Todos En Paz

536 26 3
                                    

Había pasado ya casi 2 semanas desde el incidente se Daniel y Armando.

Este ya había regresado a sus labores en ecomoda, pensó varias veces en disculparse con Marcela por no ser el hombre que ella soñó, solo que no había buscado el momento para disculparse

Armando es un hombre muy feliz junto a betty, Mario es su amigo incondicional y aún que este tenga contacto con su mayor rival sabe que puede confiar en el plenamente

Mario hablaba con Marcela de vez en cuando y Daniel siempre estaba al pendiente de ella, aveces le mandaba la comida o la llevaba a cenar

Betty se quedaba a dormir todos los días con Armando, prácticamente ya casi vivían juntos, había ligeros roces con doña julia y don hermes pero siempre se arreglaba

Armando y betty estaban en la oficina, casi no había trabajo y estaban en el sofá platicando pero la situación fue subiendo de tono

Pov betty..

Armando cada vez se acercaba más a mi, al punto de sentir sus respiraciones sobre mis labios, el deseaba un beso y jugueteaba con lo que tanto deseaba

Nuestros labios se encontraron en un beso con sabor a miel, fue un beso profundo y largo, pude sentir su lengua recorriendo mi boca

Sus enormes manos se posaron sobre mis muslos, subiendo y bajando generando ahi una fricción placentera, el se reclino más sobre mi, en ningún momento dejó de besarme

Ambos queríamos más, coloque mis manos sobre su pecho para despojarlo de ese saco que ya resultaba estorboso, para luego ayudarlo a quitarse esa corbata color negro, lo ayude a desabotonar un par de botones de su camisa pero mis manos se dirigieron a su parte baja

Estaba desesperada, queria probarlo ya, mis manos se posaron en su cinturón.. El me ayudó a quitárselo para luego bajarse los pantalones

Se sento en el sofá, su ereccion era visible pues sobresalía de sus boxers, su enorme miembro se marcaba ahí, el se quito el bóxer desesperadamente

Me levante y me subí sobre el, abri las piernas.. Y me las acomode a cada lado de él, su pene rosaba mi entrada, puse ambas manos sobre su cuello, y me tomé un tiempo para acariciarlo, entrelase mis manos alrededor de su cuello, nuestros labios al fin se tocaron

Sus besos eran húmedos, mojados, muy ricos para ambos, simplemente era la gloria, podía acabar solo con sus besos, el me quito la prenda que cubría mis senos

Dejándolos a la vista, el se los llevó a la boca sin pensarlo, su movimientos me fasinaban sentir su lengua mojada por esa zona me hacía gemir con tanta facilidad, intente morderme los labios para no hacer ruido, pero me beso para evitarlo

-No te calles -

Sus deseos eran órdenes, continuamos asi unos momentos más hasta que Armando me dijo con una voz ronca y varonil

-Puedo sentirte muy mojada ¿Puedo tomarte ya?-

Mierda, su voz se oía tan jodidamente sexy, yo ya estaba mojada desde el momento en que me beso, supongo que ya era hora de ser penetrada, solo asentí, sus labios estaban rojos, no me imagino como estaré yo, entre el labial y las mordidas.

Armando y yo nos levantamos del sofá, estábamos de pie el me tomó de la cintura y espalda.. Me acerco más a su cuerpo su pene estaba rozando mi entrada al mismo tiempo que me besaba el se movía más, mis piernas temblaban demasiado.

No se cuando pasó pero el me tenía sobre el escritorio, con una pierna arriba y otra abajo, comenzó a estimularme, se llevó los dedos a la boca para luego pasearlos por mí entrada, sus dedos se movían en círculos

 T E N S I O NDonde viven las historias. Descúbrelo ahora