueron fenomenales, sabes?, cuando eras pequeñas podías verme. Me encantaba jugar contigo y tú conmigo claro. Siempre que ibas a dormir te decía que dijeras las oraciones que debías hacer antes de ir a acostarte. Una niña tan pequeña y obediente, tus padres estaban orgullosos de ti. Pero todo cambió después su accidente, dejaste de orar, de verme, de jugar.
Fuiste creciendo, aprendiendo muchas cosas más, te cerraste al don de amar _____. El preciado don que te había concedido de pequeña. Tuviste nuevos amigos y amigas, malas y buenas experiencias. Y yo tenía tantos celos, ellos podían hablarte, tocarte, salir, platicar. ¿Y yo? Sólo era un ángel sin saber que hacer. Un día no aguanté más y rompí las reglas _____. Fuese lo que fuese, ningún ángel podía involucrarse con su protegido nunca. Su único trabajo era tenerlos a salvo y nada más. Y sólo hice lo contrario, me involucré contigo, me dejabas entre el filo de la espada y la pared, ¿Y qué podía hacer? Seguir lo que mi corazón mandaba. Una noche cuando estabas por dormirte, te hablé y fué en ese momento en el que perdí la cabeza. Mi cuerpo pudo tomar forma y cuando te volviste hacia mi te sorprendiste tanto que gritaste. Te tapé la boca y te pregunté si tu me recordabas, vagamente lo hiciste y asentiste. Te dije que ya no aguantaba más y comencé a besarte desesperadamente, tu... ¿Lo sentiste? Esa conexión que hubo en ese momento, y ya te imaginarás lo que pasó entre los dos esa noche, esa hermosa noche de pasión. Hicimos el amor _____. Rompí todas y cada una de las reglas, y trato de que no estés en peligro ya que, quieren matarte. Contra la palabra de Dios nadie puede. Y yo rompí por completo sus reglas. Cometí un pecado, pero para mí no lo es.
Lucharé hasta lo imposible por éste pequeño que viene dentro de ti ____, no dejare que le hagan daño. Pueden llevarme a mi, pero a ti y a él jamás."

-¿Pero quién haría semejante cosa? -Estaba paralizada-.

-Solo puedo decirte que contra la palabra de Dios nadie puede.. -Miró unos instantes hacia el vacío, que consumía sus ojos completamente. Volviéndose oscuros por completo-.

-¿Justin? -Pregunté visualizando el cambio repentino de sus hermosos ojos color miel a un color muy oscuro. Noté como cerraba fuertemente sus puños-. ¿Qué pasa?

-¡Maldición! -Susurró- tenemos que salir de aquí ahora mismo _____. -Se puso de pie bruscamente y miró a través de un pequeño espacio-. Pase lo que pase, no grites.

-Estaba confundida, ¿Por qué he de gritar?. El volvió a cerrar la puerta y se puso del lado izquierdo-.

Repentinamente se abrió la puerta despacio y asomando su cabeza, un chico preguntó por mi nombre.
-¿_____ García? -Arqueó una ceja esperando mi respuesta-.

Sí, soy yo -Él sonrió y entró sin darse cuenta aún que Justin estaba detrás de él. Caminó hasta mí y llevó su mano hacia atrás, sacando de ahí una pistola. Abrí los ojos como platos. Y pronto recordé lo que Justin había dicho: "Pase lo que pase, no grites. ". Me mordí la lengua y cerré los ojos de golpe. Esto no había siquiera empezado y todo estaba por terminar para mí.

-Lástima, eras una belleza, ahora sé por que mi querido amiguito Justin se involucró contigo -Rió burlonamente, abrí los ojos y de pronto Justin se interpuso entre el chico con el arma y yo-.

-Vamos Ben, dispara. -Justin se acercó más a él, haciendo que el arma quedara directamente en su corazón- termina tu trabajo ahora que puedes. ¡Hazlo! -Él solo volvió a reír y lo miró-.

-Claro que lo terminaré, pero no es a ti a quien vengo a matar. Debo terminar con ella y lo sabes. Pero no te preocupes, tú después tendrás tu lugar en el maldito infierno, imbécil.

Justin dio un golpe demasiado rápido que hizo que el arma cayera a unos dos metros de ahí.
Comenzaron a pelear bruscamente, y lo impresionante era que los golpes eran estruendosos, pero al parecer nadie más en esa habitación podían escucharlos. Ben lo golpeaba con tal fuerza que quería gritar, quería hacerlo, pero no. Debía obedecer a Justin.
Tenía ganas de pararme de esa maldita cama y ayudarlo, pero sabía que no podría. Yo era solo una simple y sencilla humana. Aterrada, cerré los ojos fuertemente y de pronto dejaron de escucharse aquellos estruendosos golpes.
Sentí como me tomaban el brazos, en eso abrí los ojos.

-Justin, ¿Qué haces? -Pregunté. Mirando detrás de él, donde se había producido esa pequeña pelea. Pero ya no estaba Ben-.

-Hay que irnos de aquí -Antes de que me cargara se quitó la playera. ¡Vaya! Para ser ángel no estaba tan descuidado. De pronto recordé que podía leerme lanmente y me sonrojé- Ven aquí -Me cargó en brazos y nos dirigimos al borde de la ventana-.

-Espera. ¿Dónde está Ben? -Él me miró serio-.

-Cuando matas a un ángel, si es que tiene formado su cuerpo completamente, puedes desintegrarlo fácilmente y así, si él tiene una misión demasiado importante, podría volver a su cuerpo original, pero ganaría fuerza -Me explicaba, pero yo solo estaba tratando de entenderlo- No es difícil, ahora solo agárrate fuerte de mí y cierra los ojos. -Asentí e hice lo que me pidió. De pronto sentí como caíamos a la superficie y solo me sujete más a el.
De pronto, se escucha un gran aleteo detrás de nosotros. Abrí solo un poco el ojo derecho y ahí estaban, dos enormes alas blancas que salían de su perfecta espalda dorada.

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Algo largoooo, Jiji, las loveo

Embarazada de mi ángel. |Justin Bieber. (S-hot).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora