El Diario De Un Hendrix

Capítulo 47 (Day 7)

Isabella

No se cuanto a pasado, verdaderamente no me interesa, aunque todo se siente en el aire. La sensación de tener la mano de Sandra en la mía justo antes de morir no se va desde su partida. Una extraña sensación de cosquilleo que quema me envuelve. Sé que estamos entrando a Diciembre, también sé que estaba perdida en las fechas desde la última vez que escribí, los días los sentí como si fueran semanas y por un instante creí que había sido mi cumpleaños y no lo recordé, después de meses, que en realidad fueron semanas, vi la fecha y mi celular, 3 de Diciembre.

Estoy sentada en la sala de frente a Arianna, Instagram esta repleto de cosas atrasadas que me perdí, una de esas y la que más me importa, el tour de Loduvico Einaudi por Milano. Con lo que amo a este señor, y no ir a su tour que está a menos de 20 minutos de mi? Sería un pecado. Me levanto con rapidez y me dirijo a la computadora para entrar a mi cuenta bancaria, intacta. Camino despacio y tranquila hacia las escaleras desde donde le hago un gesto a Arianna para que suba, después de un par de intentos lo capta y termino de subir cuando la oigo caminar hacia mi.

Arianna- ¿Que pasa?- Pregunta con una ligera sonrisa cuando nota mi cara de complicidad.

Isabella- Vamos a ir a un concierto, bueno a varios- Respondo con emoción, siento chispas ante la oportunidad de ver a uno de mis artistas favoritos en vivo.

Arianna- ¿Que?- Pregunta extrañada de inmediato.

Isabella- Ludovico Einaudi está a menos de 20 minutos caminando de aquí en el Teatro dal Verme en una serie de conciertos durante 18 días...- Explico sintiendo un pequeño vacío por la misma emoción que crece.

Arianna- No has hablado con mamá, no has apartado las entradas, tienes dinero para esas entradas?- Dice cuando nota que di por echo muchas cosas importantes.

Isabella- Meg nos dejará ir, inclusive ella podría venir, el dinero no me preocupa, tampoco iré todos los días que faltan, ya vi el itinerario y por lo menos al día 12 tengo que ir, tocan Experience Ari, en vivo. Es Einaudi, no es poca cosa, sabes que no puedo ir sola- Digo tratando de calmarla a ella y a mi.

Arianna- Por mi sabes que voy, pero habla con mamá y avísame cuanto tengo que pagar- Responde mirándome antes de bajar y yo ir detrás.

Estaba nerviosa, llevaba mucho sin sentir una emoción tan grande sobre algo en general, tengo que hablar con Meg y la reúno en el comedor con la página oficial, el itinerario, las preventas y la dirección del lugar, aunque se que conoce el teatro. Le doy la misma explicación que a Arianna, que presta atención desde la distancia, no está convecida del todo y sin embargo acepta. Al final iremos solo 3 días, el 7, el 8 y el 12, las primeras dos canciones me llamaron mucho la atención y la última es mi pieza favorita de este artista. Estoy feliz, emocionada, nerviosa, muchas cosas, demasiado intensas podría decir, pero definitivamente las extrañaba. No puedo esperar y aunque no se si mañana estaré viva, lo intentaré.

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Son las 8 de la mañana, apenas. Eh estado nerviosa desde anoche por que hoy a las 20:45 p.m. exactamente comienza el primero de los conciertos al que vamos a ir Ari y yo. Día 7 con Low Mist, Seven Days Walking, pieza 7. Investigando y adentrándome más en este tour, los 18 días se basan en una perfecta conjugación de piezas del artista con otros artistas. El día 8, osea mañana, está Elements la primera y principal pieza del álbum Elements. El día 12 toca la mejor de todas, Experience, pieza número 10 del álbum In A Time Lapse. Una obra maravillosa que no puedo esperar por ver.

Al cabo de unas horas después del almuerzo, comencé a alistarme. Se siente extraño entrar al cuarto de Jacob por mi ropa de salir, llevo meses sin hacer esto, estoy segura de que si han sido meses. Abro el primer cajón del mueble a un costado de la pared, hay pantalones desde el color negro hasta el azul, pasando por gris, beige y blanco. Puedo apostar que muchos de ellos ya nisiquiera me quedan, y hay otros que nisiquiera eh estrenado, así que hoy será diferente en todos los sentidos. Llevo mucho tiempo en el suelo de mi mente, es momento de levantarme. Dentro del segundo cajón aparecen muchos colores ante mi, y podría apostar que si no fuera por la luz opaca de la habitación, un brillo diferente salió del cajón. Rebuscado entre las blusas y camisetas llegó al fondo, donde por alguna razón que desconozco, un par de blusas de mi madre relucen con aire de antaño y rencor. Una de ellas manga cuarta color verde musgo con hojas de palmera, muy al estilo playero formal para ella hasta que el recuerdo doloroso de una fotografía colgada en una de las paredes de la casa de tía Vero me azota fuertemente. La noche del Baile, como solía llamarle, a una vieja fotografía de Sandra, Alarick, Rafael y Marie en una costa que ahora reconozco como Cinque Terre, en medio de un bar restaurante con luces calidas en amarillo y felicidad en el ambiente dentro del marco color oscuro. La suelto al instante cuando el perfume de ella me llega de otro golpe justo en la cara y se presenta de un color amarillo fuerte con flores azules y verdes claro de la otra blusa. Un escalofrío recorre mi espalda, un destello de la última fiesta a la que fuimos como familia llegó y termino tomado una camisa negra, manga larga y cuello de tortuga para poder cerrar de un golpe la gaveta. Tomo el pantalón de traje beige y los tacones negros de encima del mueble y me los coloco, saco la gabardina azul del armario junto al collar que Alarick alguna vez me mandó con una pequeña luna que resultó en juego con el anillo que Arianna me dio hace un tiempo. Dejo mi cabello al aire y que caiga libre por mis hombros, mi maquillaje se basa en un delineado simple con lápiz de ojos en la línea de agua y encrespador, me agacho para mirarme en el espejo y por primera en mucho tiempo me gusta lo que veo. Tomo mis gafas y por fin salgo del cuarto, me coloco unos aretes largos en negro mientas bajo las escaleras y me topo con Meg, Robert y Jacob.