Yu-Gi-Oh! Arc-V: El quinto factor

Capítulo 14 - Invitación al Purgatorio

"¡Quítame tus sucias manos de encima! ¿¡No sabes quién soy!?"

Sawatari gritaba cuando un oficial de seguridad lo empujó hacia el vehículo de transporte de prisioneros. Yukio suspiró para sus adentros ante la rabieta sin sentido de Sawatari, que era francamente una pérdida de tiempo y energía.

"¡Callarse la boca!" Ordenó el oficial al duelista de cabello rubio. "¡Entra ya!"

Habiendo perdido la paciencia con Sawatari, el oficial lo arrojó sin contemplaciones dentro del vehículo, arrojando a Crow y Shinji encima de él después de que Sawatari intentara seguir quejándose. A pesar de la gravedad de la situación, Yukio no pudo evitar encontrar esto divertido.

"¡Ustedes tres, apúrense y entren también! ¡No tenemos todo el día aquí!"

Al decir eso, otro oficial empujó a Yukio, Yuya y Serena dentro de la parte trasera del vehículo de manera brusca. Al menos no los tiraron también, algo por lo que Yukio estaba agradecido".

"¡Espere por favor!" Yuya suplicó frenéticamente a los oficiales. "¡Reira! ¿¡Dónde está Reira!?"

"¡Deja de luchar y entra!"

Ignorando sus palabras, el oficial cerró las puertas del vehículo en la cara de Yuya. Mientras tanto, Frank, Amanda y Tanner intentaban acercarse, pero Seguridad los retuvo.

"¡Ustedes!" Cuervo se dirigió a los niños. "¡No te preocupes por mí y come bien!"

Inmediatamente después de eso, el vehículo de transporte comenzó a moverse. Mientras tanto, Yuya estaba ocupado golpeando las paredes, tratando en vano de llamar la atención de los guardias.

"¡Oye! ¡Puedes oírme, ¿no?! ¡Detén este vehículo, te lo ruego!"

"Cálmate, Yuya". Cuervo le aconsejó. "No hay forma de que te respondan".

"Pero... ¡tengo que encontrar a Laira!"

"No tienes que preocuparte por él". Serena dijo inesperadamente. "Vi a Tsukikage deslizarse durante la confusión y llevárselo".

"¿Qué?" Yuya parecía sorprendida, un sentimiento compartido por Yukio. "¿Tsukikage lo hizo?"

"¿Tsukikage?" Cuervo se preguntó. "¿Es uno de tus camaradas?"

"Así es." Serena asintió. "Debe haber estado buscándonos a nosotros y a Laira bajo las órdenes de Akaba Reiji. Alegrémonos de que al menos logró rescatar a Laira de ser capturada".

"Sí, eso es una cosa menos de qué preocuparse". Cuervo estuvo de acuerdo. "¿No es genial, Yuya?"

"¡Que no es!" Sawatari exclamó mientras miraba a la cámara sobre sus cabezas. "¡Esto es claramente un arresto por error! ¡Cuando mi papá se entere de esto, todos ustedes serán despedidos! ¿¡Oyeron eso, bastardos!?"

"Siéntate, idiota". Yukio habló con un tono mordaz. "¿Necesito recordarte que estamos en la Dimensión de Sincronía y que tu papá no tiene absolutamente ninguna autoridad aquí? Más importante aún, tengo curiosidad por saber cómo nos descubrió Seguridad en primer lugar. Después de todo, estábamos escondidos dentro de la casa de Crow durante los últimos días, por lo que no deberían haber podido rastrearnos allí. A menos que..."

Yukio comenzó a escanear los rostros de todos, notando que Serena y Sawatari se veían incómodos mientras desviaban la mirada levemente. Si estas no fueran expresiones de culpa, entonces Yukio era un elefante.

"Está bien, ustedes dos, hablen". Yukio entrecerró los ojos hacia los dos con una expresión francamente asesina en su rostro. "¿Qué clase de truco estúpido hiciste?"