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Capítulo 15, Parte II:

Lágrimas exhibidas.

Largas eran las noches
cuando mis días giraban alrededor de ti.

Contando mis pasos, rezando para que el suelo no se derrumbara otra vez.

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No dejó pasar la mirada apreciativa y cargada de ilusión que le dio el primer hombre con el que chocó sus ojos... Se trataba del tipo de cabellos rojizos y múltiples perforaciones que hacía unos cuantos showrooms atrás le preguntó a John por ella. Vagamente recordaba su nombre, quizás era algo japonés que no le venía a la cabeza en ese preciso instante. Si ponía atención suficiente en sus faccciones, Miranda podía deducir dos cosas, era irrealmente guapo y claramente extranjero.

-Creo que la noche ha comenzado con buen pie -Aquello lo dijo mostrando sus perfectos dientes, en una sonrisa taimada que le ocasionó un calor incontenible sobre sus mejillas. Miranda no podía entenderlo, pero el hombre era atractivo pese a su insolencia irreverente-. Junmyeon-hyung perdería la cabeza si no aparecían en los próximos minutos. -Burlándose claramente de su amigo, el de más baja estatura y un ligero ceño fruncido, ella les miró tras la máscara. Los reconoció de su primera noche como chica estrella.

Por lo que podía notar a simple vista, tenían alguna relación estrecha con John, no sabía de qué tipo o hasta qué punto, pero por la forma en que el más alto reía aligerado, apostaba que mantenían alguna clase de amistad. Al contrario que con su "jefe", el saludo hacia Jung Yoonoh fue más escueto y casi sobreactuado. El de cabellos rojizos incluso le esbozó una sonrisa cargada en sorna, demostrándose superior a él sin mediar palabras.

Oh, riña de imbéciles.

-¿Soonkyu noona lo ha hecho ella completamente? -Junmyeon, el más bajito, preguntó con gran interés al notar el traje que la chica llevaba. John, quien le hacía sombra a su costado, asintió lentamente como si aquello no fuese nada fuera de la común.

El hallarse hundida entre John y Yoonoh no le provocaba el sentimiento placentero que puede que una fantasía oscura le ocasionase. Por el contrario, una soga ataba su cuello de una manera insoportable, sintiéndose apresada entre sus altas figuras. Ambos le hacían sombra, igual que un par de perros guardianes que cuidaban a su adorado amo, era un poco descabellado pesarlo así, pero los dos le estaban cubriendo las espaldas por razones distintas.

-Aunque, tiene una pasante que es bastante buena -Confirmó antes que Miranda pudiese replicar en queja. Su lengua se sintió inquieta de sólo pensar en Leah y lo mucho que había trabajado en el patronaje de aquél diseño, su amiga debía llevarse el crédito merecido por su esfuerzo-. Se ha encargado de las costuras y los toques finales. Noona piensa que tiene talento.

Acercándose a paso lento, Junmyeon le hizo frente, estudiando el diseño del traje que llevaba ignorando el hecho que ella realmente estabaa bajo toda la tela como modelo. En líneas generales, era sólo un maniquí que respiraba, y aquella era la manera más amable de describir su partícular empleo. El hombre sólo intentaba ser respetuoso con ella, revisando el diseño de una forma meticulosa que casi daba miedo.

-Lo tiene. -Sin poner un sólo dedo sobre su figura, detalló muy bien las mangas del enterizo, fijándose por último en el estilo de corset que ataba perfectamente a su menuda cintura.

-¿Te gusta, entonces? -A John su voz lo delataba, le gustaba tener un negocio como ese tan fácilmente ganado. Y aunque que el hombre bajito ante ella lucía bastante convencido con su decisión, no parecía listo para darle un completo "sí" al más alto.

𝐑𝐢𝐜𝐡 𝐆𝐢𝐫𝐥𝐬 𝐃𝐨𝐧'𝐭 𝐂𝐫𝐲 [NCT REVERSE HAREM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora