Mi Señor, Quiero Que me Mate.

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One-shot: Mi señor, quiero que me mate

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One-shot: Mi señor, quiero que me mate.

Aome fregó el piso con más fuerza de la necesaria, estaba molesta, muy molesta, y es que entre más lo pensaba más le molestaba aquella situación.

—. Aome basta— Sesshomaru la tomó de una mano deteniéndo sus movimientos violentos contra el pobre piso, ella mantuvo la mirada en el suelo, no era digna de mirar a su amo a los ojos—,ya hemos hablado de esto antes— apretó los labios aguantando el impulso de interrumpirlo—, ahora eres la señora del oeste, ya no eres una esclava y mucho menos debes ser mi sirvienta—podía oír la molestia en su voz, y no lo culpaba, habían caído en esa situación porque ella no fue lo suficientemente decidida.

—. No tiene por qué hacer esto mi señor— dijo con un nudo en la garganta, hace seis meses no había tenido el valor suficiente para abrazar la muerte, pero ahora, que veía el daño que su deseo por vivir había causado no temía, lo veía más como una forma de enmendar sus errores—, sabe que la solución es muy fácil, solo mateme mi señor—pidió con lágrimas en los ojos y la voz ahogada, Sesshomaru apretó levemente su brazo.

—. Sabes que eso no pasará— dijo en un tono que no permitía discusión, se mordió la lengua, sabía que aunque lograra molestarlo él no le pondría un dedo encima, en los últimos seis meses que tenían como esposos él jamás amenazó su integridad física o su vida—, deja de hacer eso— dijo irefiriéndose a fregar el suelo—, y ve a que te preparén, esta noche debes venir a mi cama— su cuerpo se estremeció al escuchar esas palabras, sabía perfectamente que día era, aunque no quisiera admitirlo, ella esperaba con ansias ese día de la semana—, por favor— pidió en un tono suave, uno que solo usaba con ella, se estremeció, el amo Sesshomaru no sabía lo que provocaban en ella esos pedazos de consideración y amabilidad.

Se levantaron del suelo, pero ella continuó mirando en esa dirección, no se sentía digna de mirarlo a los ojos, escuchó a Sesshomaru suspirar—. No entiendo porque sólo me miras a los ojos cuando te lo estoy...— actuó por inercia, en un rápido momento sus manos tapaban la boca de aquel alto y poderoso youkai, miró la diversión en aquellos ojos ámbar, ¡Lo había hecho a propósito! Las mejillas le iban a estallar de la vergüenza, con suavidad el peliplata la tomó de los brazos y apartó sus manos de su boca—, así que te avergüenza que hable de lo que hacemos en nuestra cama— aunque le pareció increíble, sintió más calientes sus mejillas, miró como una sonrisa traviesa del ojos ámbar dejaba al descubierto unos blancos y perfectos caninos, su cuerpo se estremeció ante el recuerdo de ser mordida por esos dientes.

La sonrisa en los labios del peliplata creció un poco más, entonces soltó sus brazos y le tomó el rostro, fueron segundos los que pasaron antes de que los labios del peliplata besaran los suyos, Aome sintió que se derretia, nunca había besado a nadie más que Sesshomaru, pero estaba segura que la manera en la que él besaba debía ser la mejor del mundo—. Ve a que te preparen, esta noche ni siquiera pienses en dormir— dijo con los ojos ámbar brillantes y un tono que le hacia querer ponerse de rodillas, asintió obediente.

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⏰ Última actualización: Apr 17, 2023 ⏰

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