La Protegida [Proxys y tú]

Vol II □▪︎■▪︎□Capítulo 32■▪︎□▪︎■

Era otro día, y Liam estaba viendo sus hojas de papel y sus cuadernos que tenían apuntes sobre su madre, su mamá y sus papás. Quería saber más a fondo el por qué se mataban entre ellos. Se sentía mal por ver todo lo que ocurría, quería estar con todos sus padres, y ahora le faltaba uno.

Vio la hora, faltaba aún para que su madre regresará de a donde sea que fue, dió un grito cuando sintió que se le durmió la mano, tenía hambre, así que fue al refrigerador, saco algunas cosas y se hizo un pan con mermelada. Vio hacía un cuadro que estaba en la sala y por unos momentos su vista se nublo y apenas podía enfocar lo que veía, todo estaba borroso. Pestañeo rápidamente varias veces para poder volver a enfocar, le ardían mucho los ojos, era como si se hubiera metido los dedos a propósito y le dolía demasiado. Se puso a llorar porque le dolía mucho, así que camino al sofá y se sentó para poner sus manos sobre sus ojos y espero a que se le pasará el dolor.

Luego de un rato el dolor paso y termino su pan mientras tenía lágrimas cayendo de sus ojos. Tomo aire y lo soltó para calmarse.

Camino al cuarto de su madre y busco entre sus cajones algún dulce que debería tener, pero solo encontró una caja, la tomo y se la llevó a su habitación para abrirla. Abrió está y tenía dos micrófonos, quería guardarlos, no sabía para que le podrían servir, pero los quería. Metió las cosas dentro de la caja, puso sus hojas y apuntes en otra caja y la guardo en su lugar secreto, saco el diario de su mamá y siguió leyendo las cosas que le faltaban, y así podría saber más del tema.

Mientras tanto por otro lado, la antagonista estaba caminando por todo el bosque buscando a quien debía, busco y busco y le era difícil encontrarle, pero escucho unos pasos y voces, así que subió a un árbol y guardo silencio para saber qué y quiénes eran los que se acercaban. Vio que eras tú junto a Toby. Un fuerte dolor en el pecho, latidos fuertes, ganas de gritar y matar a toda persona que se acerque, un tipo de celor que eran difíciles de controlar, quería saltar del árbol a donde estabas tú y estrellarte la cara contra el piso todas las veces que pudiera, quería matarte de una buena vez, ya estaba arta de que toda la atención se fuera hacia ti, que todos quieran estar a tu lado, que todos te amén a ti, y la odien a ella. Respiro y respiro lo más que puedo para calmarse, no quería armar ningún escándalo, quería guardar la calma, necesitaba hacerlo. Siguió observando, su corazón, o lo que sea que tenga en vez de corazón, se estaba rompiendo cada vez más. Desapareció de la nada y apareció en un hotel que hace años quemó, el lugar donde se presentó a ti, no se había teletransportado sabiendo lo que haría, solo apareció en una habitación aleatoria, pronto escucho varios susurros venir de afuera, eran unos policías. Entro en modo ilusión y salió de la habitación como si nada para poder oír más de cerca.

— La mujer no aparece, no tengo idea de que hacer.

- Por la- odio esto, se supone que fuimos contratados para encontrarla y no hemos visto ni un solo rastro, esto me empieza a estresar, ella debe aparecer si o si. Más de un mes desaparecida...

— Si usted y yo junto al equipo seguinos buscando, verá que la encontraremos.

Ambos policías se quedaron en silencio un momento hasta que empezaron a murmurar.

— ¿Usted está sugiriendo que la chica pudo haber sido raptada por su ex o como dicen.. los 3 ex's que tenía?

- Exacto, ¿Qué más podría ser?

— .... Bien...

Salieron del lugar y siguieron hablando de camino. Ella supuso que ya empezaban las investigaciones para encontrarte, así que era mejor para ella que te fueras y así los Proxies quedarían solos, y estará ella a su lado siempre que pueda. Regreso al bosque y camino para llegar caminando a casa, si bien se pudo haber teletransportado, quería caminar un rato. Quería buscar su siguiente víctima.

En lo denso del bosque estaba el Proxie traidor afilando un cuchillo y cargando su arma, se colocaba los guantes y esperaba a que fuera de noche, quería seguir con su matanza, terminar con los hijos de puta que le impedían ser el mejor a los ojos de su amada, quería ser el único, el mejor, solo quería ser él y tú. Y si fuera necesario mataría a su hijo para que tu atención sea solo y para él, quería tener tu atención, quería ser irremplazable para ti. Sería lo que quería, el siempre tenía que lo quería.

No estaba siguiendo órdenes más que de si mismo. Cada día estaba peor que el anterior, ganas de llorar por la impotencia de ser tan ridículo y no hacer las cosas rápido, pero no lloraba, era un hombre, asesino en serie y a sangre fría, no haría cosas que lo dejen en ridículo frente a cualquiera que lo vea. La rabia se iba apoderando de el otra vez, tomo el cu hillo y apuñaló al Proxie que asesinó hace poco, lo apuñaló tan rápido que su cuerpo se iba haciendo pedacitos rápido, y llenaba el suelo con sangre, aún más sangre de la que había antes.

— Ahg.... Tengo... Qué terminar con esto rápido....

Lo haría rápido, así que siguiendo a sus instintos de asesino, iría a buscar a Toby y lo mataría de la manera más dolorosa que se le ocurra, o puede que lo mate a él, pero haría lo que fuera para que su amada fuera solo de él, nadie más la tendría. Busco el arma del asesinado, pero ya no estaba, necesitaba eso para estar más armado de lo que ya estaba, no sabía dónde podría estar, la busco en todos los bolsillos que encontró y no había nada, ya estaba arto. Pateó el cuerpo múltiples veces hasta escuchar los huesos romperse...

— Perdóname querido amigo, pero ella es y será solo mía....
Lo siento.... Hoodie...