030522

15 1 0
                                    

Escondía ese tatuaje del alma, la sonrisa y los ojos.
Lo escondía para intentar dejar de sentirlo, para olvidarlo.
No porque yo quisiera, sino porque él me lo había pedido.
Regresé aquel parque y la anciana estaba ahí, me senté a su lado, la miré y bajé la cabeza.
En algún momento, todos somos cobardes en el amor. Me dijo con la intención de consolarme.
Intento olvidarlo, él me lo pidió, me dijo que hiciera como él y qué lo olvidará.
¿Crees que te olvidó? Me preguntó alzando su mirada.
Si me dejara guiar por lo que yo creo, seguiría insistiendo.
¿Y qué crees tú?
Creo que solo escapa
¿Escapar de qué?
De lo que siente y no lo puedo juzgar, porque yo también he escapado de lo que siento por él.
¿Por cuánto tiempo podrán escapar? ¿Por cuánto tiempo estás escapando?
No tengo respuesta a esa pregunta.
¿Lo quieres?
Sí, no tengo dudas de ello.
Entonces lucha.
¿Sabe usted mucho de amor y eso?
No, de amor no se sabe todo, pero si no luchas terminarás arrepintiendo te, eso sí lo sé.
Bajé mi mirada y se me aguaron los ojos.
No pierdas el tiempo llorando y actúa, me dijo con un tono severo.
Luego se levantó y se fue, sin decir adiós.
©SAM

290322 En la Playa sin ti 💙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora