En el vistazo tímido al abismo,
Empujado por el pulcro instinto.
Vi un rostro confuso como laberinto,
Desde el evento, no fui el mismo.Poseedor de todo saber,
Eso y su ojo infinito,
Tan tentador que me dejo caer,
Y lo que adiera de ti es maldito.Veo tanto y a la vez soy tan ciego,
Culpo al mundo que me hizo tan necio,
No quiero tal antiguo vestigio.
Pues para verte en cada sitio,
Herramienta tan primitiva no necesito.Esos... ojos, inquietantes y mezquinos.
Tan profundos que olvido el corpóreo.
Todo lo que huela a verdad lo esquivo,
La mentira más bonita la guardo en óleoPues quiero, quiero creer.
Quiero imaginar y sostener.
Que el sueño sea real,
Para no dormir nunca más.
ESTÁS LEYENDO
Cuentos que escribo con la mano izquierda
De TodoUna recopilacion de cuentos que voy creando de variados géneros: ciencia ficción, fantasía, terror, realismo, etc. En su mayoría, transcurren en Kalemia, La ciudad del Infortunio.