🥀 Capítulo 24: Culpa

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Una vez adentro empecé a ducharme, había sudado mucho gracias al entrenamiento que me había dado Donghae.

Escuché la puerta abrirse y antes de que pueda girarme ya tenía un cuerpo bien trabajado abrazándome, impidiendo que me mueva.

"Mierda no quiero morir en un baño y encima desnuda"

-Así que me falta aguante- la voz ronca de Donghae resonó por la ducha y me calmé -pasó un tiempo desde que probé el tuyo, ahora no sería mala idea probarlo.

Puso su antebrazo sobre mis hombros y me empujó hacia adelante pegándome a la pared. Con la mano libre empujó mis caderas hacia atrás y con su pierna dio ligeros golpes haciendo que separe las mías.

Abrió el grifo y empezó a caer el agua sobre los dos.

-Agradece que lo abrí para que no se escuchen tus gritos.

Sin decir nada más introdujo su gran y duro miembro en mi interior. Internamente agradecí al agua que caía porque ayudó a que entre más fácil.

Un grito se escapó de mis labios al sentirlo dentro, en seguida comenzaron jadeos y gritos de mi parte por la fuerza y velocidad de sus embestidas. Eran fuertes y constantes, solo se escuchaban gruñidos de su parte. Mis piernas empezaron a temblar y amenazaban con dejarme caer en cualquier momento.

-Estas demasiado... Apretada- dijo entre gruñidos.

Ya estaba llegando al climax cuando Donghae bajó la mano hacia mi punto más sensible y empezó a jugar con él haciendo que se acelere mi orgasmo.

Mi interior comenzó a cosquillear alrededor del miembro duro de Donghae que no dejaba de entrar y salir con fuerza, hasta que sentí como me venia.

-Mierda- solté antes de venirme, escuche una risa detrás mío.

-Ahora me toca a mi- con su mano derecha levantó mi pierna dejando que quede colgada de su brazo y continuó con sus embestidas.

Sorprendentemente su fuerza aumentó mas. Con mis brazos intente mantener la distancia con la pared, pero fallaron inútilmente.

El sonido de nuestros cuerpos chocando con mis gemidos daban más que entender lo que estaba pasando en la ducha.

Donghae sólo gruñía a mis espaldas. No decía nada.

Después de un par de embestidas más hablo.

-Solo.. Un poco..- mi útero se contrajo ante él por segunda vez y sus embestidas cesaron -genial... Simplemente... Genial- jadeo cerca de mi oído mientras empezaba a moverse lentamente sacando lo último de él.

Me bajó la pierna y reforzó su agarre en la cintura para que no me caiga. Se giró con mi espalda aún pegada a su pecho y se sentó, dejándome en su regazo.

-Eres perfecta Moon- me dejó un suave y cuidadoso beso en el hombro.

Su abrazo por mi cintura se hizo más fuerte. Tiré mi cabeza hacia atrás para que descanse en su hombro y llevé mi mano a su cabeza, y con movimientos perezosos acaricié su cabello mojado.

El agua cayó sobre nosotros un ratito más hasta que él decidió que era hora de levantarnos y terminar de bañarnos.

"No te enamores y menos de él" me repetía una y otra vez en mi mente "solo es sexo para mi", seguía repitiéndome.

-Espérame acá que ya vuelvo- dejó un beso en mi frente y cerró la puerta de su camioneta roja.

Cassy ya esta reparada o en su mayoría. Donghae se fue y mi celular sonó.

-Si, Heechul- respondí.

-Ya se fue.- me informó -¿lo encontraste?

-Si, es más, él me encontró a mí.

-Eso es bueno, cuando llegue Siwon ya se encargará.

-¿Cuando vuelve? ¿No dijo nada?

-No te impacientes mocosa.- dijo con voz grave -si no te dijo a ti menos a mí, como sea, fíjate que el viejo no se despegue de tu vista.- vi como Donghae se acercaba al lado del conductor y entraba.

-Si, lo se. Voy a entretenerlo de la mejor manera- sonreí.

-¿A quién vas a entretener?- preguntó curioso mientras encendía la camioneta.

-Después paso- colgué antes de que Heechul pudiera decirme algo -a la bestia que tengo por novio.

-¿Bestia? Yo pensé que era tu conejito- hizo puchero.

-Yo también lo pensé, pero después de hoy ya no.

Soltó una carcajada y comenzó a conducir.

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-¿No quieres quedarte un rato más conmigo?- me agarró de la cintura y me atrajo hacia él.

-No, tengo cosas que hacer- traté de separarlo.

-Un ratito aunque sea ¿si?

-Tengo que ir a la oficina de oppa- me solté el agarre y abrí la puerta de mi departamento.

Donghae me siguió hasta mi habitación y comencé a cambiarme.

-¿Por qué?

-Oppa se fue de viaje y yo tengo que cuidar del negocio por un tiempo- respondí a la vez que me colocaba una camiseta blanca.

-Ya veo- se sentó en la esquina de la cama -¿y tu trabajo?

Su pregunta me dejó pensando a medio cambio de pantalón.

-Hoy no trabajo- traté de sonar tranquila.

-Ahhh... Ahora que lo pienso ¿en donde trabajas?- y ahí empezaron las preguntas.. de nuevo.

-Ya te dije que no tengo uno fijo- me abroché el pantalón y fui a sacar mi camisa favorita.

-Algún día llévame a algunos de tus trabajos no fijos- dijo para después sonreír.

-Si, algún día- respondí seriamente mientras iba a la puerta.

Ya llegando a la puerta de salida pasa sus brazos por mi cintura y susurra en mi oído.

-Moon no seas fría conmigo, solo quiero conocerte más.

En ese momento la culpa me atravesó, algo que no sabia que existía en mí. Nunca antes sentí culpa y menos cuando me encargue de aquel tipo que lloraba por sus hijos. Tenía que irme antes de que conozca mas esa sensación.

El Juego de la Mafia | DongHaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora