Prólogo

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A Hyunjin la tristeza algún día le mataría el corazón.

Ver las fotografías de ambos le traía tantos recuerdos que no sabía si debía de sonreír por haberlos vividos o deprimirse en una abrumadora melancolía. Nunca quiso tener una relación con alguien más luego de él, sin embargo, las cosas jamás resultaron como pensaba que acabarían.

Él no debería de estar viendo al mar que lo vió nacer y crecer mientras se preguntaba porque jodió su vida, debería de estar tomado de la mano de esa persona especial y nadando junto con sus hijas, con la bella familia que formaron.

Quizás la historia jamás debió de haber terminado como acabó, muchas cosas las pudo haber hecho muy distintas, sin embargo, solo tienes un chance de hacer las cosas bien o mal, el tiempo pasa y muy rápido y cuando menos te des cuenta o la cagaste o ganaste, no existía un punto medio.

Le encanta recordar cómo es que su romance comenzó y lo que más les unía y ambos disfrutaban: El arte y la lucha libre.

A Changbin le gustaba la lucha libre y Hyunjin amaba el arte, en especial los murales.

Son dos cosas distintas ¿Verdad? ¿Cómo es que podría existir un equilibrio entre sí? Si la lucha libre se combina con el arte y el espectáculo y el arte expresa los sentimientos más reprimidos de una persona.

Changbin podría volverse loco con tal de mantener la seguridad de su amado, haría lo que sea con tal que de este estuviera bien.

Todo, menos alejarse cuando era el momento indicado antes de que las cosas se salieran de control.

El Luchador (ChangJin - Skz)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora